Un Giro de Encuentros (Christopher y tú)

Un nuevo amor

Me miró de arriba y abajo. Estudiando cada parte de mi cuerpo.

-¿Cómo te llamas?-Sonrió-.

-Lorca-Dije firme. No iba a caer en su truco,siento que es uno de esos chicos que juegan con las chicas-.

-¿Tu nombre linda?-.

-_____ Lorca ¿Y tu,cómo te llamas?-.

-Diego, Diego Flores-.

-Un gusto-Estrechamos las manos- Ahora sí,me tengo que ir ya es muy tarde,mis padres estarán preocupados-.

-Te llevo- Negué​- Dale,soy una buena persona,a parte creo,si no me equivoco, conozco a tus padres- Alcé las cejas incrédula- Se llama Jorge Lorca ¿A que sí?-.

Lamentablemente acertó, él empezó a reírse al darse cuenta que me ganó.
Y volvió a insistir para llevarme.

-De acuerdo, llévame- Sonreí- Pero, tambien quiero algo tuyo-.

-¿Algo mío? Esto se vuelve interesante-.

Me guiñó un ojo, agarró mi mano y me llevó hasta su moto,me pasó un casco y me ayudó a subirme.

-Agárrate fuerte preciosa al menos si nunca te has subido a una moto-.

-No,jamás lo hice. Trata de ser amable y no andar fuerte-.

-No prometo nada-.

Arrancó la moto e hizo justo lo que le dije que no haga. Íbamos a una gran velocidad,al principio me dio miedo y sin darme cuenta me aferré a él.

-Llegamos ____-.

Me ayudó a bajar,le di el casco y me agarré el pelo con las manos.

-Gracias Diego-.

Le sonreí como una tonta. Al darme cuenta de eso,me di la vuelta y me fui hacia la puerta de entrada.

Antes de introducir la llave a la puerta,mi mamá la abrió haciendo que me asuste.

-¡Oh, Diego!- La miré confundida- Escuché la moto,y supuse que eras tú-.

Diego se acercó a nosotras y saludo a mi madre como si fueran gran amigos.

-¿Quieres quedarte a comer? Llamaré a tu madre y le diré a Jorge que invite a Luis, ¿Te parece?-.

Me dio unas ganas de gritar qué no venga, todavía no me cerraba algo.

-Sería un placer- Me miró sonriente-.

Mi madre lo invitó a pasar. Fueron directo para la sala,yo en cambio,me fui hacia mi habitación.
Me cambié y traté de peinarme ya qué la maldita moto me arruinó el peinado.

Bajé las escaleras y me dirigí hacia la cocina,le pedí a Dolores que haga de comer pastas.
Salí y fui para la sala.

-Ah,hija- Me habló mi madre,me senté al lado- Le estaba contando a Diego todo lo que pasó en estos últimos meses,la mudanza,los cambios,el trabajo de mi padre,el mío y el tuyo-.

Reí falsamente y mi madre notó eso,ya que dejó de sonreír. Se fue a la cocina con Dolores.
Dejándome sola con Diego. Ay como la amo a mi madrecita.

-Qué intensa que se pone-.

-No,para nada,es una divina-Se quedó en silencio y luego dijo- No me dijiste que querías de mi-.

-Ah sí, cierto. Ven,vamos a mi habitación-.

Él me miró raro y empezó sonreír maliciosamente.

-No haremos nada idiota- Reí- Sólo qué no me gusta estar acá,me siento más cómoda hablando en mi pieza- Me hundí de hombros-.

Subimos las escaleras y entramos a mi habitación. Él se sentó en mi cama y yo lo imité.