Vera se quedó patidifusa:
-¿De verdad quieres seguir al lado de alguien que te hace daño?
-Vera, no quiero alejarme de ti, no quiero, no puedo.
Sin previo aviso, tomó sus mejillas y de un movimiento inesperado besó a la joven de cabellos de miel:
-Cumplamos nuestra promesa -dijo Iria.
-Yo no quiero estar con él, yo quiero pasar toda mi vida contigo.
-¿Y crees que a mi me agrada verte junto a Jackson? Pero debes hacerlo por tu familia, por vuestro bien, Ford es una competencia horrible, no os viene bien ser sus enemigos.
Vera se levantó y cogió de la mano a la pelirroja. Ella no sabía dónde la llevaba. La arrastró a lo largo de toda la fiesta hasta llegar a su habitación. Entraron y Vera cerró la puerta.
Se sentaron en la cama y la muchacha sacó una vieja cámara instantánea que tenía guardada en un cajón:
-Con esto no nos olvidaremos -dijo la chica.
Comenzaron a hacerse una foto tras otra, riendo, abrazadas, acariciándose, besándose...
Vera fijó la mirada en Iria:
-Prometo cuidarte y quererte siempre.
-Prometo amarte y estar contigo siempre -respondió Iria.
-Hay promesas que nunca se cumplen aunque lo desees con todas tus fuerzas -dijo Vera cabizbaja- Eso me da miedo, porque el día que dejes de amarme... yo no sé que haré.
La muchacha de pelo similar a un pétalo de rosa, levantó su mentón y la miró a sus ojos de chocolate:
-Vera, no tengas miedo por eso, yo te quiero y siempre te querré. Incluso cuando te vi con Jackson, te quise, incluso cuando me ignoraste, te quise, o incluso cuando aún no sabía lo que sentía, te quise. ¿Qué crees que puede pasar para que un día te deje de querer? Ese día será el día en el que muera por que estando con el corazón latente, no pienso dar ni un latido sin que resuene tu nombre en él.
-No digas eso, porque eso significa que te perderé y no quiero, prefiero que me dejes de querer a que mueras. Por favor, nunca dejes que tu corazón se pare, aunque mi nombre no lata en cada latido. Yo te quiero mucho y no quiero que dejes de amarme, pero si tengo que elegir entre tu vida y tu amor, escojo tu vida diez veces antes.
-Pero Vera, ¿no lo entiendes? Yo no quiero vivir sin ti -dijo alzando un poco la voz- No puedo vivir sin ti, te has vuelto una obsesión para mi y no puedo dejarte. Sin embargo, tengo que ver como Jackson te pone el anillo de boda.
Vera se sintió mal, no quería hacerla sufrir. Puso su mano en la mejilla y la miró a sus profundos ojos, tenía una mirada dulce y triste. Se acercó lentamente hasta que sus labios chocaron, y dejaron que un beso sellara aquel amor que llevaban en secreto.
De repente, hubo algo que les interrumpió, algo inesperado, algo que les traería problemas.
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Iria
Teen FictionTodos somos simples cuerpos, un trozo de piel y sangre sin apariencia importante. Lo interesante no es la envoltura, sino todo lo que nuestro cuerpo contiene, esos sentimientos reprimidos que deseamos gritar sin más. Eso es lo que importa, lo mister...