Vientre de Alquiler

Capítulo 5: Donceles, un deseo concedido.

Capítulo 5: Donceles, un deseo concedido.

Su mente divago unos segundos luego de la información recién recibida, solo fue capaz de regresar a la realidad cuando la menuda figura de Castiel se posó frente a sus ojos, llevaba nuevamente sus pantalones de jeans desgastados y el suéter beige que también usaba la vez anterior.

—¿Eso era todo? —Consulto el menor mirando atento a Christopher, que por primera vez parecía desconcertado y confundido, muy diferente a la expresión seria y segura que llevaba de costumbre.

—No, no es todo, hay algo que quisiera explicarles a ambos. —El tono serio del médico no dio espacio a replicas. —Síganme a mi despacho por favor. —Comenzó a caminar con el par de jóvenes a sus espaldas.

—¿De qué se trata todo esto Robert? —Christopher no recordaba haber acordado una charla, él era un hombre ocupado, no podría pasársela todo el día en la clínica conversando.

—Yo nunca antes he atendido a un doncel —Admitió. Luego observo por unos segundos el rostro de Castiel, el muchacho parecía no entender nada de lo que sucedía a su alrededor. —Hay información sobre ellos, sin embargo, Castiel ha sido el primer Doncel al que he atendido en mi vida, y algo de la información explicada en libros he logrado corroborarla.

—¿De qué hablas? ¿Cómo que el primero? —Christopher estaba nervioso, pensó que su amigo tendría más experiencia, era una eminencia dentro de su campo laboral.

—El primero —Repitió sin amilanarse, a pesar de la expresión poco amistosa que Christopher había puesto a tan solo segundos de escucharle. —Él es el primero al que atiendo, esta es una clínica privada y muy lujosa, mis altas calificaciones y recomendaciones que dieron mis profesores acerca de mí, fueron la causa de que yo consiguiera este grandioso trabajo apenas abandone la universidad. No pretendo contarles la historia de mi vida, pero gracias a este empleo yo jamás he trabajado en el sistema público, —confeso, —este muchacho, —apunto a Castiel, —es el claro ejemplo de la realidad que un 80% de los donceles vive en este momento, son pobres, no tienen derechos, viven en situaciones precarias, sufren de abuso, mala nutrición, no poseen acceso a la educación y así sucesivas cosas más. —

A medida que hablaba veía como el joven escondía su rostro, como si estuviesen nombrando una serie de crímenes de los cuales él era culpable y se sentía avergonzado por ello.

-Es lógico que viviendo en de esa manera todos se atienden en hospitales del sistema público, a pesar de lo mal que son tratados los donceles hay un derecho que ellos tienen, en todo el mundo, —aclaro, —la salud. Nadie los reconoce como seres humanos, pero de algo estamos todos seguros y es que gracias a esta extraña raza de personas se ha conseguido preservar la especie, —explico, —se les otorga salud, porque sus vientres son necesarios para la humanidad y si un doncel queda en estado son protegidos por la ley, pues la justicia defiende al espécimen en desarrollo. —

—¿A dónde vas con tanta palabrería? —Christopher estaba molesto, no sabía bien a donde iba tanto parloteo de parte del médico, Castiel, por el contrario, a Chris, se encontraba hundido en la silla con la cabeza gacha y las manos tensas, Robert continuaba su plática sin pensar si quiera en los sentimientos del menor, el poco tacto del médico era una razón más para que Christopher estuviera molesto.

—Como siempre tan impaciente. —Suspiro el medico ante los reclamos de su amigo. —Voy a esto. —Saco de un cajón un libro de anatomía ilustrada y lo abrió frente a los ojos de sus pacientes, rebusco entre las paginas una imagen y luego la extendió para que la vieran. —Esta es la anatomía del doncel, la clase se empezó a impartir en medicina desde hace años atrás y este libro es uno bastante actualizado, con los estudios detallados de la anatomía humana, incluyendo donceles —Acoto.