La Cura - Fanfic Alren

C26 - Dolor

Narra Lauren

Terminé de vestirme y escuché como sonaba un claxon en la calle, miré por la ventana y el automóvil se acercaba a la acera de mi casa.

Me puse mis botas y bajé por las escaleras lentamente, los mareos ya eran menores pero de vez en cuando llegaban y me hacían perder el equilibrio.

El timbre se escuchó en la sala, ví a mi hermana Taylor correr hacia la puerta y antes de que pudiera abrir ella lo hizo primero.

Hola, ¿se encuentra Lauren, cómo te llamas? - me acerqué a mi hermana y me miró a la misma vez que me cuestionaba con sus ojos penetrantes.

Laur...te buscan - le sonreí a mi hermanita y la detuve antes de que regresara a su habitación.

Tay, no seas grosera… - Taylor suspiró y le dió la mano.

Hola, soy Taylor Jauregui, la hermana menor de Lauren - sonreí porque cuando mi hermana estaba incómoda su actitud era adorable.

Mucho gusto Taylor, mi nombre es…. - mi hermana se rió y la miré enojada.

Yo sé quién eres, todo el mundo habla de ti en mi escuela, eres Ashley Thompson la co-capitana de las porristas - Ashley movió su cabello y le sonrió a mi hermana.

Me alegra que sepas quién soy y que hablen y que todos me conozcan - mi hermana miró por el espacio abierto de la puerta y suspiró.

Lo que dicen de ti no es nada bueno - la porrista apretó su quijada y su cara se pigmentó con un color rojo “furia”.

¡TAYLOR! Ve a tu habitación - mi pequeña hermana asintió sonriendo y comenzó a correr por las escaleras - Lo siento mucho Ashley, ella no suele ser así.

No te preocupes bonita, los niños dicen muchas tonterías - mi hermana no decía tonterías - mejor vamos a tu habitación y empecemos a pasar los apuntes.

¿Y si mejor estudiamos aquí en la sala? - Ashley negó y cerró la puerta.

No, tu habitación es mejor, no nos van a distraer y tu hermanita no volverá a ser grosera conmigo - sonreí molesta, desde ya quería matarla.

La porrista y yo subimos a mi habitación, Ashley miraba mi cuarto, veía cada detalle y rara vez se detenía a mirarme.

Se acercó a mí escritorio y tomó uno de mis almanaques, lo revisó y volteó a verme con el pequeño librito pegado en su pecho.

¿Por qué tienes tantos de estos? - me acerqué a ella y se lo quité.

Era el almanaque de edición especial que me regaló Ally el día que cumplimos 2 meses. Era para coleccionistas y en el paquete de la edición incluyeron un mini globo terráqueo de plata que pesaba mucho.

No lo sé, yo los colecciono, me gusta aprender cosas nuevas - me lo quitó nuevamente, lo revisó y lo dejó en mi estantería, en el lugar equivocado.

Pero todo lo puedes buscar en internet, no sabía que eras de esas chicas nerds - levanté los hombros, Ally nunca pensó eso de mi.

Pero todos son ediciones especiales, además las ilustraciones son hermosas y los datos son recolectados por fuentes muy confiables - tomé el libro y lo puse en el lugar correcto.

Como sea, ven vamos a tu cama - Ashley me tomó de la mano y se sentó en mi cama obligándome a sentarme junto a ella.

La porrista sacó sus cuadernos de la mochila y una pluma de tinta azul, los dejó sobre la mesa de noche y me miró mientras arreglaba su cabello.