Narra Ally
El gran día había llegado, 7 de Julio, este día se quedaría marcado para siempre en mi memoria.
No sabía si era producto de mi imaginación o en realidad estaba sucediendo, la casa estaba en completo silencio, no se escuchaba a mamá haciendo el desayuno, papá no veía la televisión y al abrir los ojos ví que la habitación estaba oscura, no había absolutamente nada, mis estanterías, mi clóset y mis cosas no estaban, sólo era yo en la cama y con cada parpadeo la habitación se hacía más oscura.
Me levanté de la cama y descalza comencé a caminar, el pasillo estaba completamente oscuro y al final del mismo una sola vela estaba encendida. Caminé hacia ella, tenía mucho frío y miedo, nada se veía real, no veía nada... tomé la vela entre mis manos y seguí el camino.
Una puerta dorada llamó mi atención, con pasos suaves y volteando a ambos lados llegué hasta ella y la abrí, la nueva habitación era blanca, mis ojos se cegaron por uno momento, 4 lámparas irradiaban su luz sobre mi.
En medio de la habitación había un montón de sábanas blancas, apagué la vela y me acerqué, la tristeza me golpeó con fuerza y comencé a llorar. Allí entre las frazadas estaba el cuerpo sin vida de Lauren, pálida, inmóvil y llena de sangre en las manos.
Sentí paralizarme, el miedo me invadió y mis ganas de abrazarla se hicieron grandes... lo hice, la abracé.
-¡Lauren, mi amor! ¡Lauren, despierta! No me dejes Laur, prometí que te iba a proteger, prometí que te cuidaría, perdóname mi amor, te fallé. Lauren, despierta. Te amo Laur-.
Dejé de abrazarla y ahora mis manos y mi pijama estaban manchadas de sangre. Quería gritar pero no podía emitir ningún sonido.
Un golpe fuerte me hizo voltear, no era nada, comencé a preocuparme cuando sentí que una fuerza mayor me arrastró por la habitación alejándome del cuerpo de mi prometida.
-¡Lauren, perdóname, te fallé, perdón, te amo, no me dejes! ¡LAUREEEEEEN!-
La puerta volvió a cerrarse y está vez quedé acostada sobre el piso frío del enorme pasillo oscuro, la soledad se sentía real, la oscuridad daba miedo y la tristeza por perderla se convirtió en dolor.
¡Ally! ¡Ally! Despierta - sentí que alguien me rodeaba con sus brazos y me movía con brusquedad, era una voz conocida - Ally, por favor, tienes que despertar - el dolor en el pecho se disolvió y nuevamente estaba en la realidad - ¡Ally! - abrí los ojos y ahí estaba ella, mi novia, la única persona que podía hacerme feliz con solo mirarme.
¡Lauren! ¿Estás bien? - me abalancé sobre sus brazos y la abracé con fuerza - Oh por Dios.
La que debería de hacer la pregunta soy yo... estás sudando y gritabas mi nombre - miré a mi alrededor, mi habitación era la misma de siempre - ¿Quieres contarme acerca de tu sueño? - negué.
Será en otro momento, ahora solo quiero besarte - acaricié sus mejillas detallando cada pequeño espacio de su piel - te amo - la besé con delicadeza, disfrutando de cada toque entre nuestros labios.
Wow - miré lo sonrojada que estaba, se veía preciosa - y yo que solo venía a desearte feliz cumpleaños - tomó el pequeño pastel que estaba en mi mesita de noche y lo puso frente a mi - felices 19 princesa.
No tenías que hacerlo - besé su mejilla y sonreí - a partir de hoy el 7 de julio será nuestro día, no sólo el mío.
Aún así quise hacerlo, le pedí a mi padre que me trajera pero tengo que regresar porque mamá me espera para ayudarme con todo lo de la boda - las mariposas que sentí al conocer a Lauren regresaron multiplicadas por cien.
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La Cura - Fanfic Alren
FanfictionExisten momentos en qué te cuestionas los grandes paradigmas de tu vida. Mi vida no era perfecta pero tampoco me podía quejar, tenía a mis padres y mi hermano, tenía a mis 3 mejores amigas y digamos que me iba bien en muchas cosas. Aun con lo que te...