Bite

서른 - Thirty

- ¿Que hice? ¿Que hice?

Taehyung corría entre los enormes pinos que se encontraban en el bosque, tratando de tranquilizar su respiración y así mismo sus impulsos tontos, de querer regresar y besar al menor.

- ¡¿Pero que mierda me pasa?!

Golpeó el tronco de un pino haciendo que éste se derribara.

- Pero... ¿Que?

- ¿Que haces aquí Taehyung? Deberías estar con tu humano, ya te dije que tú te encargas de que el duerma temprano y que despierte de igual manera.

Ya decía yo... En verdad, yo no podría poseer tanta fuerza.

- ¿Tu que haces aquí Nam?

- ¡Joonie! ¡Estúpido chupa sangre! Te dije que me espe-... ¿Ah? H-Hola Taehyung.

- ¿Jin?

Miró a su hermano que tenía dos de sus dedos en su sien, sobándola.

- Jin me pidió practicar, realmente le llama la atención lo que podemos hacer.

- Taehyung... ¿Cual es tu don?

- ¿No lo viste en "la batalla"? Perder el control y hacer estupideces es mi don.

Se encogió de hombros y su trasero fue a parar al suelo.

- Bueno... Que seas un estúpido no se puede poner como don pero si tú lo dices...

- Gracias por tus gratas palabras hermanito.

Se quejó el menor y Jin se sentó a su lado.

- ¿Quieres hablar sobre eso?

- No, realmente es vergonzoso.

Bajó su mirada y jugó con sus dedos mientras Nam se le quedaba viendo a ese par.

- Se trata de ¿Eso?

Namjoon colocó su dedo índice en el pecho de su hermano, dándole a entender que hablaba del corazón.

- Yo-... Esto... No se que es.

Se encogió más en su lugar y se abrazó.

- Nam... Déjame con él.

- Como sea, te espero en la habitación, debes dormir temprano...

- Lo sé, ahora shu~

Prácticamente lo corrió de ahí y quedo a solas con el menor.

- ¿Es Jungkook?

- ¿Ah? ¿Como sabes...?

Volteó su rostro un tanto avergonzado y después miró de nueva cuenta hacia abajo.

- Se nota mucho ¿Cierto? ¿Tan obvio soy?

Se reprochó a si mismo con un bufido y el ceño fruncido.

- Mira Taehyung... Yo, lo supe desde un inicio, Jungkookie pasaba más tiempo contigo que conmigo, a pesar de que eran equipo había momentos en los que deberían de estar separados pero no era así, Jungkook también puede ser un idiota, más cuando no sabe reconocer sus sentimientos, es un chiquillo y es inmaduro... Debes ser paciente, si de verdad lo quieres...

- ¡Nadie habló de querer! Solo... Estoy confundido, es todo... No necesito tu sermón, es esta cosa dentro de mi que...

- Se llama corazón y es bueno que bombeé de vez en cuando... Cómo ahora cuando digo que... Jungkookie, a él realmente le gustas.

Y como Jin había dicho, el corazón de Taehyung bombeo unas tres veces seguidas.

De inmediato tocó esa parte sintiéndose raro y se levantó bruscamente.

- M-Me voy.

- Espero que te haya servido de algo hablar conmigo.

Se levantó después Jin y le sonrió.

- Pues... Nada, g-gracias.

Esto último lo susurró saliendo de ahí.
~~~~~~~~~

- ¿A caso todo está en mi contra?

Le dijo al reflejo que se presentaba en un charco de agua.

Estaba sentado en medio del bosque pensando en lo que había dicho y lo que Jin le había comunicado.

- Yo realmente... No puedo sentir.

Se negó rotundamente a sentir algo más que gusto por el azabache.

Apretó con fuerza su pecho y respiro hondo, sintiendo como este latía una vez más.

- ¿Que estoy haciendo?

De repente comenzó a sentir sed, su garganta se secó y parecía que necesitaba algo de beber, rápido, pero no cualquier cosa, si no sangre.

Sus ojos rojos dejaron ver que había perdido la cabeza, estaba de cacería ahora y no se detendría hasta tener una presa.

Comenzó a correr en busca de sangre, sediento, con el corazón frío, con sus colmillos fuera de sus labios, con la mirada perdida, sólo siguiendo su instinto y sus ganas de sacearse.

Un pequeño cordero yacía entre los matorrales y un hambriento chupa sangre marcó su final en esa tierra en solo segundos.

- No es suficiente...

Su voz se hizo rasposa y grave, tenía la mirada macabra y la boca manchada de sangre, sus manos escurrían con el líquido caliente.

Pero eso no era lo que quería, eso no lo sacearía.

Quiero más, anhelo más, quiero... La sangre de...

- ¿Taehyung? Con que aquí estás.

Lo miró de espaldas, no se percató del cuerpo moribundo de aquel​ cordero.

Jungkook... Por favor, vete... ¡Huye!