Capítulo 10

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Esta mañana había despertado feliz, después de dos días en el hospital le darían el alta a Mia y el lunes ya volvería a la oficina, ya me hacía falta esa rubia y sus ocurrencias aquí por la oficina vagando cerca de mí en vez de estar en su escritorio.

Al entrar a la oficina, veía a todos moverse de un lugar a otro, no sabía lo que pasaba así que pregunte a la primera persona que se me cruzó en frente. Al parecer el señor Belov y Erik, habían convocado una reunión urgente. Parecía ser una invitación para una propuesta de trabajo importante que había llegado y necesitaban la colaboración de los arquitectos de la empresa. Erik no volvió el día de ayer después de almorzar así que no me había comentado nada.

Llegue a mi escritorio y Erik iba saliendo de su oficina acercándose a mí me entregó unos folletos y me indicó que lo siguiera.

—Buen día Reed —mencionó sin dejar de caminar —Tendremos una reunión, tenemos una invitación importante para un concurso, la invitación apenas llego, y no tenemos mucho tiempo, necesito que entregue eso a cada una de las personas que asistirá —me indicó deprisa.

Mi función como secretaria de Erik era asegurarme de que todo estuviera en orden así que mientras él se fue a la oficina de su padre a arreglar los últimos detalles yo verifique que todos los arquitectos que fueron llamados a asistir se presentaran mientras iban llegando les entregue los folletos que Erik me había entregado.

—Buen día Gabriela —me saludo Izan parado frente a mí.

—Buen día Izan, toma —le entregué uno de los folletos y le mostré una sonrisa.

Estaba por decirme algo más, pero Erik y su padre llegaron a paso rápido, cuando Erik paso frente a nosotros nos dijo que estaba por empezar que sería mejor que buscáramos nuestros lugares.

La sala de conferencias estaba llena. Los arquitectos se acomodaban en sus asientos, murmurando entre ellos sobre lo que podría ser tan urgente. Erik y su padre se pararon frente a todos observando con mirada firme. El señor Belov tomó la palabra primero, explicando.

—Espero todos se encuentra muy bien les agradezco por estar aquí tan rápido, es importante que sepan la magnitud de la propuesta que hemos recibido ya que es un concurso de diseño arquitectónico que, de ganarlo, elevaría significativamente el prestigio de nuestra empresa, así como les daría a ustedes mismos el renombre del ganador.

—Recibirán los planos base y las regulaciones del concurso en un folleto que se les entrego al entrar —tomo la palabra Erik esta vez —Queremos que cada uno de ustedes trabaje en una propuesta ya que no se pueden enviar más de dos por firma, si alguno no deseara participar no hay problema están en todo su derecho. Los bocetos deben presentarse en quince días.

—El ganador recibirá un aumento de sueldo y recibirá el premio de este año al mejor diseño arquitectónico entregado por la organización.

Había varios emocionados empezando a hablar entre ellos sobre sus ideas algunos otros como el señor torres que no parecía nada interesado.

Me habían sobrado algunos de los folletos y mi curiosidad me empujo a leerlo, quería entender más sobre lo que se esperaba de los arquitectos. Me preguntaba si podría hacer algo como eso algún día.

[...]

El hospital tenía ese olor peculiar a desinfectante que me ponía nerviosa cada vez que lo sentía. Caminé por el pasillo, tratando de no pensar demasiado en todo lo que había pasado últimamente. Cuando llegué a la puerta de la habitación de Mia, respiré hondo y toqué suavemente antes de entrar. Al abrir la puerta, la vi sentada en la cama, ya vestida con ropa normal. Parecía cansada, pero sus ojos brillaban con ese entusiasmo que siempre la caracterizaba.

No te alejes de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora