-Eres muy inteligente, Niall. Supiste diferenciar lo que realmente te convenía, eso no lo hacen todos. Algunos prefieren perder el amor de sus padres, para tener el de aquella persona que "aman". Pero no es tu caso. Y no sabes lo contenta que estoy por eso - Bonnie me sonreía completamente complacida. No pude evitar que una mueca de completo desagrado se instalara en mi rostro.
Sentía los músculos pesados. Y mis párpados parecía que en cualquier momento caían, cubriendo mis ojos. El corazón me latía tan fuerte que lo sentía en mis orejas.
Solamente pensar en terminar con Liam, logra que mi corazón se rompa en mil pedazos y que mi mente comience a girar para poder crear alguna excusa creíble para terminar con mi novio de apenas unos días.
Realmente, no es justo. Liam y yo a penas acabábamos de comenzar nuestra relación, y tenía que llegar esta mujer. ¿Qué se supone que le diré? Mi estomago duele al pensar en su hermosa carita cuando termine con él.
-Como sea. Ya que has tenido lo que quieres, ¿Me haces el favor de largarte? Quiero estar solo, por si no he sido bastante claro con mis insinuaciones - dije con los dientes apretados.
Bonnie me sonrió radiantemente, con sus ojos marrones horrendamente poco parecidos a los de mí Liam, brillando fervientemente.
-Oh, claro cariño. Pero, necesito que me des tu celular. Ya sabes, para mantenerte en contacto conmigo. Tienes como plazo hasta mañana por la noche para terminar esa... Aberración que tienes con el idiota ese que se hace llamar "tú novio". Mañana, exactamente a esta misma hora (21:30) quiero que me llames para decir que todo acabó. Y en unas, no lo sé, dos semanas, les diremos a tus padres que ya somos novios y el resto es historia - dijo acercándose a mí.
Corrí mi rostro para que ni se le pasara por la cabeza volver a besarme. Mis labios son únicamente de mí Liam. Y yo no dejaré que esta perra intente algo conmigo.
Aunque no valió de mucho, ya que en menos de dos segundos, ella me tomó fuertemente del mentón y me acercó a su boca, robándome otro beso. Me separé en seguida de ella, para luego mirarla con odio.
-Vete de mi habitación - dije, pronunciando cada palabra con excesiva lentitud para que entendiera todo de una maldita vez.
-Claro. Nos veremos pronto, novio mío - dijo soltando una carcajada muy falsa. Fruncí el entrecejo completamente disgustado, desviando mi mirada de su rostro.
Y cuando menos me lo esperé, una de sus manos me tomó la cara y volvió a besarme.
-¡Para de una vez y vete ya! - chillé histéricamente, alejándome lo que más podía de esta chica psicópata.
Finalmente, con su maldita sonrisa triunfal, salió de mi cuarto y bajó las escaleras. Cerré con fuerza la puerta, y me deslicé por ella, hasta acabar sentado en el suelo.
Una lágrima calló rodando lentamente de mi ojo derecho, hasta que murió en mis labios. Y a esa lágrima le siguió otra, y otra.
Y en menos de un minuto ya estaba llorando desconsoladamente.
Me sentía tan mal. Me dolía todo el cuerpo con sólo pensar en que tenía que terminar con mí Liam. Por unos segundos, pensé en como estaría en este momento, si mi elección hubiera sido quedarme con mi novio.
Me estremecí.
Probablemente, mi madre estaría chillando sobre qué es lo que había hecho mal conmigo, y mi padre estaría en shock, seguramente, preguntándose lo mismo. Luego, mi mamá me gritaría sobre que yo no puedo ser eso, y prácticamente me obligaría a terminar con Liam.
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Tal vez, pude evitarlo.
RomanceLiam es dulce. Liam es tierno. Liam es hermoso. Liam es inteligente. Y Liam... Es mi mejor amigo.