Capítulo 26.

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Susana Elizondo toco la puerta del departamento de su hija tres veces rápidamente. Movía su pie esperando a que esta abriera pero al no recibir respuesta alguna toco otras tres veces. Su marido le toco el hombro y con un suspiro se volvió hacia él.


-Susana, no creo que este en el departamento -le dijo tranquilo.


-¡No me interesa! Esperare aquí mismo si es necesario. -se cruzó de brazos y se sentó en el suelo. Víctor negó con su cabeza ante la testarudez de su esposa. Le tendió la mano para levantarse pero esta la golpeo. Suspiro fastidiado y la miro serio.


-Vamos cariño, volveremos luego. No deberías lanzarte sobre ____ de una vez apenas llegue. -volvió a tenderle la mano pero esta vez ella la ignoro.


Susana bufo y miro hacia el corredor donde se observaba el ascensor.


-Quiero lo mejor para mi hija y si para ello tengo que sentarme en el suelo a esperarla. Eso haré.


-Prefiero esperar en el hotel antes de quedarme parado aquí. Así que deja de ser tan testadura y...


-¡Mira ya llego! -exclamo y se levantó del suelo.


_______ salía del ascensor y su mirada se congelo al ver a sus padres. Lo que faltaba, pensó. Se acercó a ellos con una sonrisa en su cara y los miro buscando una respuesta. Había creído que los dos habían estado de vuelta a casa. Al parecer se equivocó. Su madre le miro seria mientras su padre solo suspiraba fastidiado.


-Tenemos que hablar contigo -dijo seria.


-Sobre...


-Es mejor que entremos al departamento y hablemos con calma. -sugirió Víctor.


Ambas asintieron y una vez la puerta abierta, su madre entro rápidamente y se sentó en el sofá. ____ solo vio cómo su madre se cruzaba de piernas y seguía observándola seria. Se acercó a ella y se sentó a su lado. Víctor solo miraba a Susana esperando que comenzara a hablar.


-¿Qué pasa?


-Brandon es lo que pasa -contesto Susana, _____ levanto una ceja sin entender y miro a su padre que no tenía expresión alguna.


-¿Qué? -pregunto con el ceño fruncido.


-Ayer cenamos con Judith. Estábamos hablando un tiempo cuando ella nos mencionó algo que no me gusto para nada. -se cruzó de brazos y miro a su hija- No queremos que te cases con él.


La alarma de alerta se activó en ____ haciendo que se levantara y mirara a su madre incrédula.


-¿¡Que no me case con el!? -bufo y miro a Víctor- ¿Estás de acuerdo con eso, papá?


-Bueno, en verdad...


-¡Claro que lo estamos! -grito Susana cortante- ¡No permitiré que mi hija se case con un adicto a las apuestas! -grito.- Es por tu bien, cariño.


_____ negó con su cabeza. La hora de actuar ha comenzado, pensó.


-Yo lo amo... -dijo poniendo una mano en su corazón.- No puedes venir acá y simplemente decirme que no puedo casarme.


-¡Claro que puedo! Si es algo malo para mi hija mayor... ¡Puedo! -exclamo Susana alzando su barbilla.


Víctor exhalo con fuerzas y solo se sentó en el sofá y observo a las dos mujeres discutir sobre el tema.


-Mi abuela dijo lo mismo sobre papá cuando se enteró que tenías una relación con el -miro a su padre que asentía y esbozaba un sonrisa al ver como se defendía- ¿Y qué hiciste? Te escapaste y te casaste con él a escondidas. ¿Pero me prohíbes casarme con Brandon solo por ser adictos a las apuestas? -puso una mano en su boca e imito un sollozo- Deberías de estar avergonzada.


La mirada de sus padres se intercambió unos segundos. En gran y cierta parte, ella tenía toda la razón. No hablaron por unos segundos y luego se escuchó un suspiro de Susana.


-Bueno, exagero un poco pero solo quiero lo mejor para ti. -se acercó a ella y le acaricio la mejilla- No todos los días te casaras, cariño.


______ sonrío para sus adentros con el cambio de idea de Susana, vio a Víctor que no emitía palabra alguna, observándolas.


-Pero...creo que debería de ir a apostadores anónimos. –sugirió Susana.


El simple hecho de pensar en lo que haría Brandon al decirle que ira a Apostadores Anónimos, solo la hacía querer reír hasta que no pudiera respirar. Sin duda que lo haría, no perdería la oportunidad de observar su expresión. Ella asintió y le sonrío.


-Está bien, haré que se una a Apostadores Anónimos.    

Mi falso prometido (Brandon Meza y tú.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora