Mi falso prometido (Brandon Meza y tú.)

Capítulo 13.

–¡No lo puedo creer, _____! –grito eufórica su madre en la otra línea del teléfono.

Exactamente como _____ lo había planificado su madre estaba teniendo un ataque de emoción debido a la noticia de su boda. Apenas cortara la llamada ya se la imaginaba publicándolo en el periódico al día siguiente. Escucho un suspiro al otro lado de la línea y la mujer siguió hablando. – No sabes cuando he esperado a que te casaras, cariño. Tu padre estará tan orgulloso de ti –-_____ sintió como su madre sonreía con emoción aun así no la lograba ver.

–Sí, supongo que estará muy feliz por mí...

– ¿Quién es el afortunado? ¿Alguien de tu trabajo? –pregunto curiosa su madre.

_____ le había mentido a su familia más de una vez. Les había dicho que trabaja en una empresa de publicidad. Sin mencionar que todos creían que su economía era lo suficientemente alta como para vivir ella sola sin depender de nadie. Lastimosamente, nada de aquello era real. No tenía trabajo y el único que tenía había sido despedida por llegar más de tres veces tarde. Qué suerte.

–No, Paty me lo presento en una de sus exposiciones de artes.

– ¡Tengo que agradecer a Paty por haber conseguido a tu hombre perfecto!

–Si...hombre perfecto –dijo entre dientes.

– ¡Estoy tan emocionada por decirles a todos que te casaras!

–Supuse que lo estarías –murmuro _____.

–Cuando vendrás a presentarnos al afortunado –le dijo con alegría su madre.

Presentarlo, tenía que presentar Brandon a sus padres. Tenía que darle un montón de reglas al tratar con ellos.

-–Sabes que normalmente estoy ocupada, mamá. –explico ____.

–Lo sé, cariño –_____ escucho como su madre suspiraba en la otra línea. – Este domingo estás libre, supongo.

Era mejor que su madre conociera a Brandon lo más pronto posible. Sino por lo contrario pasaría todo los días llamándola presionándola para que lo hiciera. _____ suspiro y contesto.

–Bueno, este domingo iré a casa.

– ¡Gracias, cariño! ¡No sabes cómo se pondrá alegre Lizeth! –exclamo. – Digamos que últimamente la suerte no ha estado de su lado.

Aquello hizo que la curiosidad de ____ creciera. Lizeth normalmente era una persona con la mejor suerte del mundo, claro aunque _____ no creía en la suerte la consideraba muy afortunada en todo lo que se proponía.

– ¿Que le paso?

–Ha estado peleando con Daniel. Más de una vez ha vuelto a casa llorando –la voz apagada de su madre se notaba cuando hablaba sobre aquello. _____ estaba más segura de que las peleas le afectaban más a su madre que a su propia hermana.

–Lo lamento por ella –susurro. – Espero que su matrimonio no se desmorone.

– ¡Y no lo hará! –dijo con rapidez. – Solo son las típicas peleas entre pareja, pero sabes cómo es Lizeth y no está muy acostumbrada a pelear.

–Lo sé. –suspiro. – Te dejo, hablamos luego.

– ¡Te esperare con ansias! –le dijo y _____ colgó la llamada.

Sentada en el sofá vio como el cielo tenia tonos rojizos por la tarde. Escucho como la puerta se abría y observo a Brandon entrar con la copia de la llave que le había entregado en la mañana. Este tenía un par de bolsas en la mano y las coloco sobre la mesa de la cocina.

–Hola –la saludo con una sonrisa.

– ¿Qué es eso? –pregunto observándolo desde el sofá.

–Algunas cosas importantes en mi vida –dijo mientras sacaba algunas cervezas de la bolsa.

_____ alzo una ceja.

– ¿Importantes? –rio.

–Para mí lo son –le sonrió y las guardo en el refrigerador.

______ negó con la cabeza.

– ¿Preparado para conocer a mis padres? –le pregunto ella con una sonrisa.

– ¿Tus padres? –frunció el ceño.

– No, a mis hermanos –le contesto sarcástica.

–Puedo decir que no me gusta la idea de conocer a tus padres.

–Yo tampoco, pero tienes que hacerlo. –el suspiro y saco una cerveza del refrigerador.

–¿Cuándo iremos?

–Este domingo.

–Genial –le contesto con sarcasmo y tomo de sucerveza.