MADNESS - Harry Styles

Capítulo 3

Espero cerca de la máquina de café mientras este se prepara. El doctor Thompson me ha pedido que hoy lo ayude a organizar sus documentos, pero todo lo que he hecho ha sido sentarme a su lado y escuchar historias del hospital durante la última semana. Me ha contado que se fundó hace unos setenta años, y fue el doctor Dalton Hawking buscando un lugar para ayudar a su esposa esquizofrénica. Decía que la mujer siempre estaba hablando sola en un rincón, y al preguntarle con quien charlaba, ella que solo respondía "diablo".

Mi rostro se pone más pálido de lo normal; esa historia me ha aterrorizado. El doctor Thompson empieza a reír a carcajadas.

-¿No es real?-Pregunto.

-Oh, claro que sí...-Se calma un poco-Es solo que tu rostro ha sido el mejor de todos, debí tomarte una fotografía.-Entrecierro mis ojos, haciéndome la enojada, pero también empiezo a reír.

Sirvo el café listo en una taza blanca, regreso y se lo doy al doctor. Me siento a su lado y nos quedamos en silencio, pero yo tengo una pregunta que ha estado rondando en mi cabeza los últimos días.

-Señor Thompson...

-Dime Frank, cariño.

-Frank.-Sonrío-¿Cuál es el problema de Harry?-Le da un sorbo al café, y después de aclarar su garganta, gira hacia mí.

-El joven Styles es un caso complejo. Cuando tenía dieciocho años, su mejor amiga se volvió pareja de un chico en particular. Harry nunca aprobó la relación, nunca le agradó. Un día, ella llegó a su casa llena de moretones, con varias cortadas en el cuerpo, y un ojo morado. Había sido víctima de violencia física por parte de su novio. Apenas podía mantenerse de pie con la golpiza que recibió.-Suspira-Styles perdió el control, literalmente, y fue hasta la casa de él, entró a la fuerza y empezó a golpearlo con lo que encontrara, llevándolo casi a la muerte.-Abro los ojos con horror y me llevo la mano a la boca-Los padres del chico denunciaron a Harry, pero él escapó. Se escondió varios días en una casa abandonada que está del otro lado de la ciudad y cuando lo encontraron se resistió, peleó con los oficiales. Le rompió la nariz a uno y le dejo un ojo morado a otro. Tuvieron que arrestarlo entre cinco de ellos, y aún seguía luchando. Cuando estaba en la celda, peleó con los demás presos, debían mantenerlo aparte del resto. Descubrimos que sufre de trastorno de límite de personalidad, y además es bipolar, por lo que tiene muchos problemas con el control de la ira; no piensa antes de actuar, siempre ataca sin pensar en las posibles consecuencias. También tiene momentos de histeria y felicidad extrema, y de repente, una profunda depresión. Por el momento ha estado mejorando, lo disimula muy bien, pero hay algunos días en los que pierde el control. Destruye todo lo que encuentra, como hace varios días, cuando preguntaste por que no salió. Es peligroso.-Toma de nuevo las hojas y las empieza a organizar.

Me quedo callada, no sé que decir. ¿Cómo hace para mantener tan bien la calma? Ahora le tengo más miedo, no quiero que vuelva a mi casa, pero tampoco quiero decírle al doctor Thompson que se ha estado escapando. No puedo imaginarme el odio que sentiría Harry por mí, y el posible daño que le harían aquí. Solo empeoraría. Pero no sé si debo preocuparme más por un simple chico del hospital, o por la seguridad de las demás personas.

-¿Siempre está así de tranquilo?

-¿Tranquilo? En realidad, no. Tiene un carácter muy fuerte, es muy grosero con las enfermeras e irrespetuoso con todo el personal.

-¿En serio?-Pregunto incrédula. Conmigo ha sido todo lo contrario, yo soy la grosera e irrespetuosa.

-Sí, ¿contigo no fue así?

-Conmigo fue muy agradable, en realidad demasiado.-Hubo mucho contacto fisíco.

Ruedo los ojos en mi mente cuando recuerdo su estúpida sonrisa al tomarme de la cadera para acercarme a él.