Cap. 2 Cuidate de los lobos.

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Leyna.

Pasaron los días, Brad se volvió un gran amigo para mí, bueno al igual que Jack y Tadeo, que se juntan con nosotros en él recreo, mis días han mejorado, me siento feliz, no me había sentido así desde hace tiempo...

Me levanté de la cama, ya para arreglarme para la escuela, me fui al baño y fui a bañarme, después de unos 5 minutos salí y me puse mi ropa, la cual consistía en unos jeans desgarrados color negro, una camisa morada con estampados, el cual decía I love the rock y lo cual es cierto amo el rock, bueno al igual que otra música, ya sea pop, reggaeton, bachata, country, rap, y electrónica, etc. me gustaba muchos tipos de música, lo se soy rara, aveces ni yo se como es que tengo muchos géneros de música, pero bueno así me gustan. Me dispuse a bajar a desayunar con mamá, baje las escaleras con mi mochila en mano, y valla ahí estaba la mujer que me dio la vida, ella esta pensativa, bueno aveces así entra en trances cortos, lo cual aveces le pregunto que tiene pero ella solo niega y dice que esta bien, no se... pero no le creo en cierta forma es raro, es seguido que ella se quede así totalmente por minutos, aveces si me preocupa mucho.

-¿Otra vez?- Le pregunté, lo cual ella sólo asiente con la cabeza-¿Estas bien mama? No se te noto rara...-no termine ya que ella me interrumpió.

-Si, estoy bien, ya hemos hablado de esto.- dijo nerviosa y rápido no se, me preocupa, pero no me gusta insistirle, ya que pues... me lo negara, mejor la dejo tranquila.

-Esta bien...-Agarre y me senté en una silla para empezar a desayunar con ella.

Después de desayunar me fui a la parada de autobús para tomarlo e ir ala escuela.
Cuando llego el autobús, me dispuse a subir, y así al igual tomar asiento, tome uno de atrás, uno sólo... decidí ponerme los audífonos y escuchar algo de música en el trayecto, iba muy sumida en mis pensamientos y con la mirada pérdida por la ventana, que no me di cuenta cuando alguien ya estaba sentado a un lado mío, abrí los ojos como platos al ver quién estaba a un lado mío, era...Cameron... uno de... de los chicos mas populares de la escuela, pero qué demonios hacía sentado aquí y es más junto a mi y viéndome.

-¿Qué?- le dije algo no se agresiva-¿Tengo algo en la cara o que?-dije.

-Aparte de unos lindos ojos, creo que no- dijo con una sonrisa arrogante.

-Si aja, ¿que quieres? Si quieres mi dinero, no tengo.- dije yo.

-Nada, no quiero nada, sólo encontré el lugar desocupado para sentarme¿O que no puedo?- dijo el arqueando una de sus cejas.

-De poder puedes, ¿pero mira a que vienen tantos cumplidos? Si yo bien se que solo soy una cero para todos ustedes.- dije yo con tono de enojo o algo así un tono de riesgo en mis palabras ¿valentía tal vez?

-Eso eres, la chica cero e invisible- dijo soltando una risa- pero bueno chica invisible llegamos a nuestro destino y debo irme, pero solo te digo algo- se acercó a mi oído-Ten cuidado con los lobos-dijo

-¿Qué? ¿Me estas jodiendo verdad?- y el solo se fue,¿Que carajos es eso de "Ten cuidado con los lobos" a que se refiere eso? ¿Cuáles lobos? ¿Qué lobos? ¿El será uno de ellos? O ya se él esta loco definitivamente, si eso es... en mi cabeza se formularon muchas preguntas y dudas... que bueno mejor las empecé a ignorar conforme mejor iba caminando adentrándome a el instituto, me dirijo a mi casillero para poder tomar unas cosas para ir a clases, cuando dos manos sé postraron en mis ojos lo cual hizo que toda mi vista se oscureciera.

-Adivina quien soy- dijo una voz ronca detrás de mi.

-Ammm ¿Jack?-dije divertida.

Mi Propia Historia de Hombres LobosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora