Narra Leyna:
Tenia esa sensación de que Brad estaba cerca, pero estábamos en medio del bosque, no se encontraba nada, ni casa y mucho rastros de algunas personas, el bosque estaba desierto, por así decirlo, lo único que se escuchaba eran unas cuantas aves, y uno que otro animal, pero de hay en mas no había nada, un silencio inmenso se sentía ante nosotros, en otros casos me estaría muriendo del miedo, pero en este no, Brad me necesita, no hay momento para tenerlo.
Narra Brad:
Me encontraba en un especie de bosque, abandonado, corría con todas mis fuerzas, mi cuerpo dolía, pero debo salir de ahí, necesito proteger a Leyna, la necesito conmigo, mis piernas amenazaban con dejarme caer entre las hojas pero no, mi voluntad no me lo permitía, no era momento de dejarse vencer, debo llegar a mi manada, con mi Luna, con mi familia, con ellos, mi vista se estaba nublando cada vez mas, no quería y de un momento a otro caí en las hojas mojadas, intente levantarme pero mis piernas y manos no respondían, y entonces empecé a caer en la oscuridad.
-Leyna...- fue mi ultimo susurro.
Narra Leyna:
-Sienten eso- dijo uno de los guardias.- siento el olor del Alfa Brad.
-¿Por donde?-pregunte.
-Por aya- dijo señalando un bulto entre las hojas secas, corrí de inmediato, me tire junto a el, le quite una cuantas hojas de enzima que tenia, no debe tener mucho tiempo por aquí, pero se encontraba totalmente inconsciente, lo moví pero no reaccionaba.
-Debemos llevarlo rápido a la manada, ayúdenme a cargarlo- le ordene a los guardias.
- Luna, será mas fácil llevarlo si nos transformamos.- dijo
- Esta bien- respondí, de un abrir y cerrar de ojos, ya se habían transformado, subimos a Brad en el lomo de uno de los lobos, después me subí yo, Dylan se fue con otro de los guardias, después comenzamos a irnos, el aire pegaba fuertemente hacia a mi, pero que importa Brad debe estar bien.
Tiempo mas tarde.
Llegamos a la manada, de inmediato pedí un doctor, que hasta ahora no a salido de la habitación, la angustia me mata, no se que demonios hacer, pero debo tranquilizarme, lo bueno es que Brad ya esta aquí con nosotros, en su casa, con su familia, donde pertenece.
De repente se abrió la puerta del cuarto, y vi salir a él doctor, me dirijo asía él.
-¿Que tiene? ¿Esta bien?- le pregunte con angustia.
-Se pondrá bien, es un muchacho fuerte, con que coma y tome este medicamento-me entrego una receta con unos pomitos- se pondrá bien en unos dos o tres días, a y sobretodo reposo, es lo que necesita, su cuerpo esta muy cansado, así que debe descansar mucho- me dio una pequeña sonrisa.
-Gracias, lo acompaño a la salida- le dije cortésmente.
-No gracias, mejor valla a verlo, esta despierto, lo mas seguro es que quiera verla- dicho eso se fue.
Tome rumbo asía nuestra habitación, tome la perrilla de la puerta con delicadeza fui arriendándola poco a poco, y pude visualizar a Brad acostado en la cama, de inmediato su vista se fijo en mi, vi como cambio su animo, estaba feliz, empecé a caminar hacia a él, hasta que llegue con él y lo bese, lo necesitaba de verdad lo necesitaba, el beso era suave, pero lleno de necesidad, de pasión y amor, ambos necesitábamos de esto, nos separamos por un poco de aire, yo tenia mis manos en su cuello, y él tenia una de sus manos en mi mejilla y la otra en la cama, unió su frente con la mía, tenia los ojos cerrados, pero sentía esa mirada hacia a mi.
- Te amo- me dijo y me atrajo hacia a él y me volvió a besar lentamente- y eso será por siempre, siempre te amare Leyna, mi Luna...
-Yo también te amo Brad, aria cualquier cosa por estar a tu lado- dije mirándolo a los ojos.
-Espera, tu cabello- dijo tomando un mecho de mi cabello- ¿Por qué esta pequeño? ¿Quién te lo ha cortado?- dijo un poco enojado.
-Fui yo, larga historia- dije yo dándole una pequeña risilla- pero eso ahora no importa- y lo abrace, al principio se escucho un quejido de su parte, pero me respondió al abrazo y empezó a olfatear mi cuello, hacia cosquillas, y una pequeña risa salió de mi, y el lo noto y empezó a hacerme cosquillas.
-Brad... Bastaaa... para... debe...bes des...canzar...- decía entre risas.
-No... hasta que me debes un beso a cambio- dijo.
-Te... doy...y to...dosss... los... qu...eee qui...e...ras... pero... para- dije yo riéndome.
Entonces paro y estaba enzima de mi y lo bese, lo amaba y él a mi, se sentía y eso me gustaba, no importa a que deba enfrentarme por estar al lado de este hombre, todo él me hacia feliz.
Y hasta aquí el capitulo de hoy, espero que les haya gustado, nos leemos en el siguiente capitulo.
Besos lobunos
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Mi Propia Historia de Hombres Lobos
Werewolf-Bien solo no te asustes ¿Vale?-dijo él alejándose un poco de mi. -No tengo nada de qué asustarme, de seguro solo es una broma mejor venga vamos a regresar a la escuela ya.-Dije haciendo seña para irnos, pero el se quedo quieto. -Solo mira-Dijo most...