Maratón 6/6
Quería gritar, me sentía atrapada. Con su peso me apoyo en la pared para luego me empezara besar el cuello. Una de sus manos acaricio mi abdomen con delicadeza y subía hasta mis ojos para luego acariciarlos por encima del sostén/brasier
- Mmm... - gimió - estas bien buena, como desde un principio que te vi en aquella fiesta... - murmuro. Sus dos manos pasaron a mi trasero y empezaron a masajearlo por encima de mi pantalón, una de sus manos se quedó en mi trasero y su otra mano se apoyó en mi sexo por encima de mi pantalón y lo acaricio suavemente hacia arriba y abajo - mierda - gimió. Me daba asco de la forma en que me tocaba, en la que su lengua acariciaba mi cuello, en la que su mano acariciaba mi trasero y mi sexo, asco cada vez que sonreía y como me miraba a los ojos "seductoramente". Asco en todo lo que él hacía en mí.
Lagrimas recorrían mis mejillas pero él las limpiaba fuertemente. Sentía miedo. Miedo hacer violada por el primo de Harry. Por el primo de mi novio. Por él, Benjamin.
- No llores joder - limpio una nueva lagrima que recorría mi mejilla - solo te estoy tocando -me miro con unos ojos penetrantes, que realmente me daba miedo - aquí no. Sera en mi habitación - apretó mi brazo para luego arrastrarme por el largo pasillo fuertemente. Trataba de soltarme de su agarre pero todo era imposible. En ese momento se escuchó el sonido de una puerta, gire mi cabeza para luego darme cuenta que el ruido provenía de la habitación de Harry. - mierda - suspiro para luego dejar de caminar y agarrarme firmemente de mis dos brazos y hacerlo mirar a la fuerza - no quiero que le digas a nadie sobre lo que paso porque ganas no me faltan de ir a tu casa y cogerte salvajemente y bruscamente. Imagínate el dolor que te hará eso - me miro por última vez para luego darse la vuelta y caminar hacia su habitación rápidamente.
Me dejo hay, débil y con miedo.
Corrí lo mas rápido posible hacia el baño y encerrarme en él. Justo en ese momento en el cual cerré la puerta del baño se abrió la puerta de la habitación de Harry. Me senté en el suelo y abrasando mis piernas empezó a llorar con todas mis fuerzas tratando de no emitir ningún ruido.
Senti pasos y luego unos pequeños golpes en la puerta.
- _____ Abre la puerta, llevas mucho tiempo encerrada - la voz de Harry hizo retornar mis oídos. Me niego abrirle - por favor ____ ábrela.
*Narra Harry*
Más de 30 minutos desde que ____ fue al baño y no ha vuelto. Esto no me huele nada bien, me levante de la cama y abrí la puerta delicadamente y despacio no quiero que Benjamin este por ahí en el pasillo y me vea con mi cara de preocupación. Claro que no.
Salí de mi habitación y camine hacia el baño, dentro de este se escuchaba un silencio. Apoye mi oreja a la puerta y pude escuchar lo que provenía desde el baño. Ese silencio que se escuchaba luego se trasformó en pequeños sollozos que querían ser escondidos. Mierda.
- _____ Abre la puerta, llevas mucho tiempo encerrada - Algo estaba mal en ella y necesitaba saber lo que era. No la abrió - por favor ____ ábrela - Roge pero nuevamente su silencio me silencio - ____ si no lo abres, derrumbare la puerta - silencio...
Suspire pesadamente. No se me ocurría nada para poder abrir la puta puerta. Hasta que se me alumbro al ampolleta, baje las escaleras y por suerte me encontré con Marta.
- Marta - me miro - me podrías pasar la llave del baño por favor.
- Lo ciento Harry esas llaves están prohibidas de pasar si no es para algo urgente
- Solo tú tienes una de toda la casa. Es algo muy urgente
- Como qué? - levanto una ceja. Piensa Harry piensa.
- Mi novia se ha encerrado en el baño
- Tal vez se está duchando Harry... - la interrumpí
- No, no lo está. No la puede abrir si ella me pidió ayuda y artiro pensé en ti - suspiro
- Esta bien - reviso algo en su chaleco para luego sacar como 1000 llaves en una cadena, empezó a verlas para luego sacar una llave con una gomita azul que la encerraba - toma
- Gracias
Subí lo mas rápido las escaleras para luego insertar la llave en el pequeño agujero de esta. La gire, y puede abrirla.
Lo primero que vi fue un pequeño cuerpo en el suelo, sus brazos abrasando a sus piernas y su cabeza entre medio del pequeño agujero que tenía esta. Llorando, débil. Me abalance hacia a un lado de ella para luego abrasarla con todas mis fuerzas. Soltó sus piernas para luego sus manos pasar a cada lado de mi cuerpo y abrasarme como si no quisiera soltarme. Me miro y pude ver sus ojos hinchados y estos tenían un pequeño color rojo en sus hermosos ojos. Sus ojos me dijeron todo lo que ella no atrevía a decir. Miedo...
- Nada te pasara, yo estaré para ti siempre. - le susurre - siempre.
