¿Mi Mejor Amigo Mi Novio?

Cap. 2

Cuando llegué a mi casa tenía demasiado sueño que me quedé dormida, me desperté gracias a que Bryan abrió la puerta para avisarme que me habían ido a visitar. Cuando baje me encontré con la tierna sonrisa de Matt, lo invité a pasar pero dijo que no era necesario.

-Pasa Matt- le dije

-Gigi, hay una emergencia- dijo y causó que me preocupara

-¿Que pasó?-

-Tengo ganas de un helado y nadie en mi casa me quiere acompañar- dijo y después hizo un puchero- ¿Me puedes acompañar? - preguntó haciendo una mala imitación del gato con botas.

-Claro, pero ando pobre, así que si tu pagas yo feliz- dije y él asintió riendo.

Nos subimos al auto de Matt y fuimos a su heladería favorita, Santa Clara. Los mejores helados de por aqui. Lo malo es que están a media hora de la casa.

-¿Y qué se siente manejar un auto?-

-Nada fuera de lo normal, solo lo prendes y conduces- dijo con demasiada simpleza.

-Pfff- rodé los ojos ¿cuántas veces he oido eso?- Es lo que mi papá dice.

-¿No me crees?- dijo riendo.

-Yo digo que debes sentir la adrenalina corriendo por tus venas y ese tipo de cosas super cool- dije con movimientos exagerados de manos.

-Pues para que sientas esa "adrenalina"- dijo imitandome- si quieres yo te puedo enseñar a manejar. ¿Qué dices?- dijo quitando la mirada del camino mientras estiraba su mano para que la estrechara.

-LA MIRADA EN EL CAMINO NOS VAS A MATAR- entonces empuje bruscamente su cara hacia el camino.

-Tranquila mi chava, tengo todo bajo control- me guiño el ojo y yo reí.

Llegamos a la plaza donde estaba la heladería y entonces nos estacionamos.

-Ahhhhh, okay, vamos por los helados- dije cambiando de tema, lo empuje hacia nuestro destino y le sonreí.

Cuando llegamos a la heladería yo pedí uno de vainilla y Matt uno de menta con chocolate, pero el de él era helado doble, nos sentamos en una mesa y empezamos a hablar.

-Entonces, cuando empezamos con la clases- le pregunté a Matt.

Cuando voltee a verlo, él solo se me quedo viendo con la cara toda manchada de helado. Yo solo me reí por su cara y le tome una foto con el celular, se veía tan gracioso.

-¿tengo algo en la cara? - me pregunto confundido.

Yo solo seguí riendo y le enseñé la foto que le había tomado, el también se río y fue al baño a lavarse la cara. Cuando regreso ya tenía la cara limpia.

-Entonces ¿cuándo empezamos? - le volví a preguntar.

-Cuando empezamos ¿qué?- me preguntó

-Pues cuando me enseñas a manejar- le dije algo obvia

-Ohhh, si, eso, pues ¿cuando lleguemos a la casa estaría bien? - me preguntó

-Si, esta bien- le dije y le sonreí, después él me devolvió la sonrisa.

Todo el rato nos la pasamos hablando de cosas sin sentido y riéndonos, cuando dieron las 5:00 p.m, nos fuimos a casa, y camino a casa a Matt se le ocurrió la idea de empezar con las clases de manejo.

Se orilló y se bajó de carro, me abrió la puerta del carro.

-Hora de empezar.- dijo firme.

-¿Estas loco verdad?

-Para nada, es muy sencillo- confié en él y me senté en el lado del piloto.

-Bien, enciendelo.- eso hice.- ahora mira- me empezó a decir qué significaban las letras de la palanca, cual era el freno y el acelerador y ese tipo de cosas- ¿Lista?

-No- dije aun miedosa. Esto me pone los pelos de punta.

-Genial. Bien, pisa el freno para que puedas mover la palanca.- eso hice- la calle es plana así que no puede ser demasiado difícil. Suelta el freno y acelera un poco- exageré con "un poco" ya que no acelere casi nada, pero el carro avanza por sí solo ya que es automático- Gis no me quieras engañar- rio- no estas acelerando nada.

- jeje, perdón-

Entonces creo que me pasé. de acelerador ahora, porque el auto empezó a moverse super rápido y me asusté pero no hacia nada.

- Gigi ¡¡¡EL FRENO, EL FRENO!!! PISALO- entonces cambié rápido de acelerador a freno y dimos lo que llaman como latigazo

-Okay, creo que es suficiente por hoy- dijo Matt asustado mientras salíamos del carro para cambiar lugar.

Cuando me senté en el lugar del copiloto fue cuando me di cuenta que estuve a escasos centimetros de que nos estrllaramos contra un poste de luz. Woahhh. Que intenso.

-Estoy de acuerdo contigo- dije igual de asustada

Matt tomó el volante y minutos después ya nos estábamos despidiendo.

-Adiós Gigidactilo- dijo Matt, así me puso ya que a él le gustan los dinosaurios.

-Bye Espinosaurus rex- me despedí de él.

Subí a mi habitación, y realmente estaba tan asustada que no pude dormir hasta horas después, horas en las que me bañé como 5 veces con agua caliente para bajarme los nervios. Hasta después de un largo rato pude consiliar el sueño y dormir.

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Hola mis ninias!!

Gracias por leerme, agradezco mucho a las personas que han estado votando, sinceramente me alegran el día.

Espero que les haya gustado, sigan votando.

-RufflesEspinosa1389