Soldado Imperial. Capitulo 5.

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Capitulo 5:

Postrado a mis pies tengo a mi padre, lo tengo a mi merced, indefenso, vencido, y humillado por la derrota.

Estoy a solo levantar la espada y cercenarle el cuello como tantas veces lo soñé. Pero no era mi intención desarmarlo frente a toda la guardia imperial, ante su comitiva y ante los ojos aterrados de Akame, mostrando por primera vez frente él, el odio que me hace temblar y hervir por dentro. Siempre tuve cuidado de guardar para mi mismo mis verdaderas emociones.

Perdí el control de mis impulsos llevado por los celos.

Perdí el control de mis emociones al ver a Yeongjo llegar junto a Akame a la practica marcial matutina tomados de las manos como un matrimonio, los cuales se adoran el uno al otro, aunque se muy bien que el único enamorado de entre ellos dos es mi padre. Ya que el dueño del amor de Akame soy yo y por eso tal vez mi orgullo herido fue mayor a mi capacidad de autocontrol.

Como me temía, ya no puedo controlar los celos y las ansias de ser yo quien este al lado de la reina.

No soporto ver como mi padre se pasea con mi querida Akame para arriba y abajo siendo meloso con ella, desviviéndose por ella, hablándole y recibiendo su atención.

Hace mucho no tenia la oportunidad de verla muy cerca de mi, siendo objeto de su atención con libertad.

Su mirada me descontrola, me hace desbocar el corazón, me hace sentir mareado y perdido. Siento por ella demasiado.

Akame me hace sentir los sentimientos fuera de control, a flor de piel. Frente a ella no puedo comportarme con completa frialdad y seriedad como el soldado entrenado para no sentir nada que antes de conocerla fui.

Si supiera que por ella me sentí solo un hombre deslumbrado frente a una mujer al segundo de cruzar las miradas.

Ya no aguanto mas obligarme a mi mismo a mantenerme alejado de ella.

El deseo de tenerla cerca, de poder tocarla, de poder escuchar su voz y de poder abrazarla es superior a mis fuerzas. La amo, la deseo y la extraño demasiado.

Como deseo retroceder el tiempo y volver a tener la oportunidad de estar a solas en nuestro viaje por China y Joseon.

Si pudiera volver en el tiempo seria con ella aun mas demostrativo de afecto de lo que fui. Desearía comenzar todo de nuevo y haberle dicho con sinceridad lo que ella significaba y significa para mi, sin la historia de mi pasado de por medio y sin esas estúpidas amenazas que le hice, las cuales se convirtieron en un muro entre los dos.

No medí el temor y la desconfianza que mis palabras sembrarían en su corazón.

Debí haberla amado con libertad, debí llegar hasta el final, debí haber sido su primer hombre, debí haber marcado su cuerpo aun mas de lo que lo hice, así le hubiese restado sufrimiento al permitir que conociera el toque desagradable del cuerpo de otro hombre en lugar del mío.

Por omisión. Por guardarme el amor y la pasión que sentía por ella en palabras la he hecho sufrir mas de la cuenta.

Mi crueldad y egoísmo ha lastimado a lo único que deseo proteger con profunda sinceridad.

Si con mi actitud fría lo único que he conseguido es ganarme su rencor eterno. ¿Qué haré?. No, no puedo pensar así.

Esa mirada de preocupación y de miedo que me esta brindando ahora mismo, me dice que le importo todavía. Esta pálida debido al temor de verme acabar muerto por asesinar antes de tiempo al rey. Mi princesa Akame aun me ama y se preocupa por mi.

Como lo decidí, debo volver a acercarme a ella y enamorarla aun mas. Tengo que enseñarle lo agradable que seria compartir una cama, llegando hasta el final.

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