Desperté y noté que Antonio no estaba en el cuarto, me quité la sabana que envolvía la mitad de mi cuerpo y me levanté de la cama. Me miré en el espejo, me arreglé el pelo y salí del cuarto descamisado. Cruzo por la cocina y veo a Antonio ahí, preparando unos sándwiches y unas tazas de café con leche
¡Buenos días! Exclamo.
Se asusta al escucharme y voltea a mirarme -Sonríe-
¡Buenos Días! Repite.
Camino hacia él y le planto un beso
¡¿Como amaneciste?! Pregunta
¡Bien y ¿tu?! Contesto, salgo de la cocina y me siento en un pequeño banquito que tiene en la sala
¡Bien! Exclama.
De repente sale de la cocina, en sus manos trae dos platos y encima una taza de café con leche
¡Provecho! Me dice.
Me levanto rápidamente del banquito y lo ayudo con los platos, los coloco en el comedor y nos sentamos a comer.
¡¿Cuantas parejas has tenido?! Espeta.
Mi subconsciente frunce el ceño y se lleva una mano en su cabeza
¿por qué sale con estas preguntas siempre? Lo peor es que nunca sé que responder.
¡Emm no, nunca he tenido pareja! Contesto ¡y ¿tú?! Prosigo.
¡Una sola, duré como casi un año! Contesta.
¡vaya! Exclamo.
¡Pue sí ¿tus padres ya saben que eres Gay?!
¡No. Aún no lo saben y los tuyos?! ¡Solo mi madre, se lo conté el año pasado cuando me dejé con mi ex pareja!
Me llevo el último pedazo de sándwich a la boca y asiento.
Me levanto de la mesa y llevo los platos a la cocina, los lavo y acto seguido me meto al cuarto.¡¿Te vas?! Me pregunta Antonio mientras se mete al cuarto para arreglar la cama
¡Sí, ayer no terminé de hablar bien con mi mamá y no quiero tener problemas con ella!
¡Entiendo, ¿Cuándo vuelves?!
¡No sé, ¿cuándo entregaremos la primera parte de la tesis?!
¡Este martes!
¡Entonces ¿nos vemos el martes?! ¡Sí!
¡Está bien
Me coloco la camisa y mis zapatillas, me arreglo el peinado y me echo algo de perfume que me da Antonio ¡Te extrañaré! Exclama. Lo miro fijamente y sonrío, me acerco y le planto un beso ¡Yo también te voy a extrañar! Extiendo mis brazos y lo estrecho sobre mí ¡¿Me acompañas hasta afuera?!
¡Por supuesto, vamos!Mi mamá se ve muy molesta, no sé qué hacer, que decirle ni como entrar a la casa. Exhalo e inhalo varias veces, tomo valor y entro
¡Hola mamá!
¡¿Dónde estabas?!
¡Ya te dije, en casa de un amigo haciendo la tesis de graduación!
¡Ah ¿sí? Y ¿Dónde ésta la tesis que no la veo? Y ¿esa pantaloneta?! Espeta.
Miro hacia bajo y noto que no me quite la pantaloneta que Antonio me había prestado¡Rayos, ¿Ahora que le digo?! -pensé.
¡La tesis se le dejé a Antonio mamá, le dije que la guardara él!
Se quedó en silencio y camino hacia la cocina
¡¿Tienes hambre?! Continuó
¡Sí, algo!
¡¿vas a comer?
¡Está bien!
Me metí a mi cuarto, me quité la camisa y luego la pantaloneta ¿cómo se me pudo haber olvidado? La tiré en mi cama, me enrollé la toalla en mi cintura y fui al baño.En todo el día había estado pensando en Antonio, pensaba en sus besos, en sus ojos marrones y en su sonrisa. Tomé el móvil y le marqué a Verónica, seguro moriría por saber lo que había estado pasando