Esperamos pacientes a que Lucía llegara a mi casa, el silencio era incómodo. No sabíamos que hacer respecto ese mensaje. Por fin la mujer que queríamos llegó.
—Mira— le mostré el mensaje antes de que entrara a mi casa, ella observó con paciencia y lo analizó.
—Chicas, esto es serio—dijo una vez dentro, todas estábamos reunidas en mi sala de estar comiendo pizza añeja que sobrevivió a nuestra guerra de comida mañanera—definitivamente son los chicos de la clase D, o peor aún... ¡La regla femenina!— dijo, las tres la miramos confundidas como si ella estuviera hablando en chino— La regla femenina es esa regla que las chicas pusieron. —Ah pues no me digas, pensé con sarcasmo—Cada chica que se acerque a los chicos de la clase D será castigada, ya que Jensen, Jason, Oscar y Brandon son de todas y para todas—dijo suspirando con frustración. ¿Cómo los tres mosqueteros? ¿Qué rayos?
—Sin embargo, no nos hemos cruzado con esos tíos en esa manera... ¿no se pueden defender solos?— preguntó Sarah y Daniela al mismo tiempo, me quedé analizando.
—Hasta que no encontremos al culpable no dejaremos que esto nos afecte, ¿verdad chicas? Ellos quieren separarnos, ¡recuerden! ¿cómo las han tratado por estar solas? Nada debe separarnos ahora—dije con orgullo—es una promesa, pase lo que pase—todas asentimos y seguimos hablando del tema, planes para capturar al culpable inicial. Dijimos que nuestras espías serían Daniela y Lucía, ya que pensarían que no estaríamos juntas, pero después de clases nos reuniríamos en el parque, ahí nadie va, menos los chicos del instituto por lo que no deberíamos preocuparnos al respecto.Los días pasaron y nuestra suspensión fue eliminada, Sarah y yo nos fuimos al instituto con nervios, saludamos disimuladamente a Lucía después de que ella bajara del autobús y lo mismo con Daniela.
Apenas pusimos un pie en el instituto dos cubetas de soda nos cayeron a las cuatro, ni siquiera estábamos juntas. Me sentía pegajosa y por el hielo había dolido. Mi respiración se agitó y miré atónita a las demás personas que nos tomaban fotografías. Miré a las chicas y sonreímos con orgullo.
—¿¡Lo pueden creer!?—chillé más alto de lo normal—Ahora estamos más deliciosas ya que tenemos soda, ¿a quién no le gusta la soda? Mira Sarah, incluso tu blusa se hizo transparente, ¿qué chico no te deseará?—dije con una falsa sonrisa, ¡Mentira! ¡Estaba furiosa!
Las chicas comenzaron a decir comentarios parecidos al mío y seguimos como si nada hubiese sucedido, la gente nos miraba mal y muchos chicos nos miraban más de lo normal por nuestras transparentes ropas.Al entrar a nuestro salón pude ver en el pizarrón un dibujo bastante asqueroso, era una chica de cuatro patas chupando el pene de un chico. Sobre la cabeza de la chica decía un "Sarah Gamboa es más puta que una prostituta de las calles, debería haber un premio mundial para ella"
Sarah apretó los puños con fuerza y fingió una sonrisa.
—¿Lo puedes creer Alice?—la miré curiosa—¿Crees que debería cobrar más barato?—comenzó a reír tomándome por sorpresa, ella se levantó y borró lo del pizarrón—¡Deberían mostrarme a esos tales chicos a los que les hago estas cosas, porque no creo que ninguno esté a mi altura!—dijo y se sentó con orgullo a mi lado y una sonrisa satisfecha. Daniela y Lucía comenzaron a reír y yo me levanté para salir del salón. Debía encontrar a ese tal Jensen. Por cada clase que cruzaba miraba diferentes insultos en los pizarrones, llegué al colmo al ver uno de los pizarrones
"¡Tengan cuidado! Alice Aslí me contagió una enfermedad sexual, es un asco en la cama!"
Salí corriendo y me golpeé contra el pecho de Jensen, lo miré furiosa, no quería llorar, necesitaba defender mi orgullo a toda costa. Detrás mío llegaron mis amigas y las personas nos miraban con suma atención.
— ¿¡ESTÁS FELIZ!? ¿¡TE CREES UN DIOS POR INTENTAR JODERNOS A NOSOTRAS!? ¿¡CREES QUE SARAH ES UNA PUTA!? ¿¡QUE YO TE TRANSMITÍ UNA ENFERMEDAD SEXUAL!? ¡POBRE CHICA LA QUE SE ACUESTE CONTIGO, DE SOLO VERTE DA SIDA! ¡NI SIQUIERA HE DADO MI PRIMER BESO MENOS VOY A DEJAR DE SER VIRGEN!—chillé furiosa.Los cuatro chicos me miraron con los ojos como platos, Brandon comenzó a reír y Jensen se agachó a mi altura.
— Mira pequeña...— susurró— Nosotros NO escribimos esas cosas, ni siquiera nos importan ustedes, gracias por el aviso de tu virginidad, pero jamás me acostaría contigo ni aunque me pagaran millones—todos comenzaron a reírse.
— ¡MALDITO HIJO DE CALAMARDO!— había hecho el ridículo yo sola. No aguanté y salí corriendo empujando a los chicos, abriendo paso entre la gran multitud de adolescentes.Las lágrimas en mis ojos comenzaban a resbalar por mis mejillas, escuchaba a mis amigas gritar mi nombre, pero no me detuve en ningún momento
Solo quise correr hasta la luz del túnel y desaparecer... porque ya no quería vivir
¿Podía reiniciar mi vida y no cometer estos errores? ¿Podía eliminar este día? ¿Podía morir y volver a nacer y ser otra persona?
****************************************Oscar en multimedia (Darren Criss)
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YOLO; You Only Live Once
Humor¿Alguna vez te haz preguntado si realmente estás a gusto con tu vida? ¿Si te arrepientes de tus decisiones? ¿Qué pasaría si decides comenzar de nuevo? ¿Se puede? ¿Lo haz pensado? Alice sí, ella siempre piensa el por qué de las cosas y cómo...