Apuestas

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Cuando desperté sobre Oscar que estaba en bóxer y aún con mi sostén en su cabeza en el sofá me preocupé, no recordaba nada de lo sucedido a decir verdad mi casa estaba hecho un desastre, mi cabeza me dolía y Jensen, Jason, Oscar, Sarah, Daniela y Lucía estaban esparcidos por todo el piso de abajo durmiendo. Recuerdo vagamente que Brandon me estaba siguiendo, ¿dónde estaba? ¿se había ido?

Con dolor de cabeza subí a mi habitación encontrando a Brandon con un álbum de collage que había hecho hace bastante tiempo. No era algo que me importara. Aparentemente Brandon era el único que no comió los happy brownies. La verdad no suelo dejarme llevar por las drogas. Es decir, no me gustan... pero debo admitir que me daba curiosidad probarlos.

—No deberías ver mis cosas, tampoco deberías de estar en mi habitación—dije desde la puerta para sentarme a su lado y ver lo que había hecho.

—Son bastante buenos... no creí que tuvieras este talento. Me sorprendes cada vez más cabeza de moco—dijo burlón

Lo miré mal y suspiré frustrada, odiaba a Brandon con mi ser.
Cuando todos terminaron por despertar, limpiamos la casa. Quedó bastante bien a pesar del agua que comenzó a dañar los muebles. ¿Pero por qué le daría importancia? mamá nunca estaba en casa y no se debía enterar.

—Es bastante tarde... ¿tu tía no volverá?—Jason me miraba curioso al respecto, sospeché que mi tía le lanzó miradas coquetas. Pero prefería mantenerme en la ignorancia, me encogí de hombros y seguí prestando atención a los demás chicos.

—No puedo creer que esta sea Alice, mira no tiene dientes—Sarah junto con Oscar y Brandon comenzaron a burlarse de una foto mía cuando era niña, mientras que Jensen miraba a Daniela con disimulo. Si le gustaba tanto, ¿por qué no se lo decía?

—¿Qué miras Alice?—preguntó Jensen, lo ignoré y me fui con Jason que comía una manzana en la entrada de mi casa

—¿Por qué aquí tan solo?—pregunté sentándome a su lado. Jason solo me miró de reojo

—¿No estás molesta? Te tratamos muy mal y pareces pasarla bien con nosotros en estos momentos, ¿eres masoquista? o tal vez solo eres idiota... tal vez fácil...

—Vaya sutil... ¿no crees que deberías de ser menos despreciable?—dije rodando los ojos—obviamente estoy molesta por lo que me han hecho o tratado, pero dime, ¿ganaré algo si demuestro mi enojo contra ustedes? Lo dudo mucho. Deja de pensar tanto—dije levantándome para irme nuevamente a la sala.

—¡Yo puedo ser tan sutil que hasta una rosa se enamoraría de mí, puedo ser un nerd y seguiré siendo amable y popular!—dijo deteniéndome de la mano, no pude evitar una carcajada

—¿Quieres apostar?—pregunté levantando una ceja con una sonrisa de "PF no jodas que no te creo". Jason lo pensó durante unos segundos y dejó libre mi mano
—¿Quieres perder?—preguntó con arrogancia, suspiré y me crucé de brazos.
—¿Seguro? Tienes una semana. Intenta enamorar a una chica popular, eso sí, te cortarás el cabello e irás con lentes, y no pedirás que te realicen las tareas, serás partícipe en clases y dirás que ayudarás con tutorías a los chicos que tanto llevas al basurero, ¿ok? veremos con cuantas chicas llevarás detrás. Si pierdes tendrás mi venganza de todo lo que me han hecho, si ganas haré tus tareas durante una semana.

—¿Por qué debo cortarme el cabello?—dijo acomodándolo con arrogancia

—Porque te ves como un chico malo

—¿O será que no soportas verme así porque te gusto?—tomó bruscamente mi brazo tirando de éste para atraerme a su cuerpo, caí sobre él en una posición comprometedora y lo empujé

—Estúpido, no me atraerías ni aunque fueras el único hombre en la Tierra—dije molesta

—No me cortaré el cabello, pero acepto la apuesta.

Y así comenzó mi venganza... si todo salía bien, haría que Jason sufriera de la manera más cruel, divertida y memorable. Haría que todos ellos sufrieran...

—¿Qué hacen ustedes dos solos aquí afuera?—preguntó Jensen con los demás a sus espaldas, miré al suelo sin pensar en una respuesta, cuando sentí una mano en mi cintura y un fuerte olor a colonia de hombre. Miré a mi lado y Jason me abrazaba con una sonrisa arrogante.
—¿Celosos? Solo jugaba con Alice un rato...—dijo riendo con arrogancia y caminando hacia ellos, Sarah y Lucía me miraban curiosas, mientras que Daniela me mataba con la mirada. Oscar se veía confundido y Brandon desinteresado... pero Jensen se miraba molesto, con asco hacia su amigo, con enojo hacia mí.
—Solamente estábamos apostando—dije firme con una mirada fría hacia Jensen—En cualquier caso, lo que estuviéramos haciendo no tiene nada que ver ni contigo ni con ustedes, ¿qué? ¿quieren unirse a la apuesta? De todos modos les ganaré, ¿por qué no somos hombres contra mujeres? Después de todo, si tienen tanta confianza en ustedes mismos no creo que se dejarán perder—me crucé de brazos con una sonrisa ladeada, como si tuviera todo bajo control. Jason mordió su manzana y se puso al lado de sus amigos.
—¿Aceptan chicos?—dijo con confianza.
—Claro que aceptaremos, pero lo mejoraremos. ¿Cual es la apuesta y qué se apuesta?—preguntó Brandon con superioridad.

Jason me miró y yo sonreí para explicar la apuesta. Todos caminamos y nos sentamos en la sala, nosotras frente a ellos.

—Suena interesante, pero hagamos esto más interesante aún. ¿Qué dicen si el perdedor debe llegar a mi próxima fiesta en ropa interior?—dijo Jensen apoyando su brazo en el hombro de Oscar.
—Si ustedes pierden, recibirán nuestra venganza y deberán estar desnudos en su propia fiesta—Amenazó Daniela, no esperaba que ella fuera partícipe de la venganza ya que miraba a los chicos como parte de su propiedad.

Escuché como Jensen tragaba un nudo en su garganta pero terminó por dar la palabra de todos.

"Es una apuesta"
Para el tiempo en donde mi tía volvió a casa ya todos excepto Sarah se habían ido de casa. Miré mal a mi tía, quería gritarle y decirle que se jodiera. ¿¡Quién en su sano juicio ofrece drogar a su sobrina y sus amigos!? Entiendo que fui yo quien los comió ya sabiendo el efecto que tenían, pero a mis amigos se los dio sin ellos saber...

Me mordí la lengua y subí a mi habitación con Sarah para no tener que estar con mi tía. Para aguantar las ganas de gritarle.
Pero estaba ansiosa, quería ver a los chicos con lentes y actuando como nerds por una semana... Quería ver cuantas chicas estarían con ellos al verlos de ese modo.
La venganza es dulce como la miel...
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Alice en multimedia (Lily Collins)

YOLO; You Only Live OnceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora