la vida es como un escenario

la vida es un escenario

Que tal mis queridos Tatuistas disfruten de doble capítulo  ;) por favor dejar sis votos y comentarios

Capítulo 18

Siempre he dicho y he sabido de sobra que el hablar de temas serios nunca ha sido mi fuerte.

Por lo general, cuando trataba asuntos de seriedad solía hacerlo en los peores momentos o lugares no adecuados .

Y claro, está vez no fue la excepción, lo primero que hizo Julia fue pegarme en mi parte hombría, después darme una bofetada y finalmente empujarme contra la pared por haberle dicho " Me voy a New York" es cierto, yo tuve culpa por habérselo dicho después de tremenda muestra de sexo intenso por su parte.

Lo peor es que ni si quiera me había dejado explicarle lo que restaba de la noticia.

Vale vale, ¿ me dejaras hablar?... - exclame exasperada mientras le obstaculizaba la puerta de la entrada al departamento.

¿Que cojones? ya te dije que no! no te quiero escuchar, lo único que quiero es irme a casa... - respondió ella enfurecida

Está también es tu casa ...- dije yo sonriente.

Mala idea... Me arrepentí

Se acercó peligrosamente a mi y por encima de mi pantalón desabrochado tomo mi pene y lo apretó con fuerza, mucha más de la necesaria.

Después rápidamente al ver mis gestos de dolor la metió dentro de mi ropa interior para tener un mejor alcance de mi dolor

¿Me dejaras salir o prefieres quedarte sin descendencia?... - pregunto ella hecha una furia

Trague saliva...

Dios Julia!!! sueltame!!! estás loca!!!!.... - grité desesperadamente por el dolor de sus uñas enterrandose en mi miembro

La vi reírse, maldita!

No lo haré hasta que no te quites de mi camino... - respondió ella sería

Cariño, por favor, vamos hablar, Jul por favor se razonable ...- dije yo entrecortadamente por la pequeña punzada

Ya te he dicho que no... - gritó cabreada

Vale, tu ganas, pero ya sueltame.. por favor... - exclame cansada y molesta

Ella pareció meditarlo unos momentos y saco su mano de mi ropa interior, dio unos pasos hacia atrás e hice la acción de quitarme de la puerta y hacerle creer que la abriría.

En cuanto tuve oportunidad me lance sobre ella haciendo que ambas cayeramos por sobre la alfombra, me coloque encima de ella y la tome con fuerza de las manos.

Maniática agarra penes! escuchame!...- grité molesta al ver su necedad en luchar contra el peso de mi cuerpo

No!!!... - respondió ella exhausta y furiosa

Al ver que de ninguna forma Ella cedía me vi en la tarea de acercarme y morderle el hombro, ella dejó escapar un grito ahogado.

Repeti la acción nuevamente pero con más fuerza que la anterior. La oí quejarse y no precisamente de placer.

Por favor Len, basta, me duele... - susurro ella cansada

Al escuchar sus súplicas deje de morderla y le solté las manos de mi agarre, pero permanecí quieta sentada sobre sus caderas.

Ella me miro dolida

Lobito, no me dejaste terminar, ¿ podrías escucharme?, es importante ..- dije yo con voz calmada