Rebelde [Adrien Agreste Y Tu]

Rechazado

Era ya de noche y los dos héroes de París habían recientemente terminado de pelear contra un akuma. Después de su victoria y unas palabras de LadyBug se disponía a marcharse...

-Por favor, ¿Puedo hablar contigo esta vez?- el chico de ojos esmeralda, tomó el brazo de la pelinegra impidiendo que se fuera. Ella se giró a verlo confundida por la seriedad con la que habló.

-Claro- la soltó y aclaró su garganta.

-He querido decirte esto desde hace un tiempo… Verás yo... En realidad siento algo por ti- la presente abrió los ojos con sorpresa- desde que te conocí me has parecido alguien muy linda, amable, genial. En resumen, eres perfecta y yo me enamoré de ti. Me gustas Mi Lady- la miró a los ojos y con o sin máscara se notaba su sonrojo a kilómetros.

Así es, dos días después de su último fallo quiso hacer un intento más y ésta vez no había tareas o mandados que impidieran que la heroína lo escuchara.

La expresión de sorpresa de la chica cambió a una triste. Él siempre fue lindo y coqueto con ella, pero creia que era por mera broma ¿Que su compañero de lucha estuviese enamorado de ella? No lo esperaba.

-Chat- Ya era hora de dar su respuesta. El chico la miró con emoción a lo que fuera a decir- tu eres un chico genial y un muy gran compañero, eres amable, atento y muchas chicas darían lo que fuera por estar contigo pero… yo no siento lo mismo, lo siento no puedo corresponderte-

-... Me esperaba esa respuesta- Chat Noir bajó la mirada dando un largo suspiro.

-Lo siento- posó su mano en el hombro de su compañero. Sabía que le dolía pero obviamente no podía estar con él si no sentía lo mismo -¿Pero aún somos amigos no?-Le pregunto en un intento de hacerlo sentir mejor. Le extendió su mano hecha puño esperando a que el lo hiciera también.

-Claro- trató de forzar una sonrisa y correspondió el choque amistoso. Su anillo avisó que le quedaba poco para terminar su transformación.

-Bueno, nos vemos luego gatito- lanzó su yoyo a uno de los edificios y se colgó de este para ir alejándose. Mientras el chico gato la miraba haciendo un enorme esfuerzo por no soltar las lágrimas que amenazaban con salir.

Llegó a su casa entrando a su habitación por la ventana volviendo a tiempo a su ropa normal. Se mantuvo todo el tiempo con la mirada baja.

-¿Te encuentras bien?- "Qué tonto, es obvio que no" pensó Plagg quien se encontraba preocupado por su estado de ánimo.

Quería decirle algo para animarlo pero simplemente no hallaba algo que fuera útil en ese momento.

-Descuida. Me iré a dormir, necesito descansar- habló decaído sin decir nada más.

Al día siguiente tenía clases, pero aunque no se sintiera con ánimos para iniciar el día tenía que asistir. Después de todo pidió mucho que lo dejarán ir a la escuela como para poder faltar.

Una vez llegó a la escuela, Adrien habló.

-Nathalie iré solo a casa en la salida, no tienes que venir-

-Pero...-

-Por favor, no me siento muy bien y quiero distraerme- Insistió.

-¿Estás seguro?- Él asintió. ¿Por qué tenían que tratarlo como a un niño?- Bien, entonces cuídate- Salió de su limusina e ignorando a todos caminó directo a su aula.

Nino parecía no haber llegado aún, se recargó en su mesa y escuchó la conversación de sus amigas en la banca de atrás.

-Realmente me siento mal, se veía muy dolido- Explicaba Marinette a su amiga.

-Bueno es mil veces mejor que aceptarlo por lástima-

Adrien suspiró. Acababa de ser rechazado y sus amigas hablaban del mismo tema.

-¿Y me dirás quién fue el chico a que le rompiste el corazón?- Se burló Alya y Marinette trató de callarla.

Nino llegó después de unos minutos notando a su amigo muy callado.

-¿Estás bien, amigo?-

-Si, es que tengo problemas personales y me mantienen pensativo-

La maestra llegó interrumpiendolos. Esta vez las clases fueron una eternidad para Adrien, parecía que todo era horrible y aburrido cuando no se sentía bien.

En la salida, aprovechó la distracción de sus amigos para irse de la escuela. No le gustaba ser así, pero sabía que lo llenarían de preguntas y demás y lo que necesitaba era estar solo.

No sabía cuánto tiempo había pasado, él seguía avanzando mirando el piso sin rumbo alguno. De lo que estaba consciente era que no llevaba mucho caminando.

De pronto escuchó voces cerca, alzó la vista notando que se encontraba cerca de un callejón.

Miró a un grupo de chicos hablar, que mas bien parecían quejarse de algo. Los observó durante unos segundos hasta que ellos se dieron cuenta.

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Gracias por leer esta wea XD