Rosas Rojas | Camren

XII

Lauren POV.

Ya era Domingo y un día pesado en la florería me esperaban, tenía cerca de 5 arreglos florales para una fiesta de cumpleaños de una chica, 3 arreglos de rosas para una cena romántica en un lujoso restaurante y un gigantesco pedido de rosas de todos los colores para una cita de un joven que quería darle una "maravillosa noche de cumpleaños" a su novia, incluyendo los pequeños pedidos por los que venían directamente a la tienda.

Estaba terminando uno de los 5 arreglos para la fiesta de la chica cuando una linda joven de cabello teñido en rojo, no mayor de veinticinco años entró a la tienda, la chica parecía entre nerviosa y triste con una pequeña sonrisa marcada en su rostro pero sus ojos estaban un poco rojos, tal vez había estado llorando antes de venir.

- Hola, buen día. - Me saludó la chica sin levantar la mirada del piso y jugaba con sus manos como acto para lidiar con su nerviosismo.

- Buenos días ¿En que puedo ayudarte?

- Pues... Quisiera, un ramo de flores muy lindas. Necesito... Necesito que exprese tal cuál lo que quiero decirle a mi novio. - Respondió la chica de manera tímida en un tono apenas audible para mí.

- Claro ¿Y que quieres que expresen la flores?.

- Es que no sé como explicarlo.

- Ok, creo que podemos comenzar armando un pequeño ramo con estos lirios blancos y un par de tulipanes ¿Te parece bien? - Dije mostrando una sonrisa tranquilizadora a la cual ella respondió con una sonrisa tímida.

- Me gusta, eso se ve lindo.

Genial, la chica por fin había despegado la mirada del suelo y la fijó en el ramo que ya comenzaba a tomar color y forma.

- ¿Te parece si añadimos unas margaritas?

- Si y un par de violetas. Oye... Perdón la pregunta ¿Cúal es tu nombre?. - Dijo la chica.

- Lauren Jauregui. - Le tendí la mano y me correspondió el pequeño apretón. - ¿Y tú?.

- Ariana Grande, es un gusto. - Dijo y en el momento en que fijó su mirada en mí se sonrojó y soltó una pequeña risa nerviosa.

- ¿Y bien...? ¿Ésto te gusta?. - Le mostré el ramo casi terminado.

- Es precioso... Sabes, éste ramo... Éste ramo es para decirle... A mi novio... Que estoy embarazada. - Dijo la pequeña pelirroja entre sollozos.

- ¡Oh vaya! Bueno, pues... ¡Felicidades! Te aseguro que le encantará la noticia.

Quise calmarla con un pequeño apretón en el hombro pero ella se lanzó a mi para abrazarme extremadamente fuerte mientras rompía en llanto.

- ¡Joder! Va a odiarme, llevamos un año de relación y yo vine a arruinar todo. Fué culpa mía. - Casí gritaba contra mi cuello y pecho y comenzó a llorar aún más.

- ¡Hey! Ari... ¿Puedo decirte Ari? - Asintió aún llorando. - Ari, un bebé no es un error, mucho menos es tu culpa. Si dice él que no quería llegar a más puedes mandarlo a la mierda, nadie le puso una pistola en la cabeza para que lo hiciera. Además, tu novio sería un imbécil si llega a odiarte, el fué parte de ésto también, porque como en las peleas y en el sexo se necesitan dos, debe de cumplir con su parte haciéndose responsable.

Creí que eso lograría tranquilizarla... Pero nó... Lloró aún más fuerte y se apretó más a mi cuerpo diciéndome que mis palabras le encantaron, que era una excelente chica con un corazón enorme y otras cosas que no logré entender porque sus palabras se ahogaban contra mi pecho.