:: Capítulo Seis ::

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Holaa! Acá va un nuevo cap, uno que también me gusta mucho... Espero que lo disfruten!

Todos los personajes de esta historia pertenecen a su autora, Naoko Takeuchi, yo sólo los tomé prestados.

Abrazoo!

Bell.-

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:: Capítulo Seis ::

La semana pasó...

Y Serena y Darien estuvieron tan ocupados que no notaron lo rápido que llegó el fin de semana. Aunque se mantuvieron comunicados durante esos días, aún no volvían a encontrarse.

Darien tuvo que realizar muchos trámites y visitar algunos lugares para buscar trabajo. Si bien su curriculum era impecable y tenía todavía algunos contactos de cuando estudiaba en Tokio, necesitaría de mucha perseverancia y paciencia hasta que pudiera encontrar una oportunidad laboral que valiera la pena. Y eso le llevaría un tiempo considerable.

Serena por su parte se repartía entre la editorial y la oficina. Al haberse tomado completo el día después de la fiesta, mucho trabajo se le había acumulado. Sin embargo se hizo tiempo para organizar con sus amigos una cena para reunirlos a todos con Darien. Ese plan la entusiasmaba mucho, la idea de volverse a encontrar todos juntos como en los viejos tiempos era emocionante. Decidieron que sería en lo de Rei y Nicolas y harían una comida a la canasta. No era necesario ningún tipo de formalidad, sino que lo importante era estar todos juntos de nuevo.

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El sábado en la noche estaban todos en el templo. Rei, Nicolas, Lita, Andrew, Ami, Richard, Mina, Darien y Serena. Habían tenido una cena relajada y disfrutaban del encuentro. No era frecuente poder coincidir todos en una misma ocasión, ésta era la primera vez en mucho tiempo que el grupo estaba completo, contando además con la presencia de Darien. Platicaron largo y tendido, poniéndose al tanto de todo lo acontecido en sus vidas, recordando tanto los buenos momentos como los no tan buenos. Cenaron, bebieron, brindaron y conversaron durante horas en lo que se había convertido en una velada muy agradable.

Después de una larga sobremesa las chicas fueron a la cocina a preparar té y café para todos. Y aprovecharon que se encontraban solas para cuchichear entre ellas sobre el invitado especial de la noche y bombardear con preguntas a Serena. —Amigas, ¡por dios! —dijo Rei entusiasmada— ¡Este chico está guapísimo! Y es todo un caballero inglés: atractivo, cortés, profesional, responsable... ¿Cómo me pude haber dado el lujo de dejar pasar semejante partido? ¡Hoy sería la mujer más envidiada por todas!—las chicas rieron ante el comentario.

—¿Tú lo dejaste pasar? —agregó Mina divertida— ¡Más bien él solito pasó de largo y ni te registró!

—Además en ese entonces tenías otro pretendiente —le recordó Lita. Se refería a Nicolas, que en aquella época había empezado a trabajar en el templo del abuelo de Rei y quedó flechado desde el primer momento que la vio. Ella se hizo la difícil durante un buen tiempo, hasta salió con Darien un par de veces para darle celos a quien luego se convertiría en su esposo—. Y tú lo torturabas haciéndote la coqueta con Darien —agregó riendo.

—Es verdad —recordó Rei nostálgica—. Pobrecito mi peluchito, cuánto lo hice remar. Pero si quería el primer premio no iba a ser gratis —sentenció con firmeza y todas rieron.

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