CAP. 3

89 23 0
                                    

NOAH.

Coloqué la nota en el frigorífico con un imán y subí corriendo a mi habitación para cambiarme de ropa.

Mi armario parecía el portal de Narnia. Te podías encontrar cualquier cosa hay dentro; desde botellas de plástico, a chicles pegados en las puertas. De todo menos ropa.

Más de una vez me han dicho que parezco una chica tumblr. No sé si lo decían para mofarse de mí, pero tenía que admitir que me agradaba. Son preciosas.

Lo primero que hice después de vestirme, fue recoger mi maravilloso mechero (que estaba echo una mierda y no iba muy bien) del jardín, y empecé a andar en dirección a casa de mi mejor amiga Kat.

Lo que más odia Kat en el mundo es que le llames por su nombre completo: Katherine. Según ella, suena a un evento relacionado con comida y detesta esa idea. Es mucho más alta que yo, se puede decir que somos el dúo sacapuntas...

Tiene el pelo muy largo y es muy guapa. Es mi zanahoria particular, ya que es pelirroja.

Se preocupa un montón por sus estudios, pero cuando se le ocurre salir de fiesta, es una bomba. Nunca te aburres con ella y se podría decir que es la única que soporta mis cambios de humor y más aún cuando estoy en mis periodos.

Después de 15 minutos, llegue a casa de los Tanner. Fui a tocar el timbre cuando la puerta se abrió y salio una loca saltando, abrazándome, y diciendo muchas cosas sin que yo entendiera nada.

Os presento a Kat.

Esto podría significar solo dos cosas:

1: Kat había conocido a un chico.

2: Se avecinaba una fiesta.

-Su...el...ta...me. No pue...do respirar.- susurre con la voz entrecortada.

-Lo siento! Es que no sabes lo que me paso el otro día...- dijo con una enorme sonrisa en su rostro y dejó de abrazarme. Se le veía muy contenta.

Atravesé la puerta y nos dirigimos hacia el salón.

Le hice un gesto con las manos como para que me contara lo que le pasó, y lo captó rápidamente.

-Bueno...em... pues...a ver...el otro día...- habló más nerviosa de lo habitual.

-Katherine, al grano.- le suplique.

Me miró con el ceño fruncido y me fulmino con la mirada.

Me encanta llamarle Katherine, simplemente para hacerla rabiar.

-¿Sabes quien es Kylliam Flour?- me preguntó y empezó a jugar con un mechón de su pelo.

Kylliam.

Como para no saber quien es Kylliam Flour.

Por una temporada, creí que le había olvidado, que ya no recordaba su aroma, su mirada, el sonido de su voz... Pero lo único que he hecho todos estos putos años, ha sido estar atada al pasado. Al "nosotros", que un día funcionó, y después se fue a la mierda.

Le quise como a nadie, le ame más allá de lo imposible, pero me lo agradeció de la manera más cruel: rompiéndome el corazón y el alma en miles de pedazos. Jugando con mis sentimientos.

A veces, te das cuenta de que todo se a acabado, cuando ni siquiera los recuerdos tienen sentido. Cuando el final del cuento cambia por completo, y es la princesa quien tiene que salvarse del príncipe, y no del dragón.

Nadie sabe nada de mi pasado. Solo el y yo sabemos el daño que nos hicimos el uno al otro.

Pero ahora mismo, no estoy preparada para poder enfrentarme a todos mis miedos, a mi pasado, a él.

POKER GAMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora