Crónicas de la torre y el misterio de la luna

El libro viejo

Pasaron los meses, ella aprendió fácilmente el arcano, ya tenía la túnica verde y estaba estudiando el libro del agua.
Todos querían de que la leyenda no se hiciera realidad, pero Dana seguía en alerta debía cuidar de ella todo lo que pudiera y más.
Una tarde, Alexandra, se encontró un libro bastante viejo, ella le preguntó de ello a Conrando pero este no supo decirle de qué se trataba, ya que nunca antes lo había visto.
Ella se pasó lo que quedaba de tarde y toda la noche leyendo el libro. Trataba de secretos de la torre y de la hechicería de mucho antes de cuando el Maestro de Dana estaba allí.
-Ahora entiendo lo de la magia más encestral
Pero ella no contestó y siguió leyendo el libro junto Alexandra.
Todo el tiempo que ella podía seguía leyendo el libro, claramente después de estudiar y hacer tiro en arco.
Pasaron los días, ella ya se había leído entero el libro, pero aún no comprendía en dónde era cada cosa, hablaba de la torre, era la única ¿O tal vez no...?
Alexandra subió todos los escalones hasta llegar al despacho de Salamandra y Jonás.
Allí se hallaba también Iris, que hablaba seriamente con los dueños de la torre.
Alexandra tocó a la puerta y ellos la dejaron pasar con una humilde sonrisa en los labios.
-¿Hay algún problema en los estudios?-preguntó Jonás
Ella negó y explicó todo lo que había leído en el libro, junto a Dana, por supuesto.
-Pues no sé, Conrando se ha leído la biblioteca entera y aún sigue. Por lo que eso tuvo que aparecer en un momento oportuno
-Pues no sé, yo me lo encontré en la biblioteca, pero creéis que hay otra torre similar a la nuestra
-Es probable, pero no podemos arriesgarnos, ya que puede que allí un lobo rojo halla mordido a unos de los presentes en la torre
Ella asintió, pero se moría de la curiosidad en ir a investigar.
Alexandra bajó y allí se encontró a Dana leyendo de nuevo el libro. Ella se tiró a la cama cansada y Dana la miró unos instantes.
-¿Qué te han dicho?-aunque sabía la respuesta quería saber si ella estaba dispuesta a ir por su propia cuenta
-Pues que no nos podemos arriesgar, y estoy de acuerdo, pero siento que ese libro oculta algo que nosotros debemos de investigar, pero no puedo contar con más nadie que no seas tú, claro
-Que tal Fenris, él me ayudó a pesar que para entonces no controlaba su lobo y odiaba salir en luna llena
-Está de cómplice junto a Salamandra y Jonás
Ella se rió en lo bajo y Alexandra la fulminó con la mirada.
-Entonces ve por tu cuenta
Ella rió con desdén y volvió observar el libro. Dana señaló una página con unas palabras arcanas que se parecían a la de una teletransportación.
-Ya tengo planes para esta noche
Dana asintió y ella se comportó en todo el día como siempre, salvo por el hecho de que iba a escaparse y eso nadie lo sabía.
Fue más duro su entrenamiento con la magia y con el arco ya que debía de estar preparada.
En la noche, se encontró a Iris que sonreía dulcemente. Ella se acercó para hablar con Alexandra, ya que sabía que se moría de las ganas por ir.
-Mira, sé que es duro no hacer lo que quieres, pero créeme, yo por hacer lo que quise me metí en un problema bastante gordo, en principio escuchando la llamada de los muertos y después perdiendo de una persona de la cual me enamoré
Ella asintió y le agradeció por lo que le contó, sabía que era duro para ella pero debía de irse y no hacer caso de más nadie.
Subió a su habitación y divisó a Dana preparada, ella se teletransportó afuera de la torre he iba a realizar el hechizo cuando alguien le habló por la espalda, ella se volvió y divisó...