Crónicas de la torre y el misterio de la luna

Simplemente rápido

Garm y Goth ya llevaban días caminando, creo que incluso unas semanas, hasta que por fin estuvieron frente al reino de los elfos
-¿Estás segura de volver? Aquí tienes todo, allí creo que no habrá nada
-Estoy segura, Goth, si algo pasa por accidente, de seguro estoy aquí
-Entonces, te estaré esperando
Garm sonrió y abrazó al lobo, para acto seguido montar en el e ir hasta la escuela del bosque dorado.
Allí unos archimagos los pararon.
-¿Qué quieres humana?
-Volver a mi mundo. He venido aquí de accidente, por un agujero negro de otra galaxia similar a esta, solo deseo volver, pero no tengo dotes para la magia, os pido ayuda, por favor
-Lo siento, muchacha, pero no podemos-dijo una elfa rubia que venía de adentro
-Conozco a Fenris, él lobo en el que voy montada es su hijo
Ella me miró detenidamente a la vez que sorprendida, pero al final aceptó.
-Lo siento lobito, vos no podés entrar
Él gruñó pero Garm lo tranquilizó y entró con la elfa maga hasta una sala con cuatro signos y palabras en un idioma bastante extraño.
-Desde que Salamandra, Jonás, Conrando y Lis murieron, Fenris no tuvo contacto con nadie
-Mi madre es Alexandra
Ella se paró en seco para mirarla sorprendida.
-Sí, lo sé, en mi mundo el tiempo pasa muchísimo más lento
-Yo no llegué a conocer a tu madre, pero me contaron sobre ella, era una chica muy valiente. ¿Y vos, cómo te llamas?
-Garm ¿Y tú?
-Nawin
Garm asintió y Nawin empezó a recitar las palabras escritas en las paredes sin la menor dificultad y los cuatro símbolos brillaron y abrieron un portal, algo parecido a un agujero negro, pero muchísimo más pequeño con diferencia.
-Entra, te llevará a tu destino
Yo asentí con miedo, pero al final entré y cerré los ojos, en escasos segundos aparecí en mi casa, nada había sucedido, ni el agujero, nada. Alexandra entró al cuarto de la pequeña que la abrazó con una sonrisa feliz y después se sentó en el borde de la cama.
-Dime, ¿En dónde has estado estos segundos?
-Ha sido un año, madre
-Les has encontrado
-No a todos, Salamandra, Conrando, Jonás, y Lis están muertos. Fenris y Gaya tuvieron un hijo, que se ha transformado en un mejor amigo para mi, se llama Goth
-Con que enemigo
-Ya sé porque sabes tanto élfico
Las dos rieron cómplices.
-¿Quién es el dueño o dueña de la Torre ahora?
-Nadie, en realidad, al morir los padres de Lis, ella tomó el mando, pero un día desapareció, lo más probable es que esté muerta, pero el valle está maldito, los lobos lo protegen y nadie se ha atrevido a pisarlo, Fenris me dijo que no preguntara, que no me acercara y que no pisará aquel lugar
-Es una pena, ese lugar es único y maravilloso
-Sí, ¿Pero en dónde estamos? ¿Qué ha pasado con el agujero negro?
-Pues al final no ha pasado nada, algunas locuras y eso
-¿Qué me dices sobre la gran ráfaga de viento?
-Te has transportado allí, Garm, es normal que vivieras eso
Garm asintió y su vida fue igual, igual hasta hace dos días después. Ella estaba durmiendo, y en la mañana despertó en una casa que ella no conocía.
-¿Qué demonios?
Todo lo que pasó en esos dos días para ella es una larga historia para el valle de los lobos que ahora sí que está habitado.