Crónicas de la torre y el misterio de la luna

El primer mago

En la mañana, todos se encaminaron por el guía llamado Raúl, que no dejaba de mirar a Garm, y aunque ella supiera que tiene una mirada encima de ella no le hechó cuenta, ya que estaba demasiado sumida en sus pensamientos, mirando a la nada, hasta que sienta una mano en su hombro y ella para saber quién era.
-¿Te pasa algo, Garm?-preguntó Nawin al lavado de la joven
-No, solo pensaba, temo a lo que valla a suceder
-Te entiendo-dijo suspirando y no dejó de mirar al elfo de cabellos rubios, que iba al lado de Gilmi y Aragorn
Garm soltó una pequeña risa y Nawin se puso roja al instante al saber de qué se reía.
-Ve con él, creo que necesita compañía femenina ¿No crees?
Ella sonrió pero dudo en ir hacia él o no, aunque no le quedaron muchas opciones cuando Garm la empujó y la elfa chocó con el elfo que la miraba con una sonrisa cálida que Ferreira a la princesa del reino de los elfos.
Garm seguí con su cómo do silencio, le daba igual si se quedaba en silencio o no, ella estaba cómodo así, pero no del todo, ya que, cuando su mente tenía la oportunidad, miles de millones de imágenes y palabras sonaban y aparecían en su mente a velocidad de vértigo. Nadie se dio cuenta de ello, hasta que la chica se desmayó, menos mal que Goth estaba detrás suya, ya que consiguió cojerla a tiempo.
Garm no supo cuanto tiempo estuvo inconsciente pero ahora su mente tenía todo el tiempo del mundo para mostrarle lo que quería desde un principio, un hechizo creado por el primer mago, hace treinta siglos atrás, un mago de cabellos marrones y de ojos verdes esmeralda, tenía unos treinta y siete años para entonces, el joven sabía mucho más que la gente normal, que cualquier otro mago, sí fue el primero, pero no el primer mago esactamente, si no el primer mago que todo el mundo vio, muchos contaron cosas buenas y otros malas, creyeron que era el mismo demonio, pero el joven pasaba de todas las palabras, él sabía su destino y su poder, sabía quién era y sus objetivos, nada salido de la boca de otra persona, se buena o sea mala se meterá en la cabeza de este joven para involucrar en su camino.
Este joven creó un hechizo diferente a los demás, más fuerte que ninguno, pero muchos querían saber cuál era, aunque nunca nadie supo saber cuál era, ya que este cayó y conjuró el hechizo que cayera en el lobo vendedor de la primera y única vez que la luna roja y la luna azul se juntan para que, dos lobos y a la vez personas que tiene el don de la magia, sea el que obtenga ese poder y pueda ver ese hechizo, pero Alexandra no se quedó después de ganar la batalla en el laberinto de las sombras, aunque su poder fue transmitido a su hija, Garm, que ahora estaba memorizando aquel hechizo de la nada, ella ahora era indestructible cuando pronuncié aquellas mágicas y únicas palabras.

Escritora: A partir de mañana, voy a estar preparando un especial de Halloween, y no voy a poder publicar capítulos, lo siento de veras, pero era que debo estudiar
Fenris: Sí pero tendrás de seguro momentos libres, es tópico de ti
Escritora: Estaré preparando el especial de Halloween
Fenris: Ten en cuenta que en el tiempo libre te estaré molestando chica bipolar
Escritora: Condenado elfo(susurré pero este me escuchó perfecto, condenados oídos élficos)
(Iba a despedir como siempre el capítulo, pero el elfo me empezó hacer cosquillas de nuevo, debo de dejar de pensar en voz alta, si no siempre voy a a tener ataques de risa(
Fenris: ¿Vas a retirar lo que has dicho?
Escritora: S-sí...... Él tre-trenta...... D-de Febr-febrero
Fenris:Como quieras
(Fenris siguió haciéndome cosquillas, adjudicado, no traigo más a un elfo a mi casa)