Tinder

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Me despierto después de apagar la cuarta alarma, anoche apenas pude conciliar el sueño, ya que no había dejado de darle vueltas a varios asuntos a la vez.

El primero, la confusión que siento con Eren. Traté de contestarme las preguntas que me había hecho a mi mismo durante la tarde anterior solo para acabar llegando a la conclusión de que soy bipolar. El segundo, el hecho de que Petra tiene un hijo y Erwin está a punto de casarse y formar una familia. El tercero, que tengo que hablar con Farlan para averiguar qué es lo que tanto le molesta de todo esto.

Apenas he dormido dos horas, pero la tienda no se va a abrir sola, de modo que me levanto y me dirijo al baño para ducharme con el agua embotellada que compré el día anterior. Intento despejarme con un buen té negro y unas tostadas y justo antes de salir por la puerta abro el chat que tengo con Eren.

Rivaille: Suerte con tu exámen.

Eren había intentado sonsacarme una explicación a lo último que le había escrito la noche anterior, ya que de algún modo le hice ver que quizás podríamos llegar a conocernos antes de lo que esperaba, sin embargo lo dejé con las ganas porque ni yo mismo estaba seguro de lo que estaba pasando por mi cabeza en el momento en que escribí aquello.

Una vez escuché que un personaje de mis series favoritas decía que jamás se debían tomar decisiones importantes a partir de las dos de la madrugada. A esa frase me gustaría añadirle que tampoco se debería chatear a esas horas con personas que hacen que te cuestiones tus inclinaciones sexuales.

Un pitido logra sacarme de mis pensamientos, Eren me ha contestado casi de inmediato, lo que me indica de que es probable que no se haya ido a dormir en toda la noche.

Eren: Gracias Levi 😊 espero que tengas un buen día en el trabajo hoy 😘

Sonrío al leer su respuesta. ¿Cómo es posible que me afecte tanto este muchacho?. ¿Es él o es mi desesperación por gustarle a alguien?.

Ya deja de pensar tanto, Levi, me regaño a mi mismo.

Se me ocurre mirar la fecha en la que comencé a hablar con Eren, por mera curiosidad. Seis días han pasado demasiado rápido, teniendo en cuenta de que sólo iba a probar esta aplicación durante una semana para después borrarla y olvidarme de todo.

¿Realmente estoy preparado para dejar de hablar con Eren?. Sé la respuesta casi antes de terminar de formularme la pregunta.

Charlar con Eren se ha convertido en un hábito bastante placentero para mi. Antes apenas le hacía caso a mi móvil, casi se podría decir que lo tenía solo para emergencias o como pisapapeles, sin embargo ahora es lo primero que miro nada más levantarme por las mañanas. Es extraño, porque no comprendo como puedo haberme atado a una persona con tanta rapidez, pero con Farlan me paso algo parecido en su día. Desarrollamos una confianza mutua casi al instante de conocernos, de hecho hablé bastante de mí mismo el primer día, eso es algo muy inusual.

Con Eren se estaba repitiendo esa sensación de que algo conecta y todo rueda de manera fluida y natural. Debería empezar a ser sincero conmigo mismo, esa fue la conclusión a la que terminé llegando después de mi auto interrogatorio antes de dormir.

Sé que mañana se cumple el plazo que yo mismo había decidido establecer para probar esta absurda aplicación para conocer gente. Jamás imaginé que podría llegar a mantener una conversación con alguien que no conozco durante tantos días seguidos, menos aún pensé que llegaría a dar tanta información acerca de mi persona y mi trabajo. Sin embargo, esa es parte de la magia que posee Eren.

Magia...definitivamente algo pasa conmigo.

Aún así, pensamientos extravagantes a parte, este muchacho tiene algo que hace que me sienta muy cómodo hablando con él. Respeta mi forma de ser, en ningún momento me ha pedido que no sea tan cínico ni que suavice mi carácter. Tampoco se ha quejado por la manera que tengo de expresarme o por decir, en este caso escribir, demasiados tacos.