(Omegaverse Yaoi)
Haber nacido en una familia de alfas ya era de por sí un problema para Kai; su única salida fue huir de casa para evitar ser la vergüenza de la familia.
Un niño nacido Omega no era para menos en esa casona, por lo que decidido a v...
Despertó creyendo que todo lo pasado había sido un sueño; sin embargo al tratar de moverse pudo sentir ese calor familiar que recorría su vientre y recorría todo su cuerpo...su celo. Supuso que la señorita tuvo que ver en eso ya que su reciente celo lo había pasado con Grey. Trató de levantarse pero su cuerpo se negaba a reaccionar y comenzaba a soltar feromonas en busca de su alfa; escuchó la puerta abrirse y vio a aquel hombre que le había comprado cubriendo su nariz con una pañuelo, sonrió al verle en la cama mientras respiraba algo agitado.
-Buenos días dormilón, ¿conque esto es el celo de un Omega?- Quitó el pañuelo y acarició los cabellos del pelinegro quién intentó en vano alejarse, su cuerpo estaba tornándose débil cada vez más. Respiraba pesadamente y sentía la necesidad de estar con aquel alfa que amaba con toda su alma pero quizá ya no volvería a ver. Trago en seco cuando el alfa paso la lengua por debajo de su mentón, sintió asco pero su cuerpo lo gozaba, era claro que aveces lo que sentía no correspondía con lo que hacía y en esta ocasión se estaba dejando llevar; se recostó en la cama y no supo como ni cuando minutos después estaban ambos juntos en la habitación, él gimiendo debajo de aquel hombre que ahora le daría casa y sustento. Sus gemidos no denotaban mucho gozo..al contrarió las embestidas eran bruscas y lo estaban lastimando tanto que al intentar separarse fue tomado a la fuerza y colocado boca abajo mientras aquel hombre lo penetraba lastimando su interior.
Fueron más de 7 veces las que ese hombre estuvo anudando dentro de él, terminó el acto en el octavo nudo; Kai no podía más termino desmayándose con los ojos llorosos y una garganta dolida...y ni que hablar de su vientre y su entrada. Realmente había llorado demasiado, Grey jamás lo había tratado de esa forma, y realmente le extrañaba pero no sabía que estaba pasando él en estos momentos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Tocaron la puerta por quinta ocasión, el ruido hacía que le doliera la cabeza y se hundiera más en las frazadas de su cama.
-....Grey...cariño....te traje de desayunar...amor...come algo por favor...- La Sra. Valeria ya había llevado la comida y la había puesto mirando la charola del desayuno intacta, le dolía ver a su cachorro de esa forma, ella sabía que un lazo no se podía romper ni siquiera después de la muerte, pero siempre creyó que eran mentiras para hacer que las parejas aceptarán contraer nupcias esperando que la leyenda fuera cierta; y a pesar de todo..era real, ver a su hijo sin ganas de nada..sin querer levantarse y haciendo que su habitación tuviera un ambiente pesado debido a sus feromonas....todo estaba mal. Se acercó a él para acariciar sus cabellos y tratar de hacerle sentir seguro como antes, libero algo de sus feromonas para calmar las de él..y en parte funcionó, sólo que este rompió en llanto argumentando que podía sentir lo que él otro sintiéndose impotente al no saber cómo ayudarlo ni que hacer, y eso sólo empeoraba todo.
-Amor, tu padre ya está trabajando en esto, por favor relájate. En cuanto sepa algo te lo hará saber, pero come algo por lo mientras.- Se levanto y trajo la comida dándole de comer en la boca, metió la cuchara en su boca con algo de sopa y verduras, pero después de la segunda cucharada volvió a recostarse ocultando su cuerpo dentro de las frazadas. Ella se levantó resignada y bajo la primera charola para dejarla en la cocina; minutos después llego el Sr. Ivan quien estaba igual o peor que Grey.
