Tú y Yo

~Compromiso~

A veces todo pasa sin saber el porque, este es mi caso...encontrarme con Axel y ahora estar comprometidos es mucho para mi, cuando los amigos de mis padres supieron que era un Omega quisieron ganar mi mano pero su desilusión fue grande cuando estos se negaron y sólo los invitaron a la boda. Así es...después de un año de estar juntos, al fin cedí mi mano....aparte de que últimamente me había sentido tan mal, tanto que Axel tuvo que cargarme hasta la casa una vez que salimos a comprar manzanas. Y si..ahora estoy en cinta, me molesta que Axel se aleje de mi, me molesta que mire de reojo a las chicas, o que escriba una carta sin entrar en detalles; creo que me he vuelto algo posesivo con mi alfa cuando este se aleja del nido. No supe el momento en que hice mi nido, solo sabía que necesitaba estar rodeado de algo mullido y que todo oliera a mi alfa, no permito que las mucamas entren a mi habitación, odio sentir el aroma de alguien más, aparte de que me siento terrible cada que alguien se acerca de más; él ahora es más apegado a mi y me llama gato arisco, odio todo...pero amo cuando regresa a mi lado y se mete al nido conmigo. Moriré en la fiesta con todos esos olores revoloteando por mi nariz, espero no arruinarlo todo, aunque quien culparía a un Omega en estado de gestación, dos meses se dicen fáciles pero desde el primero para mí ha sido muy difícil.

     Estaba a punto de cumplir los tres, mi pancita aún se puede cubrir con un saco, no es muy abultada, pero me he enterado por Hilda que aún no hay señales de Kai.....necesitaba a ese idiota, por alguna razón él sabría que hacer, no confío en mi madre ni mi cuñada, no es que fueran malas, sólo que al no ser Omegas ellas no comprenden sobre algo de como me siento. Esto me está matando, odio sentirme desesperado al no tener a Axel cerca; creo que ya entiendo el porque Grey siempre iba con Kai todas las noches, al igual que Axel llega agitado al salir corriendo de su trabajo para llegar antes de que caiga la noche a casa y poder acurrucarse a mi lado para que ambos podamos sentir su aroma. El bebé aveces me causa muchos malestares al no tener el olor de su padre cerca.

 Falta una semana para prevenir todo, mi madre ya apartó el salón y que decir de mis suegros, se lucieron al saber que serían abuelos...aunque la mayoría de los regalos de bodas son juguetes,ropa y pañales para recién nacidos.

 Axel invitó a todos sus compañeros y algunos amigos que conoció en los días que hizo su servicio militar; yo tome una invitación para enviarla al Omega ya que después de un mes Hilda me contó que Kai estaba en la casa de un político, me alegre al escuchar el nombre de Kai salir de sus labios y decirme que él esperaba trillizos de Grey; ¡pobre! si yo me quejo por uno seguramente él estará ojeroso por soportar tantos. Puse a Axel de remitente; ya que después de todo lo que le hice yo no me atrevía verlo a la cara. Sólo espero que realmente él este presente ese día y se encuentre bien.

  Kai seguía dormido después de volver el estómago dos veces esta mañana; suspire algo cansado; realmente se veía terrible pero el doctor me dijo que era normal, acaricie su mejilla y deposite un beso en su cabello, adoro su aroma es tan dulce y relajante; tocaron la puerta muy suavemente para evitar despertar a Kai pero fue en vano en cuanto escucho el primer "toc" levanto la mirada para ver quien quería entrar a la habitación, aunque no me lo dijera podía sentir sus ligeros sobresaltos realmente le asustaba despertar lejos de la cama.

-Perdone, joven Grey, le llegó esta carta de su primo y esta invitación.- Isabela me entregó un pequeño rollo y una carta, el rollo venía a nombre de Kai y la carta con la leyenda "Grey y familia", al entregármela se retiro cerrando la puerta mientras Kai trataba de incorporarse de su nido, amaba verlo despertar y acariciar su ya abultado vientre, sonreí al verle, era tan irreal aquello.

-Deberías seguir durmiendo, sólo eran cartas.- Me acerque a ayudarle a acomodar en las almohadas. Por su vientre le costaba trabajo mantenerse en una posición, los dolores de espalda eran algo común en él aunque nunca se quejaba, pero su rostro a veces dejaba ver alguna mueca que me indicaba que no estaba cómodo o necesitaba que frotara parte de su cintura en un intento de calmar el dolor.

-Estoy bien.- Me sonrió como solía hacerlo cuando vivíamos en casa de mis padres mirándome tiernamente...dios esas ojeras le daban un toque realmente tierno. -¿Quién la envía?- Miró el rollo y acarició su vientre, supuse que los bebés se estaban moviendo dentro a lo que no pude evitar sonreír. -Es Alejandro, ¿Quieres que te la lea?.- Me miró y sonrió tiernamente al ver la leyenda "y familia" supongo que a él también le costaba creer esto.

-"Estimado Grey, estamos felices en invitarles a usted y a su apreciada familia a el enlace matrimonial de nuestro hijo Axel Alaín con el joven Alejandro Pierce, que se celebrará en la residencia de los señores Alaín; esperamos contar con sus presencia ante esta importante celebración. 

Por favor no falten.

Att:  Sr. Ricardo Alaín  y Sra. Ara de Alaín."

-Al parecer nos ganaron esta vez.- Sonreí al ver que la mirada de Kai se volvía dulce. -Si...después de todo los destinados no pueden mantenerse alejados.- Acarició su vientre al sentir otra ligera patada de uno de los bebés, sonreí y besé su vientre haciendo que los cachorros se quedarán quietos por unos instantes.

-¿Quieres buscar algo para ese día?, Yo podría buscar algo formal.- Me miró y suspiro. -No creo entrar en algo.- Sonrió mientras miraba su pancita. - Tonterías te ves hermoso tal vez deba llamar a un sastre y....- Me sujeto la mano y sonrió.- Yo lo haré, déjamelo a mi.- Me perdí en sus ojos y sonreí. -Esta bien, pero no exageres, eres mio en todo tu esplendor.- Le besé tiernamente acostándome en nuestro nido mientras me acomodaba detrás suyo, para abrazarle, sabía que amaba eso...y también ellos.