Instant Crush | Yoonmin

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De pronto todo parecía brillar más, las luces de la piscina, las luces de aquella mansión, los reflectores del jardín, las botellas de cerveza que tomé y ahora estaban desparramadas en el piso, los bonitos accesorios de aquella chica linda que me miraba como si fuera a comerse un delicioso pastel...
Pero lo que más brillaba, era la tersa y blanca piel de Yoongi, quien estaba sentado en el sillón mirandome bailar.

No sé en que momento bebí de más, porque al bailar sentía mi cuerpo flotar, y al hablar mis labios arrastraban las palabras, al igual que sentía un cosquilleo en ellos.
No sé si fue cuando Tae y Kook se separaron de mi para irse a refrescar a la piscina llena de chicas, o si fue cuando vi a Yoongi mirarme de esa manera que no sabía descifrar.

No sé cuantas botellas tomé, no fueron muchas, ya que soy un pésimo bebedor. Pero sí las suficientes para ponerme a bailar aquella alocada música que me hacía sentir bien, yo amaba bailar, debo admitir que me movía demasiado bien, o eso quise suponer, al ver como Yoongi caminaba lentamente hacia mí, ignorando a todas las otras personas que bailaban o tomaban perdidamente alrededor, sin percatarse de ambos.

Me congelé por 1 segundo, pasó en cámara lenta en mi cabeza.
Se acercó con una sonrisa coqueta hasta donde yo estaba, creo que se percató de que el alcohol ya había hecho efecto en mí.
Paré de bailar y sentí su aliento cerca de mi oído, y un suave roce de su mano en mi cintura.

— Qué bien bailas, Park.

Sentí una pequeña descarga eléctrica dentro de mi al sentir su mano y al escuchar su voz.
Grave y algo rasposa, su aliento era cálido como su roce. Alcancé a percibir lo que era un aroma ligero a cigarrillo y una loción muy masculina que puso mis bellos de punta.

No dijo nada más.
Sólo siguió su camino y se perdió entre los invitados que bailaban y se restregaban entre ellos.

Y yo me quedé ahí parado, procesando lo que había ocurrido hace unos segundos.
Aún sentía la adrenalina de haber estado a centímetros de aquel chico que tanto me gustaba.

Lo primero que hice fue correr y buscar a mi par de idiotas, quienes estaban en la alberca besándose. Ops.

— ¡Taehyung! — grité logrando atraer su atención.

— ¿Qué pasa Jimi-..— abrió los ojos como platos — ¿Jimin? — se separó de Kook y quien lo abrazaba y ahora hacía un gesto de molestia por aquella acción — ¡Cuéntamelo todo!, tu cara ya me hace una idea de que pasó — dijo saliendo de la piscina, empapado y casi arrastrando a su pareja.

— ¿eh? — joder, había olvidado que Tae adivina todo lo que pienso, o tal vez tenía cara de muerto por lo que acababa de ocurrir hace unos minutos

— Jimin, estás rojo de la cara — dijo Jungkook con una cara seria

Bien.
Había olvidado lo mucho que me sonrojo por cualquier cosa, y bueno, lo ocurrido no fue cualquier cosa, fue por Yoongi, así que ya me imagino que tan sonrojado seguía.

— Joder, estoy alucinando Tae, creo que hasta se me bajó todo el alcohol que traía en el cuerpo.— dije ayudándolo a quitarse su playera que estaba empapada.

— Vale, tendremos que hablar de esto camino a tu casa. Ya debemos irnos, si no tomaré un severo resfriado, olvidé traer un cambio de ropa— dijo mientras exprimia su playera negra.

—TaeTae, ¿podría acompañarlos a dejar a Jiminnie? — dijo Kook con una expresión de gatito abandonado. Já, este chico cree que no me huelo sus intenciones con mi Tae.

— ¡Claro Kookie! — respondió Tae con una enorme sonrisa en su cara. Dios, ya llévenme de una vez, no soporto verlos coquetear mientras yo muero lentamente por lo que ocurrió con Yoongi hyung.

🌹

Me llevaron a mi casa, no tardamos más de 10 minutos en llegar. Tae estaba empapado aún y temblaba por el frío de la noche y por su cabello mojado.
Jungkook lo miraba como si estuviera perdido en él. Y yo me bajé del auto después de despedirme de ambos.

Contarle a Tae lo que ocurrió en aquella fiesta no me tranquilizó en absoluto, sólo llenó mi cabeza de más dudas y de emoción. Aún no estaba seguro si eso pasó en verdad o si sólo lo imagine a causa de todo el alcohol que bebí. Tal vez mañana recuerde mejor lo que pasó, por ahora sólo me meti en mi cómoda cama y me dormí.

🌹

Me despertó un delicioso olor a hot cakes que provenía de la cocina.
La cabeza me iba a estallar, por cierto.
Así que lo primero que hice fue levantarme, y darme un buen baño, para quitarme aquel dolor y el olor a cigarro y alcohol que cargaba desde anoche.

Me puse ropa cómoda, era sábado y no tenía que ir a la universidad, por lo que planeé quedarme todo mi fin de semana viendo películas en Netflix y engordar comiendo helado de fresa.

Bajé a la cocina y vi a mi madre poniendo los platos en la mesa, corrí a ayudarle a terminar de acomodar todo, sin antes dedicarle un Buenos días  y abrazarla.
Mi madre era un ángel. Me había cuidado sola desde que mi padre se fue de la casa al saber que su único hijo era homosexual, pero eso ya no importaba, éramos felices los dos en aquella pequeña casa donde ambos nos esforzabamos en hacer un hogar.

— Tu cabello bebé, ¡se ve hermoso!, ¿cuando te lo volviste a pintar? — soltó muy emocionada. La adoraba, nunca rechazaba ningún look extravagante que usaba, nunca criticaba mi manera de vestir ni mis gustos, siempre apoyaba todo lo que hacía sin hacerle el feo a algo. Y eso me hacía demasiado feliz.

— Ayer, Tae, el chico que te conté hace unos días que es mi amigo, me hizo ir a teñirlo— dije con una pequeña sonrisa gracias a su bonito halago— Y éste fue el resultado, que bueno que también te haya gustado mami.— ejem, sí, yo era un niño de mami, no me importaba lo que dijeran.

—Claro que me gustó, siempre te ves bien con cualquier color de cabello— dijo mientras me revolvía un poco el cabello — ¿Y bueno, cómo te fue anoche ChimChim?, al parecer llegaste algo tarde — dijo metiéndose a la boca un pequeño pedazo de hotcake.

— Perdón mami, Tae me trajo en el auto de su mamá, así que no había de que preocuparse. Y me la pasé bastante bien— dije con una sonrisa en la boca y tomaba un sorbo de aquel delicioso jugo de naranja que mi madre había preparado.

— Muy bien ChimChim, me alegro que estés pasándola mejor en ésta nueva universidad. Ojalá sea la última por la que pases. Me hace muy feliz que ya tengas unos cuantos amigos. — dijo mi madre acariciando mi mejilla. Se veía tranquila y eso me relajaba.

Las otras 2 universidades donde estuve en lo que va el año, no resultaron ser buenas para mí. O no se que fue lo que yo no hacía bien, pero no llegaba ni a la semana sin haber sufrido una que otra golpiza de algún grandulón, o insultos acerca de mi forma de vestir o específicamente de mi preferencia sexual.
No sé hasta que punto la gente dejará de ser tan cerrada de mente acerca éste tema. Pero ya no importaba, estaba feliz en ésta universidad, y todo marchaba bien hasta ahora.

— Ten un lindo día en el trabajo mamá, ve con cuidado— dije dándole un pequeño beso en su mejilla y acto seguido despidiéndola al cerrar la puerta de entrada.

Sería un fin de semana de relajación y de películas.
Rayos, debí pedirle su número de celular a Tae, así podría haberlo invitado a dormir y ver aquel maratón de terror que tenía planeado.

🔮

Espero que hayan disfrutado del pequeño avance del Yoonmin :v
Creo que esto avanzara un poco a paso caracol, pero sé que lo disfrutaran. Trato de apegarme lo mas que puedo a la realidad y no aplicar la de meter lemon al segundo cap o cosas así, jaja.

Éste cap fue crucial para la historia, nos dimos cuenta de algunas cosas sobre la familia de ChimChim :3

La foto del cap es Tae por si alguien no sabe xd

sigan disfrutando bebés, gracias por sus comentarios!

Madness_Min ♡ ~