Instant Crush | Yoonmin

| 27 |

Entré a la biblioteca junto con unos cuantos libros en mis brazos, mi pequeña mochila sobre mis hombros y una muy notable expresión de nervios. Aunque era algo diferente ya que eran nervios de felicidad, tal vez, o algo parecido a ello. No eran nervios negativos, simplemente sentía que algo diferente ocurriría aquella tarde junto a Yoongi. Y no quería esperar más para averiguarlo.
Caminé lentamente por los pasillos del gran lugar, ésta vez había más gente de lo normal, las mesas estaban ocupadas por estudiantes y maestros, la bibliotecaria atendía a un grupo de chicos que requerían de su ayuda para  tomar libros y llevarlos prestados, etc. El lugar se veía lleno de personas, cosa que no me incomodó, sin embargo, sería un poco difícil estudiar en el piso como solemos hacerlo Yoongi y yo en los pasillos de los estantes.

Al llegar al lugar exacto donde vería a mi atractivo castaño, noté que éste no había llegado por lo que tomé asiento recargando la espalda en el alto y polvoriento estante detrás de mi antes de abrir mi mochila para comenzar a sacar mis apuntes, no fue así hasta que mi celular comenzó a vibrar junto con el ruidoso tono de llamada que tenía como predefinido aquel aparato. Rápidamente saqué el móvil de mi bolsillo para contestar, dejando aún lado mi bolso lleno de libros.

—¿Diga?— contesté.

—¡Jiminnie!— contestaron del otro lado de la línea.

—¡Tae!, ¿que pasó?, acabamos de despedirnos hace unos minutos— reí.

—Lo sé, lo sé— carraspeó su garganta —sólo quería decirte que hoy haremos noche de películas Kook y yo en mi departamento, por si querías venir más tarde— respondió.

—¡Oh! vale, me agrada la idea, sólo termino de estudiar un par de horas con Yoongi hyung, e iré directamente.

—Pediremos pizza, ¿te parece?— preguntó.

—¡Está perfecto!— sonreí.

—Por cierto, ¿y tu Yoongo bongo?

—Oh, aún no llega— dije un poco desilusionado —espero que no tarde en—...callé abruptamente.

Justo en ese momento giré mi cabeza para mirar hacia la entrada de la biblioteca que podía divisar a través de los estantes de libros, cuando lo vi.

Mi respiración se detuvo por varios segundos, pero a mi me pareció que hubieran sido horas. Sentí mi sangre congelarse un poco, abrí mis ojos como platos y tensé mi cuerpo instantáneamente. Mis ojos recorrían aquel cuerpo millones de veces, sin lograr entender cómo es que otra figura alta y delgada acompañaba a éste. Bastante cerca. Con cabellos dorados a la altura de su cintura, una delicada falda junto con unos tacones y un lápiz labial color carmín.
Acompañaba a aquel castaño con una comodidad casi natural, mostrándose tranquila y hasta casi divertida a lado de éste. Movía sus belfos sin titubeos con la mirada puesta en él sin ningún ápice de timidez, cosa que me causó un sentimiento extraño dentro de mi pecho.

¿Quién era ella?¿Porqué se veía tan cómoda a lado de Yoongi?¿Acaso será su pareja, o algún romance del cual yo no estaba enterado?¿Una amiga?¿Su hermana?¿Porqué se veía tan linda y perfecta a lado de él?¿Porqué Yoongi parecía disfrutar de su compañía?¿Porqué le sonreía tan hermosamente y de aquella manera por la cual yo suspiro cada minuto?¿Porqué estaba a puNTO DE TOCAR SU MANO Y DESPEDIRSE DE ELLA DE BESO EN LA MEJILLA?¿QUÉ DEMONIOS ESTABA PASANDO?

Sentí que se me ponían los nervios de punta. El sólo ver aquella escena me había causado un fuerte tirón dentro de mi abdomen, acaso eso eran... ¿celos?
Joder, no podía ser.

—¿Jimin?¿estás ahí?— escuché la voz de mi amigo del otro lado de la llamada.

—Eh...— parpadeé rápidamente y caí en cuenta de la situación rápidamente —Perdón me tengo que ir, los veo de rato— colgué.