COLMILLOS Y GARRAS

CAPITULO 24: ¿LA AMAS?

POV ANTHONY:

ENTRA EN MI VIDA, esas fueron mis palabras susurradas en la tarde de  hoy, estando en mi cama, junto a Annie, la mujer, dueña de mi pensamiento y de mi ser. Sin ella, ya no sería el mismo, no podría vivir o pensar sin Annie. Gracias a mi pequeño Demonio, me devolvió mi vida, y me hizo sentir como nunca otra mujer me ha hecho sentir antes. Por ella daría lo que fuese, si me pidiese que renunciara mi ser, lo haría; si me hiciese renunciar a mi linaje, lo haría, ya que no la quiero perder; si ella me quisiese convertir en un monstro como ella, lo aceptaría con mucho gusto, ya que no querría perderla ni dejarla ir por el resto de mi vida…

Annie y yo estábamos acostados en mi cama, desnudos, escuchando las constantes respiraciones uno del otro. La tengo en mis brazos, si nadie que nos moleste o nos rechace por nuestra condición. Nuestra propia isla alejada del mundo, teniéndonos uno del otro. Ella con una tierna voz me dijo:

-Eres mi todo Anthony-.

-Annie, si yo fuese tu esclavo, sería muy feliz sirviéndote en todo momento. Como quisiera, regresar el tiempo, y enamorarme de ti nuevamente-.

-Anthony, yo te amo, demasiado, y quisiera decirte: PIDEME LO QUE DESEAS, Y YO TE LO DARE-.

-Entonces, lo que te quiero pedir, es que nunca me dejes, entando en las buenas y la malas. T u siendo mi Princesa y yo el Rey que  tanto amas, quisiera que tu fueses…-, la emoción no me dejo hablar y ella con una curiosidad muy grande me pregunto:

-¿Como si yo fuese?-.

-Tu mi Julieta y yo tu Romeo-.

-¿Acaso nuestro amor está prohibido?-.

-Es tanto el amor que nos tenemos, que es muy ilegal demostrarlo ante los ojos de cualquier mortal-.

-No es amor, lo que sentimos, es adoración, la que te tengo, por que eres y serás el DIOS DE MI ADORACIÓN-.

-Y tú eres mi DEMONIO VESTIDO DE ÁNGEL-, MIERDA, se me zafo, no pude detener esas palabras, y esta con una mirada coqueta me dijo:

-Te hayo, totalmente la razón, seré TU DEMONIO VESTIDO DE ÁNGEL, y nadie me va a quitar ese título-. Vaya, eso sí fue pasar un buen susto, pensé que me iba a mirar mal, pero no, a ella le gusto y si ella es feliz, yo soy feliz.

-Mi Annie Rosweld, quisiera escapar contigo, y alejarme de todo lo que nos rodea, siento simplemente tu y yo-.

-¿Harías eso por mí?-.

-Por ti, dejaría de ser Anthony Smith, por ser simplemente tu angelito-.

-Anthony, se mío, y dejare de ser Annie Black-.

-¿Black?-, dije confuso.

-Ese es mi verdadero apellido, antes de que me adoptaran los Rosweld, me llamaba Annie Marie Black, ahora sabes un poco más de mí-.

-Annie, con solo mirar tus ojos, siento que te conozco al derecho y al revés, estos datos dichos por su dulce voz, son  simplemente datos curiosos-.

-Como quisiese contarte la verdad, pero no puedo, soy muy cobarde para hacerlo-, dijo en un tono depresivo.

-Con el tiempo sabré más cosas de ti, no me importa quien hayas sido antes, siempre te AMARE-, le dije para tranquilizarla un poco.

-Me alegra oir eso-.

 Y antes de que pudiera pronunciar algo, Mickeyla entro apresurada a mi habitación, vestida con su uniforme azul oscuro con falda gris, medias blancas hasta la rodilla, y valetas negras, y esta dijo:

-Anthony, tengo que hablar contigo…-, ella nos miro, e inmediatamente tape a Annie con mi cuerpo para que Mickeyla no la viese, y con un tono muy enfurecido le dije: