COLMILLOS Y GARRAS

CAPITULO 44: EL LA DESEA

EL DESEO ha hecho que el ser al que por toda mi vida admire de uno a un millón se vuelva mi enemigo en el amor.

Debo admitir que enamorarme de mi peor enemigo ha sido una de las acciones más estúpidas e iónicas haya hecho en mi vida, pero aquel ser que te infundio el odio hacia los seres más temidos y despreciables de todo el mundo sienta algo más por la chica que te pertenece, hace que todo se vuelva más confuso en mi mente.

Competir con un mortal en el amor, es más fácil de lo que cualquier licántropo puede hacer para ganarse el amor eterno, pero competir con tu propia especie y con tu misma sangre por el amor de alguien, deja mucho que decir de ti y de la persona que planea robarse el corazón de tu amada reina…

POV ANTHONY:

He de admitir que yo también he asesinado a un vampiro de la formas más sádicas y dolorosas que cualquier licántropo pudiese hacer, debo admitir que no soy una perita en dulce santa e inocente para decir que no he cometido mis errores a lo largo de toda mi vida y que no le hecho daño a un ser diferente y despreciable a mi modo de pensar.

Pero ver morir ante mis ojos a un ser que probablemente pudo tener su familia en manos de la mujer que supuestamente amo, es lo más denigrante que he podido presenciar en todos mis años de vida como licántropo. Se que este le hizo daño y la quería matar en frente mío ocultándose detrás del amor hacia un mortal que tuvo alguna vez Annie, pero ella usar su don para hacer que este mismo atentara contra su vida, por favor ni yo miso haría eso.

Para evitar futuras discusiones con ella, me aleje de su casa y de todo lo que había sucedido recorriendo el mismo camino que tome anteriormente. Caminaba y caminaba lentamente pensando en las palabras que me dijo Annie antes de que llegase aquel cazador, ¿Aún seguía enamorada de aquel mortal? ¿Qué hubiese sucedido si este ser era realmente el mortal del que se enamoro ella anteriormente? ¿Me amaría o se iría con aquel ser que robo por primera vez su corazón?.

De un momento a otro llegue a casa, en donde toda la manada entrenaba y entrenaba por si había una posible invasión vampira en la ciudad, pase por un lado sin fijarme si me necesitaban o no y detrás mío escuche la voz de mi padre diciéndome:

-Anthony necesito hablar contigo ahora-, me di vuelta sobre mi propio eje y pude ver que estaba vestido con sus usuales jeans gastados, su camisa negra de RAMONES y sus botas militares negras.

Inmediatamente lo seguí hasta su oficina que se encontraba en el primer piso de la casa, esta es grande, con el techo y el piso cubierto de madera, stands llenos de libros y su famoso escritorio de madera suiza con su Mac Book encima de este. El se sentó en su cilla de cuero negra mientras yo cerraba la puerta para que nadie nos escuchase la conversación que íbamos a tener él y yo.

Me situé enfrente de su escritorio y este con el ceño fruncido me dijo:

-¿En dónde estabas?-.

-Dando un recorrido por el bosque-, dije despreocupado.

-Dime la verdad Anthony, se que estabas en territorio enemigo no me mientas-, dijo con un tono más autoritario.

-¿Y si lo hubiese estado? ¿Qué me pasaría padre? No le veo nada de malo ¿O sí?-, pregunte enarcando una ceja, ¿Mi padre preocupado si estoy o no estoy en territorio enemigo?, es lo más extraño que está tomando esta conversación.

 -Sabes que estar en ese territorio lleno de monstros es peligroso para ti-, dijo más alterado.

-Padre me se cuidar solo, no necesito de tu protección misteriosa-.