La prominente figura de bakugou katsuki se dirigía hacia aquel cuarto donde sabia se encontraba aquella pelirroja que había osado burlarse de él frente a los enclenques que los observaban. Pero eso no se quedaría así, claro que no. La haría suplicar...
-¡que tiernas!- exclamó entusiamada Ashido mientra observaba a dos pequeñas niñas que se infiltraron en la academia.
-¿como lograron entrar aqui?- cuestionó Denki mientras una de las niñas, que aparentaba tener 4 años, intentaba jalarle el rayo que decoraba su pelo.
-mi mamá las cuida y tuvo que venir a firmar unos papeles- explico Sero rascandose la nuca - no le quedo de otra que traerlas y parece que se escaparon.
-Hanta-niisan juega con nosotras- dijo la pequeña de 7 años.
-¿y como te encontraron?- quiso saber uraraka.
-yuki tiene el quirk de rastrear a las personas a las que a visto alguna vez- continuo explicando el pelinegro, refieriendose a la hermana mayor.
-ooh que cool- Ashido apachuchaba a yuki como si de un oso se tratase. - ¿y la pequeña no tiene quirk?-
-aun no lo ha manifestado- dijo sereno intentando alejar a la pequeñita del rubio. Ocasionando un enorme berrinche.
-todos sientense- ordeno sin mas Aizawa ingresando al salón. Una mirada reprobatoria al chico celofán basto para que este le explicara en un resumen balbuceante lo ocurrido. El profesor como siempre imperturbable solo le ordenó llevar a las pequeñas con su cuidadora y volver inmediatamente. No contaron con que la niñita de 4 años comenzara con un ataque de histeria pataleando y golpeando todo a su alrededor, mientras su hermana y el joven pelinegro intentaban calmarla. En medio de su berrinche y en un intento por escapar, la niña se avalanzo hacia la derecha, justo donde se sentaba el rubio explosivo. Al caer sobre el rubio, la mirada de la niña se cruzo con la del confundido chico. Los ojos de la pequeña se pusieron blancos y seguido de esto, los ojos de Kacchan también.
Katsuki se desmayó automáticamente. Tal parece la niña había manifestado su quirk por primera vez.
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Habian pasado horas desde que el chico se desmayó. Las clases de suspendieron para 2-A y fueron recluidos en sus dormitorios. Todos estaban preocupados por lo que podria llegar a pasarle ¿que consecuencias podria tener ese desconocido quirk? ¿y si nunca despertaba? Akane habia dicho una y mil veces que le chupaba un huevo pero se le cerraba el pecho de solo pensar en no volver a verlo. Se reunieron en la sala común para ver si tenian noticias de su compañero. No paso mucho hasta que Aizawa-sensei apareció junto al director con un bulto de tela entre las manos.
-Aizawa-sensei ¿que paso con kacchan- preguntó preocupado Izuku. El prefesor solo suspiró y le hizo una seña al peli verde para que se acercara.
Con temor y algo confundido el chico obedeció. Y al acercarse el peli negro destapó aquel bulto, descubriendo así, a un pequeño bebé de cabellos rubios y ojos color sangre. No se necesito más para hacerles comprender quién era, sobre todo por el ceño fruncido.
-¡¿que demonios le paso!?- estallaron varios de sus compañeros asombrados y espantados por igual. El profesor le paso el bebé al portador del one for all, quien como pudo lo sostuvo teniendo cuidado con su fragil cuello. Recordaba vagamente que Akane le habia enseñado un poco sobre niños cuando les habia tocado cuidar a la bebé de la vecina.
