149 - Una poesía no es suficiente

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Traigo los sueños magullados para refrescarlos con un poco de tinta; soñar sobre el mar de mi poesía, es bailar como el violín, rasgando la melancolía.

Es inevitable que mis recuerdos aún sigan merodeando a mi dolor; hay tardes como esta,  en la que cuesta más contemplar la agonía del sol en su lecho.

Unos versos no aplacan mi ansiedad por recorrer tu silencio; masticar tu mirada mientras escrutas mi alma; mis versos no te traerán de nuevo a mis brazos

Mi poesía es exigua; con la sonrisa carente; solo gime con su rima desafinada, porque el tiempo sepultó su alegría y ahora sus paredes destilan ojeras; como el moho que adorna mis estrofas.

Ningún verso podrá siquiera delinear el color de mi nostalgia; harían falta vendavales de lágrimas para mojar el desierto de tu ausencia, nuestras huellas se ahogaron en las olas de aquella tormenta.

Una estrofa más se diluye en el eterno silencio; hacen falta, como paliativo,  más que mil versos; escribo y siguen sangrando mis  besos, mi prosa mutilada y estéril se hunde en la impotencia y ni la poesía más vasta, para cantar mi dolor, será suficiente.   

      

Mil y un poemas en silencio #TDA2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora