Penúltimo Cap. 55: Nadie dijo que sería fácil

32 0 0
                                    


Después de ir por los demás, Louis les empezó a explicar lo que había pasado:

-¿Cuándo llegaron ya estaba inconsciente? - pregunto Eleanor entre dientes, había empezado a morderse las uñas por la preocupación.

-No, cuando Harry entro ella seguía medio consiente y luego se desmayó - dijo Louis bajando la voz mientras se acercaban al camerino de Jessica – ahí fue cuando Harry nos llamó y yo salí a buscarlos.

-No quiero ni imaginar cómo esta Harry - dijo Niall – él pensaba pedirle matrimonio esta noche - dijo y las chicas ahogaron un grito.

-¿Matrimonio? - pregunto Sam emocionada y Louis y Liam fulminaron a Niall con la mirada.

-¡Niall! ¡Era sorpresa! - lo amonesto Liam y Niall se encogió de hombros apenado.

-Y ella que estaba preocupada por el embarazo - dijo Carol y los chicos abrieron los ojos como platos.

-¡¿Embarazada?! - chillo Liam y Sam y Eleanor golpearon a Carol mientras Danielle calmaba a Liam.

-No le digan a Harry - pidió Sam – ella quería darle la noticia esta noche- susurro y todos agacharon la cabeza.

-Dijeron que mandarían una ambulancia por ella - le dijo Zayn mientras Harry aferraba a Jessica contra su pecho.

-¿Qué voy a hacer Zayn? - le pregunto Harry sin esperar una verdadera respuesta.

-No hay nada que puedas hacer - le dijo Zayn – solo queda esperar y rezar porque este bien.

Zayn no esperaba que Harry se abriera con él, Zayn sabía lo terco y cerrado que podía ser Harry. Ese era otro aspecto que ambos compartían, pensaban que podían lidiar con todo solos.

Harry tapo a Jessica con su chamarra, procurando que el gorro ocultara su rostro. Era tan doloroso verla así, la chica que él conocía tan radiante y alegre, fría y con la vida escapándose de a poco.

Después de que la ambulancia llegara por ella y Harry subiera a la ambulancia con ella, la conectaron a un respirador artificial.

Harry tomaba su mano fría ente la suyas mientras la presionaba contra sus labios y repetía la misma plegaría:

-Por favor, no me dejes - suplicaba el, consciente de que tal vez Jessica no pudiera oírlo pero quizás si repetía la oración se hiciera realidad, o al menos de eso quería auto convencerse.

La esperanza es lo último que se pierde, por eso siempre preservamos, esa pequeña pizca de esperanza a que algo suceda a pesar de que suena imposible seguimos esperando a que suceda, porque en verdad queremos que pase pero nos auto convencemos de que es imposible, cuando en realidad, nada es imposible. Si nos esforzamos lo suficiente podemos conseguir cualquier cosa, pero a veces, es imposible porque no estamos dispuestos a esforzarnos lo suficiente.

¿Y qué pasa cuando si lo estamos pero aquello que deseamos no depende de nosotros? Entonces solo queda la fe, la esperanza de que las cosas sucedan como queremos que pasen.

Llegaron al hospital y los para-médicos bajaron la camilla con Jessica sobre ella y corrieron dentro del Hospital Saint Maria Nuova. Harry les siguió el paso lo más que pudo, hasta que uno de los paramédicos lo detuvo antes de entrar al pasillo donde los demás para-médicos y Jessica habían entrado:

-Lo siento señor, solo personal autorizado - dijo el hombre y antes de que Harry pudiera contestarle salió corriendo detrás de la camilla de Jessica.

Harry se sentó con la cabeza hundida en sus manos y la espalda encorvada en una de las sillas de espera a lado de la puerta por la que los para-médico y Jessica habían pasado anteriormente. Seguía reprendiéndose a sí mismo, pensando en cómo había dejado que esto pasara

Encontrándonos Otra Vez ~ H.S ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora