El Corazón del Hombre Lobo

Capítulo 17

La familia de Darren estaban los tres juntos inmersos en un abrazo, sentados a unos dos metros lejos de Nikki, ella quería hablarles, pero ellos no se veían de humor y Darren nunca los había presentado y ¿qué les diría? ¿"Hola soy la culpable de que su hijo esté así, lo siento, todo saldrá bien"?.  Nikki se preguntó porqué Tiffany tardó en salir después de que le extrajeran la sangre, la madre de Darren ya había salido hace unos minutos y la operación comenzaba dentro de poco, hasta donde ella sabía apenas lo trasladarían a la sala de cirugías.

Fue como si la hubiera convocado, Tiffany se acercó a ella, se veía débil pero estable, solo es por la sangre que le extrajeron, tenía una gasa de tela pegada en su brazo, y su brazo lo tenía flexionado como le dijeron que debía mantenerse, no es como si hiciera falta que le dieran instrucciones, Tiffany ya había donado sangre antes a Darren.
El tiempo pasaba y Nikki sentía sus nervios subir, sabía que la cirugía sería muy larga, se quedaba paralizada mirando hacia el escueto muro de la sala de espera, poco después Tiffany pudo mover su brazo, y si Nikki estaba nerviosa y lo demostraba quedándose quieta con la mente en blanco, Tiffany era todo lo contrario, no dejaba de moverse, comenzó a temblar, hacía sonar los huesos de sus manos, intercambiaba sus piernas cruzadas, se mordía las uñas. Y finalmente la miró, Nikki sabía que estaba a punto de decir algo

—¿Sabes lo que pasará si la operación sale mal? —hizo la pregunta para saber si Nikki sabía la respuesta porque era obvio que Tiffany lo sabía, pero aún más obvio que Nikki estaba enterada, era hija de un doctor claro que sabía que pasaría

—no te preocupes, mi papá es un gran cardiólogo, en 14 años que lo conozco solo han muerto dos personas en sus cirugías... —tal vez debió omitir la última frase, no es como si a Tiffany le importara la demás gente, a ella le importaba Darren, pero parece que funcionó porque Tiffany no dijo nada más— espera... iré por un té ¿quieres? —Nikki preguntó mientras se ponía de pie, Tiffany asintió, después Nikki le ofreció algo a la familia de Darren; Liselle y Frank negaron, pero Samantha pidió algo para recuperar las fuerzas.

Nikki a escondidas pidió un tranquilizante para Tiffany, no se atrevió hacerlo también para la familia Armstrong

—¿cuanto tardan en hacer efecto? —le preguntó a la enfermera

—depende del paciente pero debe ser casi inmediato

Nikki asintió y lo diluyó en el té, se lo dio a Tiffany y a Samantha le dio un jugo recomendado por la enfermera para pacientes que acababan de donar sangre. Tiffany tomó la mano de Nikki al terminar su té, pronto quedó dormida en su hombro, pero el agarre en sus manos no se aflojó. Nikki sabía que los tranquilizantes no debían dormir a Tiffany, pero ella estaba tan cansada y débil que al relajarse cayó dormida.

*

Después de unas largas horas, en donde todos habían caído dormidos víctimas del cansancio y desvelados, horas de las cuales Nikki no sabía exactamente cuántas habían pasado pues también había quedado dormida.
Adam salió deshaciéndose del cubre-bocas y se acercó a la sala de espera con su traje quirúrgico

—Familiares... y amigos de Darren Armstrong —dijo más formalmente, porque ya sabía perfectamente quienes eran, los cinco se pusieron de pie de inmediato y se acercaron— Darren es un chico muy fuerte, fue una operación muy larga y complicada, y nadie quería perder a Darren... —suspiró, estaba realmente cansado, tenía ojeras y estaba sudando, Nikki podía decir que su André se esforzó mucho— la operación fue exitosa... Darren deberá recuperarse en una semana o menos...

Todos sintieron el alma regresar a su cuerpo, y menos carga en su espalda, Frank y Samantha se abrazaron fuertemente y Tiffany cargó a Liselle para abrazarla igualmente, Nikki se alejó de ellos y solo dirigió una mirada y una sonrisa a su padre, quien guiñó y le dio la espalda, ella pudo notar angustia en la mirada de su padre, pero ya estaba fuera de su alcance, Tiffany y Liselle llegaron a abrazarla también, y aunque eso quería hace unos segundos, ahora solo quería preguntarle a su padre qué había ido mal.

*

Darren permanecería en cuidado intensivo, así que nadie podía visitarlo y los más jóvenes debían ir al colegio. Nikki llegó a su casa y se sorprendió estar sola, se preguntaba donde estaba su madre y a qué hora llegaría su padre.

Intentó hacer su tarea pero el sueño la vencía, se rindió.
Ninguno de sus padres se había aparecido aún, se puso cómoda en su camisón y se recostó, pareció que cerró los ojos solo dos minutos cuando los abrió de nuevo al escuchar la puerta de la entrada principal y los susurros de sus padres, se percató de que en realidad habían pasado dos horas. Todo su sueño se esfumó y salió de su habitación, bajó las escaleras llamando a sus padres. Cuando al fin los vio ellos lucían abatidos, le dirigieron una mirada amenazadora y al hablar con ella usaron un tono irrefutable.

—Nicole vete a dormir, es noche escolar —dijo su madre

—pero... ¿donde estaban?

—Vete a dormir —dijo bruscamente el doctor

—Creí que iban a hablar conmigo, Tyler y tú....,

—¿Ves a Tyler aquí? —Adam estiró sus brazos— hablaremos contigo cuando sea necesario, ahora vete a dormir o estarás castigada más tiempo y esta vez no tendrás permitido ir a visitar a tu amigo en el hospital...

Nikki no pudo discutir más y regresó escaleras arriba hacia su dormitorio.

*

Tiffany al llegar al colegio torció su sonrisa, extrañaba a su amigo esperándola ahí siempre en el costado del autobús escolar, y aunque sabía que estaba bien ahora, ella quisiera que él pudiera estar fuera disfrutando de una vida donde no esté enfermo, ni preocupándose por su ritmo cardiaco, pudiendo estar muy activo, que pueda entrar al equipo de fútbol como él quería, y que pueda comer esa comida grasosa que tanto le gusta y que solo podía comer una vez al mes.

Un chico la empujó cuando bajó del autobús, ella tropezó con otro pie que estaba frente a ella, por poco se cae al suelo, pero una pizca de buena suerte la salvó. Solo pudo mirar a los inmaduros chicos que se fueron riendo de ella. Ted y el otro. Si Darren estuviera aquí no pasaría esto.

Pero aunque su amigo no estaba, alguien más la estaba esperando, Nikki, quien había decidido ir en bicicleta ya que su hermano no estaba para llevarla en su auto.

—Hola... —la saludó y se quitó sus audífonos

—¡Hey! ¿escuchabas música? ¿que escuchabas? —Nikki caminó junto a ella

—30STM...

—Tienes buen gusto

—la verdad, Darren me obligó a descargar toda su discografía a cambio de leer todo lo que yo le recomendaría y me gustó —encogió los hombros— ¿irás a verlo después de clases?

—Aún está en cuidado intensivo, no podemos pasar a verlo, y estoy castigada así que mejor usaré el poco permiso que tengo para ir a verlo cuando pueda tener visitas...

—Buena idea, mis padres también están molestos... nunca entendieron... para ellos solo está su hija periodista "Tiffany es no deseada" — citó las palabras de su madre y musitó entre dientes eufemismos

—¿como puedes decir algo tan terrible? ellos no creen eso

—No los conoces, y si lo creen, escuché a mi madre decírselo a mi padre cuando creyeron que yo no escuchaba —Tiffany torció la mirada, no es que se sienta incómoda hablando de eso con una chica que apenas conocía, solo que ya no le importaba, y después del largo tiempo que habían compartido en el hospital, se sentía cómoda con Nikki.

*

Nikki intentó hablar con sus padres pero ellos la ignoraban y ella no sabía porqué, creyó que era porque no pudo detener a su hermano para irse a buscar a Addison, pero no era su culpa,  su hermano nunca la hubiera escuchado más que a ellos.

Pero todo recobró luz, cuando pudieron visitar a Darren en sus últimos días internado.

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