El Corazón del Hombre Lobo

Capítulo 66

A Darren le invadieron más los nervios ahora que Mike lo observaba esperándolo a que se transforme, sabía que se burlaría o le reclamaría si algo le salía mal. Tomó una profunda bocanada de aire y cerró los ojos, pensó en su madre, quien lo amaba demasiado como para querer donarle su propio corazón, y en su padre, quien era duro con todos excepto con su familia y lo amaba tanto como para asesinar a dos personas, en forma de lobo o no, por él, en Tiffany quien arriesgó su vida para ir a salvarlo y lo ama tanto como para donar su sangre sin medida y falsificando la firma de sus padres, en Nikki quien le había robado el corazón, y lo amaba tanto que fue secuestrada por seguirlo al bosque sin fijarse en los peligros y lo amaba tanto que le perdonó sus acciones. Y por último en su hermana, quien lo amó tanto que sus recuerdos más importantes eran relacionados con él y le solía decir que si él moría ella sería la persona más infeliz del mundo y que nunca lo superaría, y que sólo sonreiría en su lecho de muerte porque se reuniría con él y quien le pidió que nunca se rindiera.

Suspiró, no había funcionado, no tenía más en que pensar y ni siquiera había comenzado la transformación. Abrió los ojos listo para quejarse y decirle a Mike que no había tenido éxito, cuando notó que su vista había cambiado, era mucho mejor que su vista común pero algunos colores se confundían con otros, y se dio cuenta que estaba recargado sobre sus manos, ¿manos? estas eran patas, peludas y enormes, miró a su costado para mirarse, un torso con pelo blanco y brillante había reemplazado su pecho desnudo, y una extraña sensación lo invadió había algo que se movía sin su permiso pero a la vez sabía que él le ordenaba moverse, su cola se movía y él sentía sus músculos de ésta. ¿Como lo había logrado? ¿sin dolor? ¿sin contracciones? ¿sin darse cuenta? Y estaba consiente, sabía quien era.

"Soy Darren Armstrong y vengaré la muerte de mi hermana" se dijo en su mente

"hagámoslo" una voz extra le respondió en su misma mente ¿era Mike? ¿los lobos se comunicaban por telepatía? Lo miró pero Mike se rascaba el cuello con su pata trasera, no era Mike, era él mismo, o su otro yo, un ser que vivía dentro de él. El lobo.

Darren comenzó a caminar, le sorprendió lo natural que era, pata delantera derecha, pata trasera izquierda y después invertido, y su cola esponjada balanceándose como los brazos humanos al caminar. Era inercia, le lanzó un gruñido corto a Mike para que se prepare, Mike regresó a sus cuatro patas y caminó detrás de él. Si sus sentidos habían mejorado aún como humano, como lobo eran un 300% mejorados, el aroma que vino buscando lo guiaba, y era tan fácil seguirlo como una linea con flechas.

Un ruido mínimo del pasto siendo aplastado lo alarmó, fue tan bajo incluso para su oído de lobo, pero lo suficiente para delatar al lobo rojo que estaba a punto de saltar hacia él, Darren retrocedió dos pasos para esquivarlo, el lobo cayó frente a él, Darren aprovechó el desconcierto de Gabriel alias Prick para saltar encima de él con las encías desnudas y las garras rígidas.

*

Tiffany creyó que Darren no había regresado desde que se fue anoche, quizás al fin Nikki y él habían hecho más que dormir juntos, sacudió la cabeza para borrar esos pensamientos, se levantó y comenzó a tender la cama, a mitad de su tarea Frank llamó a la puerta y anunció:

—Darren, Tiffany: ya llegó el desayuno ordené comida china...

¿Comida china para desayuno? A Tiffany le pareció raro pero no sorprendente, Samantha no estaba en tan buen estado como para cocinar y no había muchas opciones para ordenar desayuno, además ya eran las 12:00 p.m. ¿Qué les dirá sobre Darren?

—¿Escucharon? —Frank aún estaba detrás de la puerta

—¡Si! —Tiffany contestó, concluyó que improvisaría una explicación, se colocó sus jeans y una sudadera, se colocó su converse del pie izquierdo, anudó los cordones y después el derecho pero lo sintió incómodo, creyó que la plantilla estaba desacomodada o doblada se quitó el tenis y metió la mano en él, no era la plantilla, era una hoja de papel; frunció el ceño y la sacó, era la letra de Darren, y por lo visto fue escrita con velocidad, además de que estaba escrita con código, un código que ambos aprendieron al leer un libro, que era de los pocos únicos que le había gustado a Darren, en él un grupo de espías había desarrollado un nuevo código para mandarse códigos y que nadie más pueda leerlos, Tiffany y Darren lo aprendieron a sus 15 años y se comunicaban así a veces y se mandaban recados a mitad de clases, pero éste mensaje era muy largo y no podría descifrarlo con rapidez como acostumbraban.

Torció la mirada y encendió la lap top de Darren buscando un sitio que le ayudara, lo había visto hace tiempo y sabía que alguna vez lo ocuparía. Transcribió lo más rápido que pudo el mensaje en el equipo y el programa en linea tardó sólo segundos en descifrarlo. Repasó su mirada por el mensaje sin poder creer lo que éste decía, Frank volvió a interrumpir

—¡Chicos! Se enfriará

—¡Ya voy! —Tiffany contestó desesperada, terminó de leer el mensaje, tomó en sus manos el papel y corrió a abrir la puerta— Frank... tienes que ver esto

*

A pesar de ser dos lobos contra seis pudieron arreglarlo muy bien, aunque sabían que el lobo blanco era el más fuerte y peligroso lo atacaron entre cuatro, Gabriel incluido, mientras los dos lobos restantes atacaban a Mike, uno de los lobos lo mordió y él chilló brevemente, con un gruñido se recuperó empujó a uno de ellos y atacó al otro en un descuido por observar a su compañero, Mike atacó su cuello con una fuerte mordida, y el lobo dió su último aliento, lo hizo tan rápido que el otro lobo apenas llegó a tiempo, Mike forzó la transformación a medias, se puso de pié pero aún tenía pelo en todo el cuerpo y atrapó al lobo entre sus brazos, enterró sus garras en sus costillas perforando los pulmones y ese lobo murió en un instante, en esa misma fase de transformación corrió a ayudar a Darren, quien aunque se defendía bien, estaba acorralado y ni siquiera lo sabía, pues mientras tres lobos lo atacaban Gabriel los rodeaba buscando una ventaja para hacer el movimiento final y saltar hacia él, y si lo derribaba él podía fácilmente ir a su cuello y asesinarlo, Gabriel se detuvo cuando dos lobos tenían ahora sometido al lobo blanco, uno estaba sobre sus pies, y otro tenía su pata en sus costillas sin permitirle levantarse, se apoyó en sus patas traseras para saltar, entonces Mike corrió y lo empujó, éso le dio ventaja a Darren para levantarse y seguir defendiéndose.

El lobo blanco, Darren, empujó con sus patas al lobo que estaba en ellas y el que tenía su pata sobre sus costillas amenazó con atacar su cuello, pero Darren era muy rápido y le dio un zarpazo en su vientre y una mordida en su pata, basto con eso para que fuera libre y se pudiera poner de pié, entonces escuchó su nombre

—¡Darren! —Mike le habló, como aún estaba en la semitransformación podía hablar claramente pero con una voz con eco y el eco se escuchaba casi como gruñido, con sus manos detenía a Gabriel— Tienes que matarlos, sólo así esto se detendrá.

El lobo blanco hizo un movimiento en su cabeza que se vio como un asentimiento, y dirigió sus resplandecientes ojos verdes a los dos lobos no heridos que iban hacia él, se agachó para romper el cuello del lobo que se quejaba del dolor en su viente y pata, lo estrujó simplemente apoyando sus dos patas en su cuello, su fuerza sobrenatural lo había ayudado.

Trató de imitar a Mike para hacer una semitransformación, así tendría la facilidad de poderse parar en dos pies sin cansarse y la facilidad de unas muñecas y pulgares. Corrió unos metros para darse más tiempo en lo que los lobos lo alcanzaban, ponderó el tiempo que tenía, cuatro segundos. Y cerró los ojos

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