Watch me burn

13

Era un dia soleado, hacía tanto calor que era facil acostarse en el asfalto y quemarse. Cada día de verano el lago se llenaba de chicos que iban a nadar, entre ellos había un menudo chico de cabellos rojos mirando la gran caída al lago, una chica de pelo castaño se quitó la playera justo enfrente del pelirrojo, Max se rio al ver el débil intento de la chica. Si ella no tenía un pene, que ni se acercara a Cameron. 

"Voy yo primero" dijo un chico de cabello rubio cenizo, Kyle.

"Te vas a matar" 

"Ojala y sí"

El chico se hizo para atrás para agarrar impulso pero cuando estaba listo para lanzarse un chico de cabello negro calló al suelo desde atrás de un arbusto. Tenía un ojo morado y sangre le salía de la nariz. Las chicas, ahora pudorosas y decentes, se taparon con las manos. Cameron se quedó viendo al chico, no se veía muy estable y antes de que alguien se pudiera acercar a ayudarlo un gritó se oyó desde atrás.

"¡Ahí está!" 

El pelinegro miró a los lados buscando algo con que defenderse y agarró un palo, lo sostuvo entre sus manos mientras dos hombres, uno calvo y otro de pelirrojo con barba aparecían entre los arbustos. 

"Mira lo que haces, asustas a estos niños" dijo el calvo.

"Solo paga lo que nos debes" dijo el otro.

"¡Necesito más tiempo!" exclamó "Keller dijo que me daba más tiempo" 

"Ya pasó tu tiempo"

"Pero..." el chico de ojos azules bajó la guardia y justo cuando los dos hombre se le acercaron le propinó un golpe en la cabeza al de pelo naranja y otro al calvo. 

Soltó el palo y salió corriendo. 

Los cinco chicos se quedaron viendo a los hombres que probablemente estaban muertos en el suelo, agarraron su ropa y se vistieron a toda prisa. Corrieron lejos de ahí y Cameron detuvo a Max del brazo. 

"¿Crees que debamos ir  la policía?" preguntó el chico pecoso.

"No, sea lo que sea, es algo turbio, mejor no involucrarnos" dijo Max "Vámonos de aquí, nosotros no vimos nada"

Caminaron en silencio un rato hasta que Max vio como su amigo caía de espaldas. Max exclamó asustado y vio que la frente de Cameron sangraba, se agachó a ver que había pasado y vio como una herida sangrante se presentaba en la frente. El chico de hacía rato salió de detrás de un árbol y vio su error.

"Mierda" murmuró. 

"Imbécil" Cameron agarró un piedra de tamaño considerable que estaba junto a él y se la lanzó al chico, dándole en el hombro derecho.

"¡Hijo de puta!" exclamó el chico agarrándose el área.

Se agachó por otra piedra mientras Cameron se ponía de pie con otra roca en la mano, se miraron enojados.

'El que esté libre de pecado que lance la primera piedra'

Al mismo tiempo, casi coordinados se lanzaron una roca, apuntando alto. Cameron se movió y vio como al chico le daba en el estomago. Sonrió con malicia hasta que oyó a su amigo detrás de él sacar todo el aire de sus pulmones con dolor. Se dio la vuelta y vio a Max en el suelo agarrándose la entrepierna con expresión dolida. 

"Oh, lo siento, viejo" dijo el chico acercándose al par "También siento haberte lanzado la piedra, pensé que eras el gorila de Keller" 

"No importa" dijo Cameron viendo a su amigo en el suelo "¿Y por qué les debes dinero?" 

"Nada de tu incumbencia, niño" dijo el chico.

"¿Niño?" preguntó ofendido Cameron "Para tu información tengo diecinueve"

"Vaya, maravilloso, solo te gano por cuatro años" dijo divertido "Es una pena que aún no seas legal"

Cameron enrojeció y agachó la mirada. 

"¡Cabrón!" 

El grito del misterioso chico lo hizo volver a mirar arriba y vio como el hombre pelón lo agarraba por los brazos. El pelinegro se intentaba soltar con rabia, pero no lo lograba. Cameron agarró la mano de Max y lo jaló unos metros lejos de ellos. 

"¡Déjenme en paz, pedazos de mierda!" gritó el chico.

Después de un rato se logró soltar, se veía como alguien completamente diferente, sus ojos se habían oscurecido y tenía la mandíbula tensa. Sin pensárselo mucho le dio un puñetazo en la nariz al calvo, el cual se hizo para atrás con dolor. Era el chico, que era bastante alto, contra dos gorilas. Si Cameron no se hubiera armado de valor, y una rama gruesa, tal vez hubieran matado al chico. 

Cuando la rama se partió en dos al impactar contra la espalda del calvo el chico agarró el brazo del pelirrojo y lo jaló para que empezara a correr. 

"Me llamo Jonas, por cierto" dijo el pelinegro mientras corrían.

"Cameron"