30 Dias |Jos Canela| TERMINADA/EDITANDO.

CAPÍTULO 135 El Inicio.

Narra _____:

-______... _____... despierta.-la voz de Ximena invadía mis oídos.

_____: ¿Que hora es?-digo apresurada, frotandome los ojos, con gran pereza, el televisor continúa encendido y unos cuantos rayos de luz empiezan a colarse por la sala.

Ximena: Son las siete treinta de la mañana... no quiero preocuparte, pero Luke y Sebastián, aún no han llegado.-habla mientras se levanta del sofá.

_____: ¿Como que no?-digo y la tos se hace presente.

Ximena: Tengo clase en la Universidad a las nueve de la mañana... vamos a buscarlos, tenemos tiempo.-dice y me levanto del sofá, corro a mi habitación para arreglar un poco mi aspecto, las ojeras en mis ojos se hacen notables, apenas si dormí un par de horas, por la espera de mi hermanos, los dolores en el abdomen siguen siendo intensos. Me meto a bañar, una ducha rápida que me despierte, no tenemos mucho tiempo, no quiero hacer que mi amiga pierda su clase.
Una vez más, la tos invade mi pecho, pero esta vez se intensifica, la garganta duele y pica.
Diez minutos y salgo del baño, algo básico es lo que visto el día de hoy: Jeans y playera negra con una sudadera Gris con la pequeña imagen de un alien a lado izquierdo, y unos Converse negros. El dolor en la garganta es notable, tomo un jarabe que el propio doctor me recetó para calmar la tos. Mi pelo va suelto, salgo de mi habitación y observo a Ximena en la sala, quien ya se ha cambiado desde temprano, la miro, está arreglando un poco la sala.

_____: Sube al auto.-le digo mientras tomo las llaves del mismo, salgo tras Ximena y subo al auto. Antes de encender el auto, doy un gran respiro, el hacer las cosas rápido me ha dado mareos, algo malo esta pasando, puedo sentirlo.

Ximena: ¿Todo bien?-me pregunta.

_____: ¿Puedes... Puedes manejar?-le pregunto. Ella mueve su cabeza en señal de si, cambiamos de lugares, ahora yo voy de copiloto. Ximena enciende el auto y empezamos a avanzar, le doy instrucciones de como llegar a la casa y ella conduce. Mi celular vibra en señal de mensaje, lo sacó del bolsillo de mi sudadera, son dos mensajes, uno de el mismo número desconocido de siempre y uno de Álex.

Número desconocido:
Ya me contaron lo que paso ayer, que lástima ¿No? Así son las cosas, te lo dije... no eres todo para él.

Me confundo un poco con el mensaje, trató de comprenderlo, pero si apenas puedo pensar con rapidez por el dolor en el pecho.

Mensaje de Álex:
¡Hey! Buenos días(: espero y todo valla bien, sólo quería invitarte hoy al cumpleaños de mi primo, el pequeño César, puedes venir con Jos, me encantaría conocerlo. Confirmame si puedes.

Sonrió por el segundo mensaje, ignorando completamente el primer mensaje.

Ximena: ¿Quien te escribe?-me dice cuando guardo mi teléfono, sin darle una contestación a Álex.

_____: Recuerdas a Álex...-le digo.

Ximena: ¿Tu ex de ojos bonitos?-me dice y yo muevo la cabeza en señal de si.- ¿Que pasa con él?- dice sin despegar la vista del camino.

_____: Lo encontré ayer en el supermercado... fuimos a comer y platicamos un poco...-le digo con una ligera sonrisa.

Ximena: Le diré a Jos.-dice riendo, ruedo los ojos con gracia. Poco a poco nos acercamos más a la casa.

_____: Métete en esa pequeña entrada.-le digo, Ximena hace unas cuantas maniobras con el volante, empezamos a entrar en el terreno de la propiedad.

Ximena: Algo me dice que algo está mal.-dice cuando estaciona frente a la casa.

_____: Ya estamos aquí, hay que averiguar que pasa.-le digo, ambas salimos del auto. Abro el portal de la casa y entramos, hay vasos en el patio principal, serpentinas, globos y demás basura.
Abro la puerta de la casa, la recepción parece estar bien, pero el caos comienza cuando llegamos a la sala principal.