Capítulo 30

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Residencial Bloques de Iglú, Frost Lagoon.

Medianoche.

Todos estaban frente al gran portón de hierro esperando a que Skye les abriera. Luego de la gran sorpresa dada por ella vino la incertidumbre.

-No lo comprendo, Nick-  Dijo Judy casi en tono lastimero, mirando al zorro, quién daba vueltas cortas, pensando. – La carta de tu madre decía que este era el lugar. No había manera de que fuera un engaño, de que se citara con Archie Rey en una casa deshabitada.

-Claro que Marie no mentía, sus negocios con Archie estaban concretados.- Contestó el zorro.- Solo era cuestión de que se vieran para repartir la mercancía. Incluso yo debía estar aquí, no olvides la carta que Kitty me robó. Aquí ocurrió algo raro.

- Y no creen que ese tipo, Archie, pudo mandar a vaciar el lugar luego de lo que pasó ayer en su casino.- Propuso Finnick, siendo para él lo más probable.- Digo, es lo que yo haría si supiera que hay "espías" poniendo de cabeza mis negocios.

-No, no creo que pudiera hacerlo. Yo…- La coneja hizo una mueca de culpa.-…lo dejé inconsciente en su habitación. Estoy segura de que cuando despertó el ZPD ya lo tenía custodiado en el hospital. Él debe estar internado ahora.

-..O en la morgue. –Dennys no perdía oportunidad de fastidiarla aun en los momentos más difíciles. Judy, como policía, su primordial deber era proteger a los civiles, nunca lastimarlos. Ella todavía se sentía mal por lo que tuvo que hacer. –Fue eso o tu novia la ladrona llegó antes que nosotros. La madame lleva desaparecida dos días desde sabíamos que iba a llegar a la cuidad y tu carta, todavía más. Tiempo de sobra para que haya llegado y limpiado todo.

Esa fue la primera sospecha de Nick y para nada lo reconfortaba. De ser verdad lo que Dennys decía, podía dar por perdida su oportunidad de atrapar a Kitty y recuperar sus cosas y a su madre.

Todo lo que había hecho ¡Para acabar así!

No podía existir un zorro más desdichado que él.

-No te apresures a los hechos, hermano- Rob, sensato y cerebral como de costumbre, siempre tenía una manera de ver la cosas diferente al resto. – Ni Archie Rey pudo mover toda su mobiliaria en un día, ni Kitty se llevó los mismos.

Nick también había pensado en esa posibilidad, sonrió discretamente al ver que su joven amigo era tan listo como para pensar igual que él.

-Cierto.- Lo apoyó.- Si la casa está vacía puede ser porque Archie Rey ya planeaba robarle a La madamedesde antes de reunirse. Los felinos son tramposos por naturaleza y codiciosos, muy codiciosos. Tal vez solo sea un escaparate lo de la casa desocupada.

-Exacto. Hasta no revisar la mansión de palmo a palmo nada es seguro.

-Da igual, de todas formas veníamos a morir por nada. – El zorro trepador se encogió de hombros. -Solo es una pena no poder estrenar mi calibre 45 con tu fea noviecita, lo he tenido reservado para su clan desde hace tiempo.

-Kitty podría estar en camino y sin custodia en este lugar, es nuestra mejor oportunidad para atraparla. –Después del caso de las joyas, Kitty van Tousse era lo más importante para Judy. Ella era la clave para completar no solo ese, sino también el caso perdido de Jack.

-Tenemos que estar alerta, entonces. –Convidó Finn.

En ese momento el portón eléctrico se abrió lentamente, haciendo un rechinido escandaloso que resonó en todo el lugar. Skye había entrado a la mansión y buscado el cuarto de operaciones para desactivar la seguridad del portón. Al parecer, la morada no estaba del todo abandonada, la electricidad seguía en uso.

Maestros del engañoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora