Capítulo 9.

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Capítulo 9.

Departamento de Investigación Policial, Zootopia Central.

7:00 a.m.

Jack llegó justo a tiempo.

Hacía ya varios años que no visitaba su primer recinto policial: la ZPD del Centro.

Lo invadió una ola de sentimientos al pasar por la recepción y encontrar a Benjamín Garraza con su caja de donas doble azucaradas.

La liebre lo miró tomar aire cuando lo vio acercarse, preparándose para la bienvenida.

-¡NO-LO-PUEDO-CREER!-Exclamó atónito el enorme chita, llamando la atención de todos los que pasaban-¡¿Acaso mis ojitos me engañan...o de verdad esta frente a mi Jack Savage?! -Rió con alegría cuando él alzó la pata para saludarlo, por supuesto, contento de verlo también.-¡Sí que es él!

-¡Tanto tiempo Ben!-Extendió los brazos sin soltar su maletín, contagiado por el buen humor del felino-Veo que no has cambiado nada.

-Lo mismo puedo decir de ti...aunque más bronceado-Sonrió apoyándose hacia adelante en su escritorio.

-Sí...creo que olvide usar bloqueador solar en todos estos años en la ZPD arenosa y no querrás ver mis patas traseras, son un asco.

-¡Te tomó la palabra!

Ambos rieron.

-Entonces...-Continuó Ben-...estarás aquí un buen tiempo, resolviendo tu caso congelado . ¿Cómo te sientes?

-Totalmente listo, amigo. Esta vez cerraré esa investigación aunque me cueste la vida.

¡Ups!

Fue un completo error haber dicho algo así...o al menos el tono en que lo dijo, lo supo cuando Garraza lo observó ligeramente preocupado.

"Claro, ¿cómo no lo estaría...?si soné justo como en antaño, como un fanático. ¡Traigan la camisa de fuerza, por favor!"

Debía evitar decir cosas como esas en voz alta.

-Eemh...¿Y dónde se reunen ahora con el Jefe Bogo? Necesito que me dé la información sobre nuestro caso del camión de contrabando de joyas -Cambió de tema antes de que le soltaran otro sermón.

-Sí, bueno...-Ben aún lo miraba con precaución.-...está en el mismo lugar, no han transferido la sala de juntas,ya sabes el camino.

-Claro...-Se puso en marcha-nos vemos luego.

-¡Suerte con la investigación!-Le gritó al verlo doblar en la esquina y luego susurró:-Pobre conejito, se volverá loco de nuevo.

(...)

Empujó la enorme puerta de madera y lo primero que encontró fue al Búfalo fortachón dando reportes de las últimas noticias de esa mañana a una sala llena de grandes y fuertes animales uniformados y, extrañablemente concentrados. Un panorama divertido, sus colegas del Centro no eran precisamente silenciosos. Algunos eran caras nuevas para él pero en su mayoría los veteranos eran amigos suyos de su época en la academia.

Todos los espacios estaban ocupados, excepto uno.

-...Y por último, a primeras horas recibimos noticias de un accidente automóvilistico en una curva en los alrededores de Colinas de Nieve. Quiero que Hopps y Lobato vayan de apoyo para la ZPD Polar...

El lobo accedió pero de parte de la coneja no hubo respuesta.

-¡¿Dónde diablos se metió Hopps?!-Bogo se reacomodó las gafas buscándola, extrañado.

Maestros del engañoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora