Capítulo 35
________ había corrido hacia la casa, pero igualmente se había empapado. Ahora estaba temblando frente a su puerta, y buscaba las llaves. Tenía que darse prisa. Había oído que Justin la llamaba, y lo había visto de reojo cuando entró en el vestíbulo, pero no quería verlo en este estado… o quizá no quería verlo nunca más. Solo deseaba entrar en su piso, cerrar la puerta con llave y meterse en la cama por siempre jamás. Pero a ________ le temblaban las manos, y Justin salió del ascensor y estuvo junto a ella antes de que alcanzara a abrir la puerta.
—________… —dijo, pero ella fingió no oírlo y continuó intentando abrir la puerta.
Justin se acercó un poco más. Estaba todavía más mojado que ella, pero ________ no se volvió, ni siquiera cuando sintió el pecho de él pegado a su espalda. Él quiso cogerle la mano, pero ella la apartó bruscamente. ¿Cómo se atrevía a tocarla?
Abrió por fin la puerta y trató de entrar dejándolo a él fuera, pero Justin fue más rápido y encajó el hombro para que ________ no pudiera cerrar.
—Vete —dijo ella, sin mirarlo—. ¡Fuera de aquí!
—________, comprendo que estés furiosa, pero tienes que…
—¡No quiero saber nada de ti!
—Pero yo…
Ella se volvió para mirarlo. No le importaba que Justin la viera con esa pinta. Después de todo, él no significaba nada para ella.
—¿Te has operado otra vez de apendicitis? —le preguntó con su voz más malvada—. Esa sería la única disculpa que podría aceptar.
—¿No te parece que estás exagerando?
—No —respondió ________, y trató de cerrar la puerta contra el hombro de Justin.
—¡Ay! —se quejó él, y la abrió de un empujón.
—No entres, no serás bien recibido —le advirtió ella, y miró buscando a Selena y a Ryan. Nunca estaban cuando los necesitaba—. Me has ofendido, lo que has hecho me ha herido de verdad.
—Lo siento, de verdad que no era esa mi intención —dijo él, tratando de apaciguarla.
—¿Con quién estabas? ¿Con Demi? ¿Te la estabas follando por lástima? ¿O era Ruth? Si no era ella, sería Carole de San Francisco. —Le dio la espalda a Justin y fue hasta el fregadero. Tenía hipo. Una mujer que hipa ha perdido la dignidad—. Ah, puede que te estuvieras tirando a Enid. Seguro que era algo muy aeróbico.
Él hipo volvió a sacudirla; ________ llenó un vaso de agua en el grifo e iba a bebería cuando Justin le respondió.
—Estaba con Caitlin, pero también tuve que ir a ver a mi… —________, sin detenerse a pensarlo, le arrojó el vaso a la cara. Justin se cubrió con el brazo como para evitar un golpe—. Me lo merezco —dijo tras un instante en que ambos se quedaron inmóviles y en silencio—. Sé que me he portado muy mal, pero tienes que reconocer que tú también tienes tu parte de culpa.
—Sí, claro, ahora échame la culpa. La próxima vez violarás a una chica y dirás que ella te provocó. —Justin la cogió de los hombros—. Suéltame —dijo ________, y trató de apartarse.
—No te soltaré hasta que no te calmes, me escuches y hablemos como corresponde.
—Vete a hablar con Caitlin —le espetó ________.
Trató de soltarse, pero él era demasiado fuerte. Ya no podía soportar más aquello. Se sentía tan decepcionada, tan furiosa y avergonzada, que volvió la cabeza, se cubrió el rostro con las manos y se echó a llorar. Justin aflojó entonces la presión y finalmente, como si hubiera estado esperando durante años, la besó, primero con suavidad y luego apasionadamente. ________, asombrada, se resistió, pero al final le devolvió el beso. Aquello era el paraíso. Era… todo. Comenzó a temblar. Justin le besó el rostro, y luego las lágrimas todavía prendidas a sus pestañas. Las pestañas de él estaban mojadas por la lluvia, y ________ las sintió contra su mejilla, acariciándole los labios y la frente. Después él buscó otra vez la boca de ella con la suya.
