Capítulo 21

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- el frío en aquel pasillo era insoportable, me encontraba con raven esperando noticias de lexa.

-dijeron que ella estaría bien, pero se muy bien que lo dijeron de puro consuelo, ella estaba desangrada... aún tengo su sangre en mi ropa, también estaba muy cansada... yo lo estoy. Pero la gran diferencia es que ella recibió un disparo... Todo esto me parece tan injusto.

-familiares de Lexa Woods !- una señora vestida de blanco nos llamó y cuando me vio me regaló una sonrisa parecía ser bastante amable. Cuando  nos llamó por reflejo le di un manotazo a raven para que se levantará y me acerqué a la señora lo más rápido que pude.

-yo... y ella somos las únicas. - señaló a su amiga rápidamente.-

-okey... eres su hermana, linda ?- pregunto la enfermera mientras comenzaba a caminar y miraba rápidamente los papeles de su mano.

-no, soy... soy su esposa.- Dios !, porque dije eso!?, estas personas siempre revisan el historial de cada paciente, no tardarán en darse cuenta de que estoy mintiendo.

-la esposa?... vaya, no están muy jóvenes para eso.?- pregunto bastante sorprendida.- tus padres lo aprobaron ?- volvió a preguntarme con visible curiosidad.

-no... Es algo secreto, ya sabes, sólo nosotras dos.- conteste con bastante nervio, este tipo de preguntas me están poniendo muy nerviosa, joder sólo falta que del hospital llamen a casa y les digan familia de clarke Woods por favor presentarse al hospital por temas judiciales.

-secreto ?, no te juzgó niña... el amor es amor, no tienen que ocultarlo, a algunas personas no les gustará y a otras si... pero lo único que tiene que importarte  de verdad es tu felicidad.

-es complicado... pero gracias. - le agradecí aquel dulce gesto de la señora y es que vamos... una señora que aprueba una relación homosexual es algo que no se ve todos los días, la mayoría siempre están en encontra.

-bien, me alegra que me escuches, ahora vamos a hablar algo rápido de tu esposa, esta bien señorita Woods?- sonrio al decir esto ultimo y raven que había estado callada todo este tiempo se carcajeo pero volteó la mirada rápidamente para intentar fingir que reía de otra cosa, ya te conozco amiga...- esta algo grave... no es algo de que preocuparse, se puede recuperar con algo de descanso y bastante comida porque está muy delgada para su altura y le vendría bien con todo esto que le paso. Tambien es mi deber informarte que por la pérdida de sangre tu esposa tendrá ciertos sintomas entre ellos está el cansancio, sueño, dolores y puede que  le duela un poco el pecho... ya sabes su corazón sufrió bastante por el susto y demás, así que sería bueno no angustiarla.

-y con todo eso ella está bien ?- pregunto la Latina bastante impresionada- porque prácticamente estas diciendo que está bien pero que andará como medio zombie ?

-mmm ese termino no es muy adecuado pero si, es increíble verdad ?, el doctor estaba igual de entusiasmado porque de todos nuestros pacientes a los largo de los años nunca vimos algo asi - termino diciendo la señora mientras sonreía.- esa muchacha tiene una fuerza no muy propia para ese cuerpo.

-donde está el doctor ?- pregunto la rubia con visible curiosidad se supone que el tenía que hablar con ellas sobre esto sería el y no una enfermera.

-oh cariño, el esta atendiendo a un niño con los huesos del brazo viendo a otro lado... esos niños y sus patinetas, nunca aprenden - suspiro cansada y miro rápidamente su reloj de mano.- oh Dios mío!, lo olvidé completamente, disculpa mi nombre es Siovane.- extendió su mano. - no se porque pero cuando vi mi reloj recorde que nunca me presenté.

-oh no se preocupe nosotras tampoco nos presentamos de todos modos, me llamo clarke.- aceptó el saludo de aquella dulce señora.- un gusto.

-el gusto es mío Clarke, Bien es aquí.- paro de caminar y clarke miro o puerta al lado de la señora y cuando quiso abrir la puerta la señora se lo impidió y la miro bastante sorprendida.

Mi mejor casualidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora