A pesar de que Jihoon ya está estable todavía no le han dado el alta, ya que quieren saber cual fue la causa de todas esas heridas que tiene en el cuerpo.
Su madre llegó a la mañana siguiente causando un alboroto en recepción. En cuanto vió a Jun prácticamente se lanzó hacia él pidiéndole explicaciones sobre porqué su hijo estaba en el hospital, Jun simplemente omitió palabra alguna pronto daría las respuestas correspondientes.
Cuando la señora Lee pidió ver a su hijo se tranquilizó, al parecer ya había sacado toda la impotencia y rabia con Jun. A los cinco minutos de que la madre había entrado a ver a Jihoon llegó Soonyoung con dos tazas de café en las manos, en el antebrazo traía una bolsa de papel marrón. Jun fue a su encuentro para ayudarle con los cafés.
—Gracias.—Soonyoung suspiró y esperó a que ambos estuviesen sentados para entregarle a Ju su café correspondiente.—Como no sabía cual te gustaba solo te traje café simple. —Agarró la bolsa de papel y sacó de esta un brownie de chocolate.—Tampoco sabía que dulce te gustaba por lo que te traje de este tipo, si no te gusta me lo puedes dar.
Jun cogió la taza de café y el brownie agradeciéndole como corresponde, tal vez Soonyoung no era tan malo como pensaba.
— Sabes.—Soonyoung miró fijamente la taza de café mientras delineaba con sus finos dedos las figuras imprentas en esta.—Creo que después de todo esto que ha pasado, sería mejor no volverlo a ver.
—¿A qué te refieres?.
—Es mi culpa que todo esto haya pasado, sino hubiese salido conmigo y se hubiese quedado contigo él estaría bien en su casa, a salvo y no aquí.
—Soonyoung... vamos, no digas eso, aunque me cueste admitirlo, Jihoon aceptó salir contigo por alguna razón ¿No?. Él quiso salir contigo, tú no lo obligaste.
Kwon mantenía la mirada fija en su taza de café, su respiración era tranquila y sin alteraciones de por medio.
—Ey te estoy hablando señor egocéntrico, aquí la persona que tiene la culpa de todo es su madre, es ella la que hace que él se corte.
Soonyoung al fin le había dirigido la mirada, era una de confusión.
—¿Qué quieres decir?.
—No sé exactamente lo que pasa en esa casa pero te puedo asegurar que no es nada bueno.—Jun tragó un poco de saliva y continuó.—Necesitamos hacer algo por Jihoon, ambos
—Pero ¿Qué podemos hacer? Ni tú ni yo vivimos allí, es obvio que si vamos ella negará todo e inclusive se comportará como una madre ejemplar.
—Lo sé pero-
—¿Soonyoung? ¿Jun?.—Una tercera voz se agregó a la conversación, era la Doctora Kwon preguntando por ambos jóvenes.—Jihoon a pedido verlos, pero solamente serán cinco minutos. ¿Quien irá primero?.
Ambos se miraron, Soonyoung deseaba ir pero sabía a la perfección que Jun tenía más derecho que él.—Que vaya Jun, yo iré después.
Jun y la Doctora Kwon asintieron con la cabeza.
—Jun acompáñame, por aquí.
La madre de Soonyoung comenzó a caminar con un paso rápido por un pasillo celeste perezosamente extenso y con tan solo dos ventanas que daban a la avenida más cercana estaba decorado con cuadros de pacientes sonriendo y algunas campañas del gobierno.
La Doctor Kwon paró frente a una inmensa puerta blanca, tenía una angosta pero extensa ventana en la que se podía divisar la camilla de Jihoon, tan solo necesitaba moverse un poco más para poder verlo.
—Bueno, sólo cinco minutos.
—Entendido.
Jun abrió la puerta lentamente, recorrió toda la habitación con la mirada, tenía unas ventanas por las cuales se colaban los rayos de sol, las paredes estaban pintadas de un azul cielo adornadas con pequeños cuadros de niños jugando, frente a la cama había un pequeño televisor encendido. En la cama yacía su pequeño Jihoonie tapado con sábanas blancas.
—¡Jihoonie! estás vivo.—Jun corrió a un lado de la cama y tomó su pequeña y delicada mano entre las suyas, acariciándolas tiernamente.
—¡Ya Jun!. Que no ha pasado nada grave.— Jihoon sacó su mano alborotadamente, ni siquiera en el hospital sus hormonas se podían controlar.
—Jihoon, me has dado un susto tremendo. —Se acercó un poco más y lo abrazó mientras las lágrimas mojaban su ropa.—Perdóname.
—...No tengo nada de perdonarte, esto lo he hecho yo no tú.
—Escúchame, de ahora en adelante te protegeré cueste lo que cueste, te ayudaré con lo de tu madre para que tú puedas ser feliz. No quiero volver a ver que te hagas daño por esa mujer que ni lo merece.
—Es mi madre...
—Ni siquiera por eso, no tienes que hacerte daño Jihoon, sabes que te quiero demasiado, si te pasase algo yo... yo no lo resistiría ¿Entiendes?. Lo único que quiero es verte sonreír como lo hacías antes.
—Jun... yo lo siento. —Esta vez fue Jihoon quien lloró en el hombro ajeno, sujetando firmemente la camisa de su mejor amigo.
Soonyoung entró con una sonrisa que desde kilómetros de distancia se notaba la falsedad con la que la hacía, caminó hasta el lado derecho de la cama y se sentó en el pequeño banquillo que había allí. Abrió la boca como si quisiese decir alguna oración pero poco a poco sus labios se fueron juntando y las ansias de llorar fueron apareciendo. Al final fue Jihoon él que lo consoló.
—Discúlpame, esto ha sido culpa mía no debí de haberte invitado a salir.
—¿Qué dices?. En nuestra pequeña salida la he pasado genial, fue la primera vez que sonreí desde hace un tiempo.—Jihoon le tomó de las manos y le sonrió. —Además, tenemos una salida pendiente.
—Jihoon yo...—Soonyoung se sonrojó de golpe, lo cual fue extraño para el menor el cual inclinó levemente su cabeza hacia un lado. —No sé como decirte esto ¿Sabes?. —Dio un suspiro y continuó, esta vez mirando a Jihoon.—No sé la razón, pero desde el momento en que mis ojos te vieron tu figura quedó impregnada en mis pupilas, tanto es lo que te pienso que lo único que quiero es verte feliz y de hecho, quiero hacerte feliz.
4/5
Lo subo antes porque así tengo tiempo de leer las actualizaciones de mi señorita C_opaco

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Ámate [K.S.Y L.J.H]
Fanfiction"Lee Jihoon sufre de depresión. Lee Jihoon se odia a tal punto de no querer ver su reflejo." Donde Jihoon necesita amor y Soonyoung es el encargado de devolver esa sonrisa perdida; Donde Jihoon piensa que no es nadie en el mundo sin pensar que para...