XVIII. Las finales parte I

149 3 23
                                    

Aclaraciones a lo largo de este long fic:

"Letra cursiva y entre comillas son pensamientos"

~...Flash Black...~

(...Sueños...)

[...Visiones...]

Para aclarar por si andan perdidos: Gaidel Taisei & Hinata Kusanagi, son los padres de Keiko Kusanagi, Taiyo Kusanagi y Leona Heidern (Keiko fue adoptada por sus tíos de lado materno, después voy a desarrollar la parte de Taiyo Kusanagi en los próximos capítulos, para que sepan el "¿Por qué?" de ser hijo de Gaidel) En este capítulo voy a mencionar algo sobre la madre de Iori, es un tema que me pareció curioso en un manga que leí (lamentablemente no es canon pero se me ocurrió agregarlo

[Capitulo anterior: XVII. Epifanía]

Leopold re apareció en el medio del camino manteniendo su amplia sonrisa en su rostro, porque pronto ella volvería a convertirse en lo que fue en su pasado...

—Llegó el momento de despertarte de nuevo, Leona...

XVIII. Las finales

Parte I

~I~

~...~

Su padre supo de la existencia de otro servidor a su Dios, lastimosamente al conocerlo supo que sería un problema. La Hakkesshu del Agua era un problema, al igual que su hijo Gaidel Taisei; de tan solo nueve años, de cabello azul marino oscuro y ojos azul cielo. Este sospechaba del apellido que tenía su nuevo amigo porque se parecía tener alguna coincidencia con algún antepasado. Ese niño sabia manipular el agua, igual que su madre...Lastima que tenía un corazón puro, humano, inocente, débil y tan frágil. Desde que se conocieron en su infancia, Gaidel nunca estuvo interesado en servir a alguien que no le agrade.

Obviamente, "el rey celestial" desaprobaba su opinión.

Ambos crecieron juntos por un lado el señor Goenitz y por el otro la señora Taisei donde sus hijos fueron criados como hermanos. No fue fácil compartir el mismo techo con alguien como Gaidel, un niño inocente...Tampoco había sido fácil establecer amistades pero obviamente, ese niño si podía.

— ¡No seré como esos seres inútiles! —Exclamó el niño, tras saber que tenía que convivir entre mortales irrespetuosos— ¡Cuando sea mayor, seguiré el destino que Orochi me ha dado con mis visiones!

Su padre lo observaba con una fría e penetrante mirada que ante la presencia de la señora Taisei y de su hijo le causaba escalofríos. Sin dudas, ya se hacían la idea de que Goenitz sería diferente a su padre... No iba ser misericordia con los humanos.

Leopold se mantenía con su soledad, no era alguien de hacer amistades: ni siquiera le importaba que saber que era distante, también un poco egocéntrico para un pequeño de diez años, su educación había sido estricta a diferencia de su querido amigo, Gaidel Taisei. ¿Quién diría que estos dos llegaron a ser como hermanos? Algún día ellos tenían que crecer, -cuidarse y protegerse el uno al otro ¿no?- como diría la señora Taisei.

Esta familia tenía que comportarse como humanos para camuflarse ya que iban hacer así, nadie sabría de la tragedia que pasaría más adelante con los adultos Hakkesshu...

...

Varios años hacia adelante...

¿Qué pasaría sí, Leopold quería a alguien?-

The Brave GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora