Esencia: Mas que un poder

CAPITULO 9: Artefacto misterioso

Luego de haber seguido los cristales de color carmesí que nos llevaría por el camino correcto, empezaron a llenarse las paredes de cristales con forme avanzábamos, decidí tomar un par de eso cristales pero eran demasiado duros, que por más que los golpeara con mi espada apenas les causaba rasguños, pero finalmente dos de ellos salieron, uno lo conserve yo y el otro se lo di a Yereli, cuando tuviera la oportunidad les daría forma para que nos sirvan de accesorio.

llegamos a un lugar más grande el cual solo tenía un pasillo del otro lado, no había otra cueva en ninguna dirección más que la que estaba frente a nosotros como a unos 40 metros.

Nehitan: Esto debe ser una especie de trampa -cuando volteo a ver Yereli ya estaba del otro lado parada enfrente de la entrada.

Yereli: Esto no es un pasillo es una pared, como si fuera una pintura.

Nehitan: Esto es extraño no hay camino y esa pared... ¡Yereli detrás de ti!

Yereli: -Se voltea y ve una Ñaeria gigante como de unos dos metros, lo que era extraño porque a lo máximo crecen como 20 centímetros- Mira no es una pintura es una pantalla, pero si se ve tan real -la Ñaeria escupe a Yereli lo cual la deja inmóvil ese efecto tardaría como mínimo 10 minutos tiempo suficiente como para que se la coma.

Las Ñaeria son insectos que comen cualquier cosa que este por debajo de su tamaño, poseen dos tipos de veneno uno inmovilizante para atrapar a sus presas y otro venenoso para ahuyentar enemigos que puedan amenazarla, como el veneno inmovilizador tarda en generarlo de nuevo no puede atacarme con eso, solo el venenoso que crea mucho más rápido, las Ñaeria son normalmente negras, con seis horrible patas peludas y cuatro ojos redondos que te desean comer, su cara es igual redonda, en la parte inferior está situada su boca llena de dientes puntiagudos para destrozar los alimentos más duros o animales con piel resistente, sus patas son muy fuertes tanto que pueden saltar 10 veces su tamaño y en la parte trasera es por donde avienta sus venenos, son animales tan horrible que me dan fobia, moriría si llegara a encontrar una de tamaño normal y se me aventara encima, pero en este momento no solo yo moriría si esa cosa me salta encima.

Salí corriendo, pero el Ñaeria me aventó de su veneno justo en los ojos y no pude ver nada, cuando de repente los cristales comenzaron a brillar.

Yereli: ¿Pero que...? Este no es mi cuerpo, pero se está moviendo y no lo puedo impedir... Un momento es... ¡Nehitan!

Nehitan: ¿Que, como me puedes ver si no estás aquí?

Yereli: No tengo idea, pero si es así te puedo guiar, sigue derecho rápido ¡soy muy linda como para morir! -continúe corrió hacia enfrente, pero de repente choque con la pared- ¡Jajajaja! Lo siento no pude evitarlo.

Nehitan: ¡Si quieres seguir con vida será mejor que lo tomes enserio!

Yereli: Ya, bien da dos pasos a la derecha y sigue derecho -tras hacer eso entre a la cueva por donde se había ido Yereli.

Nehitan: ¿Y porque tu si puedes ver lo que yo, pero yo no lo que tu vez? -hablaba un poco agitado mientras corría detrás de la rápida Ñaeria.

Yereli: Porque a ti te segaron, aunque sería bueno que supieras lo que le está pasando a mi cuerpo solo lo ciento, pero no lo puedo mover... ¡Alto! Delante de ti hay más Ñaeria.

Nehitan: -saque mi espada- Tú me tendrá que decir por donde están.

Con un poco dificultad logre matarlos y con un poco de ayuda de Yereli, los Ñaeria seguían llegando uno tras otro sin dejar avanzar las iba matando, partiéndolas en dos, cada vez escuchado más fuerte la voz de Yereli hasta que logre alcanzarlo pero en ese momento otros dos Ñaeria se atravesaron esta vez con más facilidad los mate, cuando lo alcanzó le corte una de sus 6 patas el solo cayo y soltó a Yereli quien rodó en el suelo por la caída, la Ñaeria trato de levantarse pero antes de que hiciera eso le corte la cabeza, dejando su cuerpo decapitado.