CAPITULO -2: Amor para siempre

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Año 2433

Planeta Nowat, región Ibarach lado norte.

En una ciudad calurosa como casi todas, pero no tan grande como las otras de la misma región, vivía una pequeña niña de doce años la cual era una clase 1, viviendo en su planeta origen, una niña muy entusiasta y que no podía quedarse quieta mucho tiempo, siempre tenía que andar de un lado a otro sin embargo no se le hacía fácil tener amigos, el único que lo era es un chico de pocos meses mayor que ella el cual conoce prácticamente desde que nació ya que sus mamás son muy buenas amigas, el chico no es un clase 1 como ella, él es un clase 6 y a diferencia de los otros de su misma clase este chico logro unificar su mente y pensar como un solo ser, sin perder la habilidad de las dos mentes que tienen su clase.

Muy pocos logran hacer esa hazaña y él lo logró hacer siendo muy pequeño, eso le da muchas posibilidades de grande ya que puede llegar a ser alguien con un poder realmente asombroso y ser parte de la escolta de honor de algún príncipe o incluso de algún rey.

Su único y mejor amigo en el sistema solar, uno a simple vista pensaría que ellos son los mejores amigos del mundo por lo menos de este, pero ellos son un poco más que amigos, técnicamente ya son novios a pesar de su temprana edad, los dos están conscientes de lo que ser novios significa, pero en particular ellos lo hacen por un simple significado, el cual es que de esa manera ellos aunque estén lejos podrán sentir que tienen alguna conexión que los haga sentir cerca, pues un presentimiento mutuo los hizo sentir que habían estado separados por tanto tiempo y ya no quieren sentir lo mismo.

Seguido el chico le regala piedras pero no piedras normales sino que piedras preciosas aunque no del tipo como diamantes, zafiros u otros, sino que literalmente piedras aunque no como las normales ya que estas tienen un color peculiar, tipo tornasol las cuales no son tan comunes y como en este planeta es muy difícil que crezca la veneración es lo más parecido a una flor, el chico es muy diferente a ella ya que el más tranquilo y cuando la chica esta siempre con él, ella igual es más tranquila, una mañana ambos niños se juntaron como cualquier otro día.

Niña: Oye, escuche que mi papá estaba hablando de una mazmorra cercana en la que hay una flor realmente hermosa y está hecha de cristales, ¡Dos de mis cosas favoritas! -insistió con emoción.

Niño: Yo también escuche de eso, es la flor del alma y la mazmorra no está muy -pauso de golpe sus palabras por un momento al ver la cara de emoción de la chica, sabiendo exactamente en qué estaba pensando- no, no, no, ya sé que piensas hacer y aun así no sé porque te conté más, ese lugar es peligrosos no podemos...

Niña: ¡Si vamos! Tu estabas a punto de decirlo, no está muy lejos así que podemos ir, además es una mazmorra de bajo nivel una persona no mayor puede ir, creo que se llaman adolescente ¡Y si vamos los dos nada malo me va a pasar! -se sujeta del brazo izquierdo del chico y lo mira a los ojos con una cara tierna.

Niño: ...Es que... No lo sé... -titubeó confundido- ¡Aaaah! Está bien, pero promete que me harás caso en todo momento -la señaló con su índice derecho.

Niña: ¡Siii! Y tú me protegerlas en todo momento ¿Cierto? No dejaras que nada malo me pase, pero tampoco seré un estorbo edemas estoy aprendiendo a crear fuego ¡Nada nos detendrá! -exclamo con mucha confianza.

Niño: Eso es bueno serás muy fuerte de grande -dijo mientras des alborotaba su cabello, él siempre le decía que ella se ve mejor con el cabello todo desarreglado- se nota que ambos seremos fuertes, espero que no te arrepientas cuando estemos dentro recuerda que será peligroso así que debemos tener cuidado.

Niña: Entonces mañana mismo iremos.

Ambos estuvieron de acuerdo en ir al día siguiente y todo el resto del tiempo que estuvieron juntos se la pasaron jugando y corriendo, pero él se cansaba muy rápido ya que no estaba acostumbrado a correr tanto, por lo que en lo que el descansaba se la pasaban haciendo dibujos en la arena cosa en lo que era muy bueno.

Esencia: Mas que un poderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora