Sin Cuestiones ||Cuestion de Honor T-3||Lason||Zarry||Niam||Wive||Omegaverse||

Capítulo 14: Una noche que marcará todo

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-Tenemos que hablar.

Crystal le sonrió, sentada frente a él en el carruaje.  Llevaba un vestido de terciopelo color rojo oscuro que mostraba con generosidad un escote que era tan hermoso como prometía.

-Esperaba esto...

-Tenemos que terminar nuestra relación, Crystal.

-Pero... nos llevamos bien... y nos hemos acostado...

-Crystal, yo... lamento todo esto, de verdad, yo...

-No lo entiendo.  Nos llevamos muy bien y nuestras familias adoran nuestra relación. 

-Pero yo no te amo.

-Tampoco yo a ti, pero el amor no es lo importante.  Eso llegará después.  Funcionamos bien.  Me gustó acostarme contigo, y dado el estatus de mi familia no es algo que haga con cualquiera, solo con mi ex prometido y contigo...

-En mi casa siempre he visto una familia basada en el amor.  Me caes muy bien pero no me puedo engañar a mi mísmo.  Sigo enamorado del omega...

-El que te partió el corazón.  -Crystal le sujetó la mano – si nos casamos no seré tan resistente a ir al dormitorio contigo... me entregaría a diario...

-No.  No puedo.

Crystal suspiró.

-No rompamos.  No te precipites.  Vamos a intentar si logramos que esto funcione y que olvides a ese hombre.

-No te prometo nada.

-Tampoco yo te lo pido.

-¿No estás aún vistiéndote para la fiesta?  Ojalá yo pudiera ir -Louis entró en el cuarto de Clive, que abrió sorprendido los ojos.  Estaba dormido. 

-Sí, ya voy...

-Y tienes una cita con ese Mariano...

Clive volvió a cerrar los ojos.  Louis se acercó y le sacudió el hombro.

-Trata de mostrar al menos un poco de emoción.

-Creo que no iré a la fiesta.  Estoy cansado.  Y de mal humor.  Y no me siento bien. 

-Tienes que ir.

-Quisiera ir con William...

-Pero vas con Mariano. Vamos, arréglate.  Ahora.

Clive se dio la vuelta y Louis gruñó. 

-¡Arriba!

Clive se sentó pero escondió la cara entre las manos.  Respiró hondo.  Tres veces.

-¿Clive?

Él omega corrió hacia la palangana donde se aseaba y escupió varias veces.  Luego tuvo una arcada.

-No estás hecho para el mar. -dijo Louis – Creía que ya te habías acostumbrado y ni siquiera sé está moviendo tanto, solo un poco...

Clive no dijo nada.  Se lavó la boca y Louis sacó su ropa de gala del baúl.

-¿Estas algo mejor?

-No tengo otro remedio que acostumbrarme a esto -dijo Clive.  Louis eligió una corbata.

-Estas muy raro.  Sé que el viaje fue duro y que las cosas entre mi tío y tú están complicadas pero... trata de disfrutar de la fiesta.  Y no pienses en el movimiento...

William estaba conversando con el capitán cuando Clive entró.

Espectacular.  Hermoso.  En un traje gris brillante, con una sonrisa y acompañado de ese alfa.

William trató de no mirar hacia allí.  Clive se reía y hablaba, y cuando la orquesta empezó a tocar, aceptó la mano de Mariano para bailar con él.

Trató de no darle importancia pero no podía evitar hervir de celos.

Al fin, tomó aire y se acercó para que bailase con él.

Louis estaba demasiado aburrido, pero ya había protagonizado demasiados escándalos y no quería que ir a bailar con su barriga tan notable fuese otro. 

Estaba leyendo un libro pero su cabeza volaba y pensaba.

Jason.

Estaba cerca de Jason.

-Jason -susurró -¿me recuerdas?

-Como si pudiese olvidarte -susurró -Jason.

-¿Querido? ¿De que hablas?

Jason sacudió la cabeza.  Lo había dicho en voz alta.

-Me voy a casa.  Iré caminando, ve en nuestro carruaje.

-Pero...

Jason dejó a Crystal con la palabra en la boca.  Necesitaba ir a casa.  Ir a casa y pensar en porqué había escuchado la voz de Louis claramente en su cabeza.